Ola de robo en Pedernales mantiene en estado de zozobra a la población

Por: Odalís Báez
PEDERNALES. La ola de robos que se registra en este municipio fronterizo se ha tornado indetenible, situación que mantiene en estado de intranquilidad a los pobladores, mientras la Policía no hace casi nada, debido a la carencia de equipos y a los pocos agentes conque cuenta.
PEDERNALES. La ola de robos que se registra en este municipio fronterizo se ha tornado indetenible, situación que mantiene en estado de intranquilidad a los pobladores, mientras la Policía no hace casi nada, debido a la carencia de equipos y a los pocos agentes conque cuenta.
Cada día que pasa, las sustracciones en negocios, casas familiares, atracos para despojar de dinero a ciudadanos y motocicletas, se incrementan cada vez más, en cuya mayoría participan niños pedigueños haitianos que son utilizados para tales fines por adultos compatriotas y dominicanos.
Entre los recientes robos ocurridos en esta localidad, figuran el del electro cauterizador del departamento de Cirugía del hospital Elio Fiallo, así como el de la residencia de la humilde ama de casa, Xiomara Abreu, del Sector Los Altagracianos, donde los cacos cargaron un un televisor y un DVD, y el de la fábrica de hielo Corvy, de donde se llevaron 97 mil pesos.

Además, el de las motocicletas del periodista Julio Gómez, el agricultor Máximo Terrero Rubio, el perpetrado contra la estación radial “Yadipa” FM. 879.1, propiedad del doctor y los de otros ciudadanos que miran impotentes como la Policía se mantiene casi de brazos cruzados por no contar con lo necesario para enfrentar los casos y detener a los autores.
"Ante esta indetenible ola de robo, estamos reclamando con urgencia la intervención del Presidente de la República, doctor Leonel Fernández, para que equipe debidamente a la Policía local, a fin de que ésta tenga capacidad para enfrentar la situación, porque la misma está llegando demasiado lejos", dijeron Rosa Julia Peña y Giordano Féliz.
La misma Policía reconoce que la mayoría de estos robos son cometidos por menores pedigueños haitianos, los cuales son adiestrados por adultos de su país y dominicanos.
Los menores, en horas de la noche, se introducen en negocios, viviendas familiares y otros lugares, de donde se llevan todo lo que encuentran a su paso.
Los menores, en horas de la noche, se introducen en negocios, viviendas familiares y otros lugares, de donde se llevan todo lo que encuentran a su paso.
Aparte del dinero, los objetos robados, entre estos motocicletas, televisores, aparatos de música, son introducios hacia Haití por la línea divisoria, donde son comercializados.