El diez por ciento de la cosecha de mangos de Villa Fundaciónm, en Baní, murió por falta de agua
VILLA FUNDACIÓN, BANI. Hace más de tres décadas los pobladores de Villa Fundación decidieron diseñar y materializar sus propios proyectos de desarrollo. La electricidad, los centros educativos, el parque central, el hospital y las principales vías de comunicación de este distrito municipal de Peravia son el resultado de la planificación y el trabajo de un pueblo productor de cebollas y soluciones colectivas.
Inesperadamente la racha de éxitos de Villa Fundación se detuvo donde el resto de la provincia hoy presenta crecimiento constante y acelerado: en el cultivo de mango.
Este año su proyecto modelo de 4,122 tareas no exportará una sola libra de fruta, y los 149 parceleros de la Reforma Agraria (cada uno con 30 tareas y 702 plantas) que lo conforman tendrán que ver cómo más de 10,717 plantas terminan de hacerse leña por falta de agua.
“Son más de treinta años de cuidado de esas tierras. Ahí están invertidos los anhelos de este pueblo”, lamenta José Antonio Soto, vicepresidente de la Cooperativa
Agropecuaria Villa Fundación 2 (COPAVIF2), uno de los dos organismos que reúnen a los beneficiarios del proyecto.
En la comunidad, dice Soto, todavía se cree en el potencial de desarrollo del frutal, porque, a pesar del rotundo fracaso de este año, se recuerda que la primera cosecha del 2008 produjo RD$10 millones; y la del 2009, RD$20.
Estos ingresos, sin embargo, no han sido suficientes para responder a la deuda asumida con el Banco Agrícola, ascendente a RD$105 millones. Además, parte de los beneficios de la producción debe guardarse para devolver al Gobierno los RD$49 millones que supuestamente invirtió en la
plantación.
Aquí se dice supuestamente porque las autoridades todavía no han presentado a los parceleros un documento que certifique el gasto de ese monto. Sin dicho documento las cooperativas tampoco pueden convocar a elecciones debido a que necesitan hacer un informe financiero ante la Asamblea General.
“Por falta de elecciones los presidentes de las cooperativas se han convertido en los gerentes del proyecto. Los parceleros están desmotivados por eso”, considera Soto, sentado en el salón de actos de la Asociación para el Desarrollo de Villa Fundación, principal motor del crecimiento de la comunidad.
El estancamiento
En el 2003 las tierras de Villa Fundación fueron escogidas por el Gobierno para iniciar un proyecto nacional de frutales de exportación. Un grupo de técnicos israelíes vino al país con el fin de instalar la estructura de riego por goteo y los demás elementos de las plantaciones.
En total, las autoridades desembolsaron RD$165 millones, bajo la condición de que los parceleros devolvieran el 30% (RD$49 millones) a las arcas nacionales una vez entraran a la etapa productiva. Con el cambio de Gobierno del 2004, parte importante de la plantación quedó sin sembrar.
Esto motivó a que el Banco Agrícola aprobara dos préstamos por RD$80 millones entre agosto del 2005 y abril del 2006, necesarios para financiar los gastos de estructura y mantenimiento de las dos cooperativas de parceleros. Así lo cuenta la actual administración del proyecto.
“No se tenía pendiente que el mango necesita por lo menos cuatro año para que su producción sea comercial. Por eso tuvimos tantos problemas con el pago de los altos intereses de los préstamos”, dice José Antonio Soto cuando señala los antecedentes de la perdida agrícola.
Ya en el 2007, fuera de los indicadores de rentabilidad, cuenta Soto, el Consejo Administrador de los Fondos entregó a los parceleros el 30% de las ventas del mango, y destinó el resto al pago de las deudas. En el 2008 se hizo lo mismo, pero en el 2009 el Banco Agrícola decidió quedarse con el total de las ventas, acción que provocó una huelga entre los productores.
A la deuda se le sumó la extensa sequía nacional, el deterioro del sistema de riego y los enfrentamientos entre campesinos y funcionarios. Por la suma de estos factores, la más moderna finca de mango del país hoy está casi seca.
Buscan salida
Ernesto Peguero, supervisor del proyecto AC-205 Villa Fundación cree que los mangos y las fuentes de empleo que generan aún se pueden salvar.
Si las cooperativas consiguen RD$20 millones antes de agosto de este año, pueden cambiar el sistema de riego por goteo por uno de micro aspersión, y dar inicio al proceso de poda y fertilización que las plantas necesitan para alcanzar altos niveles de productividad.
El dinero serviría también para poner en funcionamiento las tres bombas que traen el agua desde el rio Ocoa.
José Antonio Soto cree que además el Gobierno debe condonar el pago de los
RD$49 millones de inversión, y que el Banco Agrícola puede colaborar con la reducción de los “altos intereses”, de 12% a 8%. Cualquier otra emisión de fondos, dice, tiene que hacerse antes de la temporada de poda y fertilización, porque de lo contrario afecta el rendimiento de las plantaciones y limita la capacidad de pago del proyecto.
“El proyecto tiene futuro. Los parceleros estamos dispuestos a sacrificarnos en lo que nos sea posible”, señala Soto, en un abierto llamado al Ministro de Agricultura.
Los investigadores del Gobierno dominicano han determinado que el país puede generar ingresos millonarios por la exportación de frutas y vegetales. Por eso está empeñado en la multiplicación de proyectos de este tipo. El de Villa Fundación se levantó como un modelo para otras comunidades agrícolas donde los niveles de pluviometría se mantienen históricamente bajos.
El próximo jueves 17 Baní acogerá nuevamente a los miembros de la Feria Nacional del Mango, Expo Mango 2010. En el evento participarán decenas de plantaciones que pudieron vencer la sequía.
EL MANGO DE PERAVIA EN CONTEXTO
A la fecha, el país cuenta con 56 mil 432 tareas dedicadas al cultivo de mango, las cuales se distribuyen básicamente entre las mil 100 plantaciones comerciales de las provincias Peravia, San Cristóbal y San Juan. En el 2009 la fruta generó más de 3 mil empleos directos, y cerca de US$2 millones por concepto de la exportación de 202 contenedores de fruta de alta calidad.
La actividad involucra a cerca de 1,100 productores, 08 exportadores y una sola planta hidrotérmica, necesaria para garantizar la salubridad de los embarques destinados a los compradores estadounidenses.
Este año, a pesar de los males causados por la pasada sequía, se espera que las divisas generadas alcancen los US$5 millones.
En Villa Fundación, como en el resto del provincia Peravia, se cultivan las variedades Tommy, Keitt, Kent, Tommy Atkins y Haden.
El mango banilejo es cada vez más demandado en Estados Unidos y Europa.