Nuestras Glorias: Paleta Medrano.
Sergio-Paleta-Medrano
Por Rafael Matos Feliz
EN BARAHONA, (República Dominicana), miércoles 26 agosto, 2020: Sergio Ariza Medrano (Paleta) fue un extraordinario jugador de pelota y al mismo tiempo se le distingue como una persona jovial, entusiasta, de voz ronca y con las ocurrencias más extravagantes que dejaban “muertos de risas” a todos los que con él se relacionaron. Nació el 26 de febrero del 1927. Fue su madre la señora Ángela Medrano y su padre, el señor Miguel Ariza, y Barahona su asiento natal, donde creció, se desarrolló y pasó toda su vida.
A los 12 años, se distingue en los juegos de béisbol como un lanzador de fuste. En los desafíos de la barriada y en la calle Sánchez, donde vivía su abuela, se le veía lanzar en forma frecuente y no lo hacía de manera “güevita” (regionalismo que significa lento, flojo), sino que le gustaba lanzar como en los juegos de aficionados o de profesionales; es decir fuerte y rápido. Hacía esta actividad, siempre descalzo y así bateaba y así corría.
Con su experiencia, Paleta Medrano ingresa al equipo juvenil llamado “Whiski B” con 16 años y más tarde juega con el equipo “Sucursal de Brooklyn”. Cuando alcanza los 19 años, su bola rápida, sus curvas y destreza en la caja de lanzar, convierten a los bateadores contrarios en ridículos contendores; ya sea abanicando o produciendo rodados o elevados.
Esa labor monticular lo lleva a integrar, con otros estelares de la época, la Selección Amateur de Barahona, en 1946. A partir de ese momento, Azua, San Juan, San Cristóbal, Ocoa, Baní, Distrito Nacional y otros pueblos, sintieron cómo sus novenas caían fulminadas por el brazo de Paleta Medrano.
Con ese accionar, se coloca como el principal abridor de la Selección Barahonera y así llega al 1948 y le toca batirse con el equipo santiaguense, Campeón del Norte, que se mantenía invicto a nivel nacional y es precisamente Paleta Medrano, quien le rompe el invicto a los norteños, que eran los mejores peloteros del béisbol amateur de la República Dominicana. Ese encuentro que ganaron los suroestanos 6 a 5 fue un duelo de estelares y llegó hasta 14 entradas. El hit de oro lo dio el refuerzo de Baní, el brillante jugador Chaparra Pérez.
Luego en el 1949 pasa a ser lanzador del equipo del Ejército Nacional y en su primer torneo alcanzó 8 victorias contra una derrota. Los campeonatos en las Fuerzas Armadas, se sucedieron en forma frecuente y en ellos; Paleta Medrano hizo su estelar trabajo. Se cuenta que cuando le tocaba servicio de patrulla, se colocaba un ajo “detrás” y se ponía “enfermo”. Ya en Barahona se enrola y pertenece al equipo de béisbol “Phyllco” y allí se mantuvo hasta el 1955.
Al repasarse el historial beibolístico de Paleta Medrano, se observa una extraordinaria hazaña, casi única en un jugador amateur del siglo pasado. Según los datos compilados por Luís Sánchez (EPD), Comisionado de Deporte de la Región Sur, Paleta tuvo el récord de hacer 198 entradas (innings) sin permitir carreras, de haber ganado de por vida un total de 231 juegos, con 70 blanqueadas y haber perdido solo 17 juegos. Otra hazaña muy frecuente en él era, ponchar los tres bateadores de la misma entrada.
Un gusto de su vida social lo fue la bebida y acostumbrada decirles a sus amigos “buen azaroso”, y se le conoció como “Pibe”, pues era admirador del cine argentino y ese término lo disfrutaba. Cuando su brazo dio muestra de agotamiento, pasó a jugar en el jardín derecho. Y se cuenta que jugando en esa posición contra Azua, los jugadores de ese equipo se burlaban de él y le voceaban que se ponga a lanzar para acabarlo a palos. Su orgullo y dignidad hicieron que le pidiera al manager del equipo de Barahona, que lo era el deportista Rafael Altuna, que se lo permitiera y así se hizo. ¡Sorpresa! Paleta Medrano le lanzó ese domingo a los azuanos un juego perfecto, sin hits y sin carreras. De nuevo ¡sorpresa! el siguiente domingo repite la misma hazaña contra Elías Piña.
Para el 1958 llega a ser el manager de la selección de béisbol de Barahona y para el 1963 hace que dicho equipo se corone Campeón Nacional. Ese mismo año, Barahona logra también el Campeonato Nacional de Volibol. Al dejar de jugar, Paleta pasó a entrenar en béisbol como Monitor por SEDEFIR. Vivió con su pareja llamada Dominga, cerca del estadio Nadín Hazoury hasta la hora de su muerte acaecida el 20 de octubre, 1989.
¡PALETA MEDRANO, TÚ SERÁS INMORTAL DEL DEPORTE POR SIEMPRE!
¡GLORIA Y HONOR!