La quinta pata del gato
Luis Eduardo Díaz Franjul
La prensa local ha publicado que el Gobierno tiene como meta crear 400,000 empleos en el período 2012-2016. Bien. Según el Centro de Exportación e Inversión (CEI-RD) se espera que la inversión extranjera siga creciendo hasta 2016 para alcanzar la meta de 108,775 nuevos empleos, es decir, el 27% de los puestos de trabajos trazados por el Gobierno. Veamos algunas consideraciones que quizás puedan incidir en la generación de empleos.
Los sectores turismo, inmobiliario, financiero, minería, telecomunicaciones, electricidad, zonas francas y empresas en general (grandes, medianas y pequeñas) son sectores productivos de bienes y servicios responsables del aumento del empleo. Estamos hablando del sector privado y/o (1) “Empresas del sector privado” que forman parte del Patrimonio Productivo Nacional (PPN) conjuntamente con (2) “Patrimonio Empresarial de la Era de Trujillo” y (3) “Empresas del Sector Público” que pudieron haberse creado después de la muerte de Trujillo (favor contar con los dedos de las manos, por un lado, y revisar la Ley de Reforma de la Empresa Pública, por el otro).
La prensa local ha publicado que el Gobierno tiene como meta crear 400,000 empleos en el período 2012-2016. Bien. Según el Centro de Exportación e Inversión (CEI-RD) se espera que la inversión extranjera siga creciendo hasta 2016 para alcanzar la meta de 108,775 nuevos empleos, es decir, el 27% de los puestos de trabajos trazados por el Gobierno. Veamos algunas consideraciones que quizás puedan incidir en la generación de empleos.
Los sectores turismo, inmobiliario, financiero, minería, telecomunicaciones, electricidad, zonas francas y empresas en general (grandes, medianas y pequeñas) son sectores productivos de bienes y servicios responsables del aumento del empleo. Estamos hablando del sector privado y/o (1) “Empresas del sector privado” que forman parte del Patrimonio Productivo Nacional (PPN) conjuntamente con (2) “Patrimonio Empresarial de la Era de Trujillo” y (3) “Empresas del Sector Público” que pudieron haberse creado después de la muerte de Trujillo (favor contar con los dedos de las manos, por un lado, y revisar la Ley de Reforma de la Empresa Pública, por el otro).
Completan el PPN (4) “Construcciones”/Obras de infraestructura que realiza el Estado, y (5) “Gasto Público social o productivo” relacionado con todo lo anterior, es decir, el factor institucional. La prensa ha publicado que el Presupuesto General de la Nación para 2014 será de unos RD$613,000 millones. Rápidamente nos damos cuenta que ese dinero solo aplica los puntos (4) y (5) del PPN, quedando fuera del presupuesto los demás puntos del PPN, los que en realidad componen el verdadero motor del bienestar
nacional junto con (4) Construcciones/Obras de infraestructura. A dónde va el resto del dinero? Esta pregunta quizás pueda ser respondida por el punto (5) del PPN.
Veamos algunos ejemplos de cómo se manejaría el Presupuesto General de la Nación dentro del PPN. Según se ha publicado, unos 600,000 servidores del Estado (incluyendo pensionados) representan el 70% del empleo generado en el país en los últimos 10 años. Según analistas se trata de un empleo improductivo porque no genera riquezas para las presentes y futuras generaciones. El sector público representa el 57% del empleo dominicano dentro del sector no regulado lo que defina la informalidad de la economía.
De suceder cambios en el Código de Trabajo se espera que los nuevos empleos se generen en el sector formal privado, el que carga con los costos laborales no-salariales. Por otro lado, si tomamos como parámetro la Regalía Pascual de RD$9,500 millones (sueldo No.13 en el 2013) en favor de los servidores públicos estamos hablando de RD$123,500 millones en 2013, es decir, 13 salarios de RD$9,500 millones. Si a esto le sumamos los RD$8,260 millones que la Junta Central Electoral (JCE) ha entregado a los partidos políticos en los últimos 16 años estaríamos hablando de un monto institucional improductivo de RD$131,760 millones hasta 2013…y contando.
