La miseria y drogas arropan barrios de Cotuí
EN COTUÍ, ABRIL 23, 2016: En los barrios La Fortuna, Pacho Pegao y Puncha Maquito del municipio de Cotuí, sus residentes comparten la misma falta de oportunidades que le sumergen en la miseria.Se sienten ignorados por las autoridades y esto les provoca desaliento a los representantes de organizaciones comunitarias de estos barrios, cuyo denominador común es la pobreza.
Sin embargo, una de su más sentidas preocupaciones es la delincuencia, con sus secuelas de atracos y robos a plena luz del día. Los puntos de ventas de drogas operan como si fueran negocios de venta de comida.
Sin embargo, una de su más sentidas preocupaciones es la delincuencia, con sus secuelas de atracos y robos a plena luz del día. Los puntos de ventas de drogas operan como si fueran negocios de venta de comida.
Berto Hernández, presidente de la junta de vecino del barrio La Fortuna, dijo que la inseguridad es tan fuerte que en ocasiones ese lugar parece un campo de tiro, situación generada por las bandas que se enfrentan entre sí y contra agentes de la Policía. Hernández se quejó de que a pesar de las constantes denuncias y de las acciones que ocasionalmente toman los agentes del orden, estos puntos siguen en operación.
“Sobrevivir en un lugar en donde la falta de agua potable, cableado eléctricos, inseguridad social, falta de empleo, de asfalto y como si fuera poco arropado por la basura, es denigrante y esto ocurre en pleno siglo XXI”, apuntó Berto Hernández al externar su desaliento.
Aunque no lo justifica, advierte que la situación de pobreza y la falta de oportunidades están entre las causas que impulsan a estos jóvenes a involucrarse en hechos delictivos, ya que se sienten marginados. Los residentes en estos barrios coincidieron en indicar que los políticos solo se acuerdan de ellos cuando acuden a conquistar al votante con nuevas promesas sobre necesidades que son viejas y con las que nunca cumplieron, “solo les llega cada cuatro años”.
Los moradores de estos barrios les piden a los políticos que se acuerden de su situación no solo en campaña sino también cuando estén disfrutando de los cargos, ya que ellos solo regresan cuando quieren ser electos o reelectos y luego de lograr su objetivo esas promesas se quedan en el vacío.
Por Mery A. Monegro