Basura arropa ríos y cañadas del Gran Santo Domingo
Esta imagen donde contrastan la belleza y el verdor de la zona con la gran cantidad de desechos plásticos fue tomada en el río Isabela, próximo a la Zurza en el Distrito Nacional. Jorge González
EL NACIONAL
EN EL DISTRITO NACIONAL, miércoles 04 agosto, 2020: Controversia y enfado en redes sociales y medios de comunicación de todo el país generó la publicación la semana pasada de una fotografía en la portada de revista Vogue de una hermosa playa de Samaná llena de desechos sólidos que contrastan con el radiante cielo y mar azul y la belleza de las palmeras que se mueven airosa al ritmo del viento.
Independientemente de quien tenga la razón, ya que analizar el problema de la publicación no es el tema de este trabajo, es bueno señalar que la fotografía de la ambientalista, Carmen Danae, tiene un valor invaluable a la hora de hacer una crítica social a las autoridades medioambientales y de las alcaldías que hacen poco para resolver el problema de la basura.
En un recorrido por algunos sectores afectados de ríos y cañadas en el Gran Santo Domingo fue notorio observar la cantidad de basura y desechos plásticos tirados en sus orillas o que llegan a sus afluentes por otras vías.
Efecto dominó
Todo el asunto de la contaminación de los ríos se mueve con el denominado efecto dominó. En primer lugar las personas tiran la basura en las calles, la que es arrastrada por el viento que la lleva a los imbornales que luego las lluvias la conducen a las cañadas, para terminar en los ríos y de ahí su destino final, el ancho mar.
En el segundo caso, está la basura tirada por los habitantes de los lugares que viven próximos a cañadas y ríos. Todo bajo el pretexto y la realidad de que los camiones recolectores de basura no entran a sus localidades ya sea por las condiciones topográficas de terreno u otras razones.
Lo que sí es una realidad que no debe molestar a nadie, pero sin dejar de llamar la atención de las autoridades, es que la basura que no es recogida y llevada a un vertedero, termina de una u otra manera en cañadas, ríos y playas.
Conjuntamente con la falta de recogida de los desechos sólidos es bueno que se entienda que muchos barrios marginales se han edificado sin ningún estudio urbanístico y carecen de calles, aceras, contenes, y agua potable. Además los ríos y cañadas que lo circundan hacen la función de sistema de drenaje y cloacal.
Sectores como: El Dique y Las Lilas, en Santo Domingo Este; Domingo Savio, La Ciénaga, los Guandules y Guachipita, en el Distrito Nacional, no tienen un sistema de recolección de basura de parte de las alcaldías, por lo que llevan sus desperdicios a la ribera del río Ozama.
No es nada diferente en la barriada de la Zurza en la Capital a orillas del río Isabela, donde la basura llega a través de las cañadas, muy especialmente la del Diablo que es la más importante por su alto grado de contaminación.
Ley de basura
La semana pasada fue aprobada Ley de Gestión Integral de Co-procesamiento de Residuos Sólidos de la República Dominicana, en la Cámara de Diputados.
Esta legislación tiene la función de prevenir la generación de residuos, establecer el régimen jurídico de su producción y gestión, y fomentar su reducción, reutilización, reciclado y otras formas de valorización, así como regular los suelos contaminados, con la finalidad de garantizar el derecho de toda persona a un medio ambiente adecuado y proteger la salud de la población.
La ley se aplica en todas las actividades, procesos y operaciones de la gestión integral de residuos sólidos desde la generación hasta su reaprovechamiento o disposición final incluyendo las distintas fuentes de su generación en los sectores económicos, sociales y de la población.
No se hace nada con la aprobación de leyes para proteger el medio ambiente si no está en la mente de las autoridades cumplir y hacer cumplir las disposiciones emanada de dicha legislación.
Además, deben crear conciencia para que la ciudadanía aprenda a cuidar el medio donde habita o de lo contrario sean sancionadas de manera drásticas, en donde no tenga valor la llamada a un ministro, jefe militar o un compañerito del partido.
Playas
Cientos de miles de envases plásticos van a parar a las playas de Montesinos, el Fuerte San Gil y Güibia de la avenida George Washington después del paso de la tormenta Isaías por el territorio nacional. Hoy las autoridades continuaban su limpieza.
