Un mundo carente de autoestima
pOR Marlenys Ferreras
/www.mipais.com.do/
La manera como las personas actúan ante los acontecimientos de la vida depende de lo que piensan y de cómo es interiormente cada quien. La autoestima influye en el comportamiento, por lo tanto, ella es la clave del éxito o del fracaso.
Como su nombre lo indica, la autoestima, no es más que la valoración e idea que un individuo tiene de sí mismo e interviene en todos los aspectos de la vida, por lo que es importante aprender a autovalorarse de manera positiva.
Los especialistas en la conducta humana sostienen que desarrollar la autoestima ayuda a enfrentar la vida con mayor confianza y optimismo, a través de ella se logra una vivir a plenitud.
“Debemos aprender a conocernos, aceptarnos, a respetarnos, a querernos, solo así estaremos aptos para enfrentar las adversidades y disfrutar las alegrías, y de esa forma también aprendemos a querer y a respetar a los demás”, explica la terapeuta Mercedes Pérez Beltré.
Mantener una autoestima sana es de suma importancia, por múltiples razones, una es que si un individuo no confía, ni se aprecia sí mismo, es muy difícil que los demás puedan hacerlo.
“Afecta virtualmente en forma decisiva todos los aspectos de nuestra experiencia, desde la manera en que funcionamos en el trabajo, el amor o el sexo, hasta nuestro proceder como padres y las posibilidades que tenemos de progresar en la vida”, expresa la especialista.
Los expertos también relacionan algunos problemas de salud con la falta de autoapreciasión que afectan el cuerpo y la mente.
Insomnio, desórdenes alimenticios, falta de energía,hipertensión, depresión, son algunos de los malestares que puede causar una baja apreciación.
Mientras más elevado sea el amor propio, más posibilidades existen de ser creativos en el trabajo, lo significa que también hay más posibilidades de alcanzar las metas. “Ayuda ser también más ambiciosos, no solo en términos económicos, laborales o profesionales, sino más bien en el ámbito espiritual y emocional. Favorece también en el establecimiento de buenas relaciones con el prójimo y en un sinnúmero de aspectos importantes para el buen desarrollo del ser humano”, dice Pérez Beltré.
Muchas personas pretenden encontrar la autoconfianza y el autorrespeto en todas partes menos dentro de sí mismas, eso hace que fracasen en esa búsqueda.
La salud, la paz interior, el logro de las metas y el descubrimiento de los talentos que cada ser posee, es responsabilidad de una buena autoestima y en conjunto, las claves de la felicidad.
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La manera como las personas actúan ante los acontecimientos de la vida depende de lo que piensan y de cómo es interiormente cada quien. La autoestima influye en el comportamiento, por lo tanto, ella es la clave del éxito o del fracaso.
Como su nombre lo indica, la autoestima, no es más que la valoración e idea que un individuo tiene de sí mismo e interviene en todos los aspectos de la vida, por lo que es importante aprender a autovalorarse de manera positiva.
Los especialistas en la conducta humana sostienen que desarrollar la autoestima ayuda a enfrentar la vida con mayor confianza y optimismo, a través de ella se logra una vivir a plenitud.
“Debemos aprender a conocernos, aceptarnos, a respetarnos, a querernos, solo así estaremos aptos para enfrentar las adversidades y disfrutar las alegrías, y de esa forma también aprendemos a querer y a respetar a los demás”, explica la terapeuta Mercedes Pérez Beltré.
Mantener una autoestima sana es de suma importancia, por múltiples razones, una es que si un individuo no confía, ni se aprecia sí mismo, es muy difícil que los demás puedan hacerlo.
“Afecta virtualmente en forma decisiva todos los aspectos de nuestra experiencia, desde la manera en que funcionamos en el trabajo, el amor o el sexo, hasta nuestro proceder como padres y las posibilidades que tenemos de progresar en la vida”, expresa la especialista.
Los expertos también relacionan algunos problemas de salud con la falta de autoapreciasión que afectan el cuerpo y la mente.
Insomnio, desórdenes alimenticios, falta de energía,hipertensión, depresión, son algunos de los malestares que puede causar una baja apreciación.
Mientras más elevado sea el amor propio, más posibilidades existen de ser creativos en el trabajo, lo significa que también hay más posibilidades de alcanzar las metas. “Ayuda ser también más ambiciosos, no solo en términos económicos, laborales o profesionales, sino más bien en el ámbito espiritual y emocional. Favorece también en el establecimiento de buenas relaciones con el prójimo y en un sinnúmero de aspectos importantes para el buen desarrollo del ser humano”, dice Pérez Beltré.
Muchas personas pretenden encontrar la autoconfianza y el autorrespeto en todas partes menos dentro de sí mismas, eso hace que fracasen en esa búsqueda.
La salud, la paz interior, el logro de las metas y el descubrimiento de los talentos que cada ser posee, es responsabilidad de una buena autoestima y en conjunto, las claves de la felicidad.