El potrillo Bermejo...
POR JOSE ANTONIO MATOS PEÑA.
EN NEYBA, Bahoruco, República Dominicana, domingo 16 agosto, 2020: Con su tono rojizo y lucero imponente aparenta llorar amargamente frente al evidente cadáver de su Yegua Madre, sin importarle consecuencia brindada por los matarifes o furtivos carniceros caminantes, pretende entender al través del contacto por extensión de su trompa, al compás del gemido probablemente imperceptible.
Con un ritmo de miedo, al parecer armónico, sus cascos y patas tocaban el suelo, mientras las navajas o cuchillos, despegaban pellejo de un cuerpo que iba en dirección a la putrefacción.
Fue el panorama visto por nosotros, la mañana de ayer, sábado 15 del agosto del 2020, frente al proyecto AC-59 o sus alrededores, carretera La Madre, rumbo a Las Clavellinas, provincia Bahoruco un animal Equino muerto a lo mejor por un accidente, virtualmente crecido por el tiempo y calor transcurridos; tres individuos llevados y cegados por la mala conducta y el fraude tramado, más segados por la mala cultura que deberemos erradicar, daban riendas suelta a sus herramientas buscando que a lo mejor sana no quedaba, mientras un potrillo, hembra o macho, no importaba el dolor, brindaba una escena de lo mucho peor.
Nos trasladábamos hacia los lagos Enriquillo y Azuei, en observaciones sistemáticas que practicamos, siendo ya las diez de la mañana, hora en que habitualmente las aguas se agitan; no nos pudimos detener, pero si seguimos con muy mala impresión, de pensar qué suerte le depararía a ese pequeño animal, no creemos que buena, además de su gran tragedia.
En la república dominicana se ha ido introduciendo esta poco entendible para nosotros, esta mala cultura, que, al perderse los básicos controles sanitarios y ubicación de los lugares de sacrificios, se llevan al consumo de la población los más increíbles productos, es una cultura que se tendrá que cambiar, con el esfuerzo del gobierno y apoyo de la población.