Por Jorge González
jgo.jorgegonzalez@gmail.com
EL NACIONAL
EN EL DISTRITO NACIONAL, miércoles 04 agosto, 2020: Controversia y enfado en redes sociales y medios de comunicación de todo el país generó la publicación la semana pasada de una fotografía en la portada de revista Vogue de una hermosa playa de Samaná llena de desechos sólidos que contrastan con el radiante cielo y mar azul y la belleza de las palmeras que se mueven airosa al ritmo del viento.
Independientemente de quien tenga la razón, ya que analizar el problema de la publicación no es el tema de este trabajo, es bueno señalar que la fotografía de la ambientalista, Carmen Danae, tiene un valor invaluable a la hora de hacer una crítica social a las autoridades medioambientales y de las alcaldías que hacen poco para resolver el problema de la basura.
En un recorrido por algunos sectores afectados de ríos y cañadas en el Gran Santo Domingo fue notorio observar la cantidad de basura y desechos plásticos tirados en sus orillas o que llegan a sus afluentes por otras vías.
Efecto dominó
Todo el asunto de la contaminación de los ríos se mueve con el denominado efecto dominó. En primer lugar las personas tiran la basura en las calles, la que es arrastrada por el viento que la lleva a los imbornales que luego las lluvias la conducen a las cañadas, para terminar en los ríos y de ahí su destino final, el ancho mar.
En el segundo caso, está la basura tirada por los habitantes de los lugares que viven próximos a cañadas y ríos. Todo bajo el pretexto y la realidad de que los camiones recolectores de basura no entran a sus localidades ya sea por las condiciones topográficas de terreno u otras razones.
Lo que sí es una realidad que no debe molestar a nadie, pero sin dejar de llamar la atención de las autoridades, es que la basura que no es recogida y llevada a un vertedero, termina de una u otra manera en cañadas, ríos y playas.
Conjuntamente con la falta de recogida de los desechos sólidos es bueno que se entienda que muchos barrios marginales se han edificado sin ningún estudio urbanístico y carecen de calles, aceras, contenes, y agua potable. Además los ríos y cañadas que lo circundan hacen la función de sistema de drenaje y cloacal.
Sectores como: El Dique y Las Lilas, en Santo Domingo Este; Domingo Savio, La Ciénaga, los Guandules y Guachipita, en el Distrito Nacional, no tienen un sistema de recolección de basura de parte de las alcaldías, por lo que llevan sus desperdicios a la ribera del río Ozama.
No es nada diferente en la barriada de la Zurza en la Capital a orillas del río Isabela, donde la basura llega a través de las cañadas, muy especialmente la del Diablo que es la más importante por su alto grado de contaminación.
Ley de basura
La semana pasada fue aprobada Ley de Gestión Integral de Co-procesamiento de Residuos Sólidos de la República Dominicana, en la Cámara de Diputados.
Esta legislación tiene la función de prevenir la generación de residuos, establecer el régimen jurídico de su producción y gestión, y fomentar su reducción, reutilización, reciclado y otras formas de valorización, así como regular los suelos contaminados, con la finalidad de garantizar el derecho de toda persona a un medio ambiente adecuado y proteger la salud de la población.
La ley se aplica en todas las actividades, procesos y operaciones de la gestión integral de residuos sólidos desde la generación hasta su reaprovechamiento o disposición final incluyendo las distintas fuentes de su generación en los sectores económicos, sociales y de la población.
No se hace nada con la aprobación de leyes para proteger el medio ambiente si no está en la mente de las autoridades cumplir y hacer cumplir las disposiciones emanada de dicha legislación.
Además, deben crear conciencia para que la ciudadanía aprenda a cuidar el medio donde habita o de lo contrario sean sancionadas de manera drásticas, en donde no tenga valor la llamada a un ministro, jefe militar o un compañerito del partido.
Playas
Cientos de miles de envases plásticos van a parar a las playas de Montesinos, el Fuerte San Gil y Güibia de la avenida George Washington después del paso de la tormenta Isaías por el territorio nacional. Hoy las autoridades continuaban su limpieza.
Por Jorge González
jgo.jorgegonzalez@gmail.com