Honradez intelectual es el primer requisito en la política‏


Traemos esta frase del presidente de Uruguay, Mujica, al referirse recientemente a preguntas de periodistas españoles.


Dando claras declaraciones de que la honradez intelectual esta huérfana en muchos aspirantes políticos y en otros que la suerte le ha tocado ocupar algún cargo político.

Y ya son varios los presidentes de naciones, sociólogos, intelectuales que se ha referido al mismo tema de la honradez intelectual en el aspecto político simplemente queriendo decir que son muchos los políticos que no son autentico, se mienten entre ellos mismos y algunos también le mienten al pueblo.

Muchos se dejan perder por los cantos del buen vivir, y se olvidan de los demás.

Prometen y no cumplen teniendo a veces las condiciones para hacerlo y no lo hacen...

Se traicionan a si mismos. Se engañan a su propio intelecto. La conciencia se le vuelve vacía y arrogante.

En la política lo principal, es la honradez, y la honradez se puede poner de manifiesto políticamente hablando de varias maneras, pero se pierde también de algunas maneras y ese es un mal que afecta a muchos políticos de hoy en día.

La honradez política intelectual, se esta perdiendo, y con toda razón son muchos ciudadanos que expresan no creer ni confiar en ´algunos políticos, y posiblemente ellos sean y son los propios culpables de esa percepción por parte de muchos ciudadanos, que cada cuatro años se cambian hasta de partido.

La mentira y el error político, están en desacuerdo con realidad.

Cuando un mundo o pueblo se construye en contra de la realidad, ese mundo esta abocado a la ruina y de esa misma manera va arruinando a los hombres y mujeres, es lo mismo que decir que tener políticos con honradez políticas intelectual deshonestas, de la palabra a los hechos son caminos diferentes, y así anda el país con algunos políticos.

La honestidad se relacionaba con la decencia, el decoro, el pudor, virtudes íntimas,  cumplimiento con los demás, pero sobretodo consigo mismo.

Por eso es  falso calcular que el desarrollo de un pueblo se mida por la cantidad de títulos universitarios que cada año se emitan.

Todo político de hoy debería cuidadosamente pensar en que el poder no es para toda la vida, y que el mantener, sostener y cumplir con la verdad es un hábito personal que toda persona debería cuidadosamente cultivar y demostrar siempre.

POR BENYPICHARDO, ESPAÑA
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