Los juegos de lotería, un negocio lucrativo y empobrecedor
Por: Marlenys Ferreraswww.mipais.com.do/
Los juegos de lotería, un negocio lucrativo y empobrecedor
Los juegos de azar son un negocio que mueve millones de pesos diariamente y los principales jugadores pertenecen a la clase más empobrecida, buscan a través de las loterías poder resolver sus problemas económicos.
Desde hace muchos años, se practican y su aceptación es extraordinaria. Sorprende tanto la gran cantidad de bancas de apuesta, rifas de aguante, y lista de números como la frecuencia con que la gente recurre a ellos arriesgándose a perder lo poco que tiene con la esperanza de multiplicar lo apostado. Se registran más negocios de ese tipo que escuelas.
En la zona rural y la urbana existe una gran cantidad de bancas de apuestas, ya sea de loterías o deportivas, las cuales han ido incrementándose, precisamente gracias a la necesidad de conseguir dinero y al impulso de perder que padecen otros, ya que cuando el juego se vuelve adicción, al jugador no le interesa ganar, sino jugar.
“Un dinerito extra no le cae mal a nadie y menos en estos tiempos de crisis en que vivimos, yo saco aunque sean 10 pesos para jugar mis numeritos todas las noches, a veces me saco, otras veces no, pero el que no arriesga no gana”, expresa Mercedes Díaz, una ama de casa de 69 años residente en el sector de Herrera.
El vicio de muchos es de tal magnitud que visualizan números en objetos y de las cosas que sueñan cada noche.
“Los números se presentan donde tu menos te lo imaginas hasta en el cascaron de un huevo puedes encontrártelos o en los sueños si sabes arreglarlos, a veces no hay ni que descifrarlos, salen caritos”, explica Rosanna Peña otra fiel fanática del azar.
Existen en el país cuatro loterías diferentes, cada una con una gran variedad de juegos cuyos sorteos se efectúan diaria o semanalmente como es el caso de aquellos en que la cantidad del premio es mucho mayor y menor la probabilidad de obtener la combinación exacta.
El sociólogo José Enrique Espinal, considera que el auge de los juegos de azar y la abundancia de las agencias de loterías, son un claro indicador del grado de pobreza en que vive sumido el país.
“La debilidad económica hace que la gente se ampare en ese mecanismo para conseguir dinero rápido y fácil, pero la ignorancia y la carente educación de nuestra sociedad también llevan a la gente a eso”, dice.
Resalta que la inversión de tiempo, energía y dinero en esas actividades aumenta a medida que el individuo se hace cada vez más dependiente del juego para enfrentar la cotidianidad.
Llama a la ciudadanía a tomar conciencia, a pensar en todo lo que envuelve esa tentación que en realidad tiene más desventajas que beneficios.