Ni contigo ni sin ti.
Ni contigo ni sin ti tienen mis penas remedio, contigo porque me matas y si ti porque me muero, parece rezar la patria de Bolívar, parafraseando las letras de una bella canción, al transcurrir aciagos días de una nación cuyos malestares y dolamas prometen grandes conflagraciones en el tablero político imperial de nuestro globo terraqueo.
Los bde intereses se perciben allí, con la presencia que el olor a petróleo, oro, metales raros y más traen el olfato de rapiñas diversas, con la triste realidad de una patria dividida radicalmente en dos, de una parte una aparente mayoria de clase media y de la otra las populares, de capas económicamente inferiores, pero unido a sectores económicos poderosos, es lo que leemos al observar pura y simplemente las turbamultas de ambos bandos, excúsenme, pero es mi óptica.
Un pais definitivamente dividido, cuya solución nunca podrá ser la superposición de uno o de la otra, ha llegado la hora de una solución, pero una solución Venezolana, sin ninguna marca extrangera que no sea la de verdadera diplomacia que vaya como decimos en Neiba, “Ni a banda ni a Bandera”, que no se permita fomentos ventajosos de potencias extrañas, Venezuela para Venezuela; nosotros, quienes suscribnimos, nunca, bajo ninguna circunstancia aprobaríamos la intervención de fuerzas de ninguna naturaleza, nos asoma a la memoria la experiencia de nuestra patria el 28 de abril de 1965 que contó como saldo impreciso, a más de cinco mil vidas y las inenarrables consecuencias de aqueya y la del 1916, véanse en ese espejo hermanos Venezolanos. Siempre se asoma a mi memoria, y se la brido a los Venezolanos, la frace usada permanentemente por mi primo, fenecido ya, Federico Herasme, que decía, “es mejor un mal arreglo que un buen pleito”.
JOSÈ ANTONIO MATOS PEÑA
NEIBA PROVINCIA BAHORUCO, REPUBLICA DOMINICANA.
28 DE ENERO 2019.