Horror en Guernica: liberan a una joven cautiva 7 años de su pareja

La víctima tiene 24 años y durante el cautiverio tuvo 4 hijos. Una historia escalofriante

ARGENTINA.- La historia remite automáticamente a dos casos que todavía permanecen en el inconciente colectivo como escalofriantes antecedentes: uno, es el de Josef Fritzl, conocido como "el monstruo de Amstetten", el electricista que durante 24 años mantuvo encerrada en un sótano a su hija, a quien violó sistemáticamente y tuvo con ella varios niños; el otro, es el del denominado "Chacal de Mendoza", acusado de violar a su hija durante 20 años, con quien tuvo siete hijos.

abre comillasFuentes del caso expresaron que sobre el acusado también pesaba una orden de captura ordenada por la justicia de Lomas de Zamora por el presunto delito de narcotráficocierra comillas

Esta vez, la historia es tan aberrante como las anteriores, sólo que ocurrió a escasos kilómetros de nuestra Ciudad: fue en la localidad de Guernica, donde ayer un hombre de 33 años fue detenido acusado de haber privado de su libertad a su mujer durante siete años en una precaria vivienda. Durante el cautiverio tuvieron cuatro hijos.

El acusado se llama Oscar Roberto Enríquez, y está imputado de haber mantenido cautiva a su pareja Sofía, de 24 años, quien estaba encerrada en la propiedad contra su voluntad, desde abril del 2005.

NO LA DEJABA SALIR

El juez de garantías platense Néstor De Aspro, ordenó la detención de Enríquez, solicitada por el fiscal Leandro Heredia, titular de la Fiscalía Descentralizada de Presidente Perón.

A pesar de que Sofía permaneció durante todo este tiempo cautiva, nunca fue considerada desaparecida porque sus familiares sabían que estaba con el acusado. Sin embargo, por temor, no se atrevían a intervenir.

También a Sofía le era muy difícil pedir ayuda, pese a sus esfuerzos. Es que a pesar de que no la tenía atada, su captor no la dejaba salir sola a la calle. Y las pocas veces que se lo permitía, el acusado iba con ella.

Por eso la investigación se inició a partir de una denuncia muy reciente realizada por la hermana de la víctima. Y concluyó cuando la Policía allanó la casa y encontró a la mujer, que, al verlos, rompió en llanto.
POR FACEBOOK

El instructor judicial, Germán Di Pascual, dijo que "teníamos tres domicilios donde la mujer podía estar, ya que había tenido algunos contactos con su hermana a través de la red social Facebook".

Además, contó que "gracias a las indicaciones que la víctima pudo darle a vecinos linderos mediante señas o gestos, que indicaban que estaba secuestrada, es que pudimos llegar hasta ella".

"Sofía no salía casi nunca y, cuando lo hacía, era acompañada por su captor. Por eso no podía pedir ayuda. Uno de los testigos relató que cuando ocasionalmente la veían, ella lograba expresarles con frases cortas la situación en que se encontraba y solicitarles auxilio mediante señas", prosiguió Di Pascual.

El funcionario judicial aseguró que la joven "nunca estuvo desaparecida" ya que su familia "siempre fue consciente de que Sofía se encontraba con el imputado contra su voluntad".

"Por ello -dijo el letrado- la figura no es secuestro sino privación ilegal de la libertad doblemente agravada por darse en situación de violencia o amenazas y porque duró más de un mes" y explicó que el delito tiene una pena de 2 a 6 años.

Detalló que los familiares de la mujer "jamás se habían atrevido a irrumpir en las casas en las que sospechaban que ella estaría por la peligrosidad de su pareja".

PORTA ARMAS

"Muchas de las declaraciones testimoniales recabadas durante la investigación fueron realizadas bajo reserva de la identidad", expresó Di Pascual y añadió que "todos le tienen temor al imputado porque dicen que es una persona agresiva que porta armas de fuego".

Anteayer se hizo un allanamiento en Guernica. Personal de la comisaría de Presidente Perón a cargo del comisario Ruben Taborda y de la DDI La Plata al mando de Juan Ibarra ingresó a la propiedad y encontró a la mujer adentro de la vivienda, con el imputado y los cuatro hijos que tuvo con él durante el cautiverio".

Cuando los policías entraron a la vivienda, la mujer no estaba atada, ni esposada.

"Ella tenía libertad de movimiento dentro de la casa, pero no se le permitía salir al exterior ni tener contacto con terceros", relató Di Pascual.

Fueron años de terror. Sofía estaba encerrada bajo amenazas de muerte hacia ella y sus hijos, fue golpeada y amenazada con armas de fuego varias veces. Al ver a la policía la mujer rompió en llanto.

El instructor afirmó que aún no se pudo tomar declaración a Sofía, ni realizar el reconocimiento médico para constatar su estado físico y psicológico.

Detalló también que la vivienda "es algo precaria, bastante pequeña y sencilla", pero aclaró que "para el ojo de un vecino desprevenido, nada indicaba que en su interior hubiera una persona retenida contra su voluntad".
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