Vistas las cosas de esta manera hay que ver cómo se contabilizan estos montos a partir de 2014, año tras año, de manera que coincidan con las partidas del Presupuesto General de la Nación. Todo esto le va dando forma al punto (5) del PPN. Y así con las demás partidas, incluyendo las amortizaciones de la Deuda Pública Interna y Externa, donde brillaría por su ausencia la productividad si nos llevamos de lo que ha revelado la prensa sobre el Banco Mundial. (Esto ya forma parte del punto 5del PPN.)
Según publicó el Listín Diario hace unos días (El país tiene pendiente US$133 millones en BM) los proyectos actualizados con el Banco Mundial son los siguientes: 1)Recuperación de Emergencia y Gestión de Riesgos y Desastres, 2) Dos proyectos con el Ministerio de Trabajo, 3) Interconexión de Banda Ancha - Indotel, y 4)Reformas en el sector salud; desarrollo juvenil del Ministerio de Trabajo; desarrollo municipal; agua y saneamiento - Ministerio de Economía; protección social - Gabinete de Coordinación de Políticas Sociales; y rehabilitación de redes - CDEE.
Esta deuda externa no encaja dentro del PPN. Es más bien un endeudamiento institucional de carácter internacional con las mismas consecuencias que la deuda interna. La diferencia es que la primera se paga en moneda extranjera y elasegunda en moneda local, si es que se paga. Parecería no debiera existir deuda pública interna y externa mientras se clasifican los tipos de financiamientos, como sigue: (a) Institucional de carácter internacional-productivo, (b) Institucional de carácter internacional no-productivo, (c) Institucional de carácter local-productivo, y (d) Institucional de carácter local-no productivo.
En ocasiones hemos dicho que el PPN es el que mide el bienestar nacional que resulta de la productividad traducida en bienes y servicios, generación de empleos y disminución de la pobreza extrema. Los tipos de financiamientos (b) y (d) antes señalados no encajan dentro del gasto público productivo que contempla el punto (5)
del PPN porque no generanriqueza para las presentes y futuras generaciones. Son financiamientos o deudas que junto con otras variables no productivas conllevan reformas fiscales o acuerdos con el Fondo Monetario Internacional por su incidencia negativa dentro del Producto Interno Bruto (PIB), que es lo mismo que el PNN solo que este último tiene menos variables para medir el bienestar real.
De esta manera podemos clasificar la deuda pública interna-externa que según el Ministerio de Hacienda asciende unos US$22,000 millones, y según analistas independientes sobrepasa los US$26,000 millones. O mejor dicho, clasificar el endeudamiento productivo y no productivo dentro de la deuda pública interna-externa para determinar los alcances de la productividad como consecuencia del endeudamiento y así proponer mejores formas de conducción de nuestra economía.
Visto lo anterior, da mucho que pensar que el Banco Mundial no tome en cuenta las modalidades de financiamiento antes señaladas. Solo basta acudir al historial de financiamiento de la banca pública y privada en República Dominicana para desarrollar esquemas de financiamientos relacionados con la productividad, no con el gasto, para generar empleos y disminuir la pobreza. De esta manera nos acercamos a una posible cumbe financiera que destaque el financiamiento productivo, no el institucional o el gasto.
Sin duda alguna el financiamiento institucional de carácter internacional no-productivo resulta conveniente a las entidades internacionales pararecuperar la inversión con el aval del Estado, algo cuestionable desde el punto de vista socio-económico. Es deber del Estado priorizar recursos para evitar este tipo de financiamiento. Es aquí donde hay que destacar la importancia de las grandes, medianas y pequeñas empresas, al igual que aquellas de carácter público bajo la modalidad de capital mixto (público/privado) que se puedan crear, como aquellas que se crearon en la Era de Trujillo que hicieron de la República Dominicana el gobierno más rico de América en 1962.
En esa época el Estado era la maquinaria productora del país, la que fue aprovechada y luego desmantelada por los “Empresarios de la política”, es decir, los 26 partidos políticos reconocidos por la JCE, los sindicatos del Estado, los gremios y/o sindicatos que generan ingresos (empresarios) y los que no, y los gremios y/o asociaciones incrustados en el estamento social-institucional de la República Dominicana. Pero como la Era de Trujillo está penalizada por la Ley 5880 de 1962 nada es válido y somos “más papitas que el Papa” en cuanto al manejo de fondos públicos cuyos destinos hoy día no son del todo conocidos (porque no se publican en la prensa, mensualmente) y por los altos porcentajes de corrupción administrativa en los últimos 52 años. ¡Zape Gato!