Sacude muerte de nueve infantes haitianos en ruta a Puerto Rico
Por PRENSA LATINA
EN SAN JUAN, Puerto Rico, jueves, 10 Marzo, 2022: La muerte de nueve infantes haitianos que, junto a 51 adultos, entre hombres y mujeres, se hicieron a la mar en una travesía ilegal desde Haití, estremeció hoy a Puerto Rico.
Los niños, que estaban acompañados de sus madres, fueron lanzados al mar al fallecer a lo largo de la travesía de siete días, tras zarpar de Jeremie, en el sureste de Haití, narró Hilaire Duverson, al diario puertorriqueño El Nuevo Día.
El estudiante de mecánica, de 21 años, expresó al periodista Benjamín Torres que no era su voluntad salir de Haití, mas no tenía otra opción ante el caos que impera en esa nación del Caribe, que comparte la isla La Hispaniola con República Dominicana, desde el asesinato del presidente Jovenel Moïse, el 7 de julio de 2021.
El viaje se complicó de una manera que nadie habría podido imaginar y terminó, según dijeron sobrevivientes al diario, en una de las más espantosas tragedias en las que a menudo desembocan las travesías clandestinas a través de las aguas del Caribe.
Los nueve infantes, ninguno de los cuales llegaba al año de edad y entre los que había una pareja de gemelos, fallecieron durante los siete días del viaje, al sucumbir por hambre, sed, fiebre o la insolación.
Uno a uno, fueron lanzados al mar, por órdenes del capitán de la embarcación. Uno a uno, fueron devorados por tiburones delante de sus aterradas madres, narró el periodista a base de los testimonios recogidos.
«Ellos empezaron a tirar a todos los bebés en el mar; el capitán lo pidió, me contó la mamá de los mellizos que los tiburones…empezaron a desbaratarlos delante de ellos», contó Leonard Prophil, un religioso haitiano que hace años reside en Puerto Rico y asiste a las víctimas de esta tragedia.
Algunas de las madres de los niños están hospitalizadas en diferentes instituciones en la zona metropolitana de San Juan, porque, además del cruento viaje, al llegar la embarcación a Puerto Rico el 28 de febrero pasado sufrieron un accidente en las costas de cabo Rojo (suroeste).
Prophil dijo al periódico que están emocionalmente afectadas, temen por su seguridad y están recibiendo servicios psicológicos.