DERECHOS DE FAMILIA: la familia en la legislación dominicana (8 de 9)



Acerca de las normativas que rigen a la familia dominicana y constituyen su base legal, la Dra. Eusebio Gautreaux enumera tres leyes:

* Ley 136-03 o Código de niñas, niños y adolescentes.

* Constitución de la República Dominicana.

* Código Civil y legislación complementaria.

Sobre el perfil socio-jurídico de la familia dominicana actual, aunque propios de Latinoamérica y el Caribe, identifica como rasgos esenciales que distinguen estos agrupamientos, los cuales son más frecuentes en las familias disfuncionales, los siguientes:

* Marcada desigualdad económica y social: países fundamentalmente pobres, con economías débiles y dependientes, en perpetuo estado de desarrollo. Con una población formada por muchos pobres y pocos ricos, donde la distribución no funciona adecuadamente, los bienes y las riquezas públicas están reservados para minorías. Todo esto representa carencias básicas tales como: empleo adecuado para padres, madres y jóvenes, viviendas adecuadas, programas de salud, dificultad para continuar la educación formal, etc.

* Irresponsabilidad paterna, acentuada en la ausencia de la figura del padre: condición propia de la cultura caribeña, donde el hombre no se siente tan vinculado a la prole como en otras culturas, alrededor del 34% de las familias son encabezadas por mujeres. Producto de relaciones de parejas disueltas, sólo la mujer aceptó la responsabilidad y se ve cumpliendo el doble rol de padre proveedor y madre formadora, las cuales terminan en soltería permanente una vez se disuelve la primera unión.

* Violencia intrafamiliar: rasgo distintivo de la agrupación familiar dominicana, propia de sociedades donde predomina la cultura machista producto de la supuesta superioridad sobre la hembra en todos los aspectos de la vida, la subordinación de la mujer a un rol de segunda categoría y dependiente del hombre y la manifiesta discriminación de la mujer en todos sus derechos. A pesar de los esfuerzos realizados por diferentes sectores de la sociedad frente a estas situaciones, una importante porción de la ciudadanía las concibe como normal y natural.

* Fragilidad en la unión matrimonial o consensual: una importante cantidad de matrimonios y de uniones consensuales terminan en separación.

* Importante presencia de las uniones libres: a pesar de la existencia de Oficialías del Estado Civil diseminadas por todo el territorio nacional y de los esfuerzos de la iglesia católica en pro del matrimonio canónico entre sus fieles, la unión consensual persiste como modelo preferente al del matrimonio legal.

* Flujo migratorio constante hacia el exterior de familias dominicanas completas: el constante flujo migratorio hacia el exterior está desintegrando la familia dominicana, cambiando sus tradiciones culturales, incluyendo las gastronómicas.

* Embarazos entre adolescentes: la introducción temprana de adolescentes de ambos sexos en la vida sexual está provocando un considerable incremento del embarazo

entre adolescentes, con las consiguientes dificultades que los mismos acarrean: deserción escolar, rechazo de los padres, entre otros.

A pesar de la existencia de los signos distintivos negativos descritos, con ellos coexisten en la mayoría de nuestras familias valores y tradiciones eficaces que como el afecto, la solidaridad, la armonía, la alegría propia de la cultura caribeña y la sana diversión mantienen la permanencia y unidad familiar más allá del primer y segundo grados de parentesco, los cuales son transmitidos de generación en generación, méritos que funcionan como entrenamiento frente a la dificultad.

POR AGUEDA  RAMÌREZ
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