NO A LA OEA COMO OBSERVADORA DE LAS ELECCIONES DEL DOMINGO
Esto así, porque la Organización de Estados Americanos (OEA), ha perdido credibilidad en las naciones en que participa como observadora de elecciones presidenciales, por su inveterada costumbre de enredar "la cabuya" en vez de desenredarla. Se le repudia porque en la mayoría de los casos en los resultados de esas votaciones cuando no se manifiesta a favor del candidato del gobierno de turno, se inclina favorablemente por el candidato del o de los partidos opositores. Todo depende si el gobierno en cuestión es títere del coloso del Norte o si el candidato opositor ganador de las elecciones de antemano se haya comprometido a ser títere del gigante en cuestión.
Nos preguntamos: ¿Es que no existen otros organismos internacionales que puedan ser invitados como observadores de unas elecciones, o es que obligatoriamente tiene que ser la mencionada OEA?
El último caso enredado por la OEA fue el de Bolivia. La OEA dijo que el candidato de ese entonces y presidente de la República, hizo fraude. No obstante, otros expertos internaciones, incluso algunos periódicos de Estados Unidos, echaron al suelo el alegato de la OEA, señalando que hubieron alguna dislocaciones, normales en ese tipo de proceso, pero no fraude electoral.
La OEA se ha hundido aún más en la incredibilidad desde el primer momento un hombre conocido como Almagro, fue escogido para dirigir esa entidad, que el actual presidente de Estados Unidos maneja a su antojo. Almagro, ha sido uno de los personajes más negativos de los han dirigido la OEA, entidad que los dominicanos recordamos fue la que organizó y desarrolló el colosal fraude electoral que dio el triunfo a Joaquín Balaguer en las elecciones presidenciales de 1966, que fueron claramente ganadas por el profesor Juan Bosch y el Partido Revolucionario Dominicano (PRD).
Otro negro recuerdo de los dominicanos es la intervención de EE.UU. y la OEA en la Revolución de Abril de 1965 que impidió el triunfo de Los Militares y Civiles Constitucionalistas que pedían el retorno al poder de Juan Bosch, que fue derrocado por un golpe de Estado fraguado por la Iglesia Católica, la oligarquía criolla y él gobierno yanquis de ese entonces,
Esa vez Estados Unidos creò, a través de la OEA una diabólica estructura militar llamada Fuerza Interamericana de Paz (FIP), que de paz no tenìa nada. Por estas y otras razones, es que no procede ni conviene para la República Dominicana que la OEA participe como observadora en las elecciones presidenciales y congresuales a celebrarse el domingo 5 del presente mes.
Nos preguntamos: ¿Es que no existen otros organismos internacionales que puedan ser invitados como observadores de unas elecciones, o es que obligatoriamente tiene que ser la mencionada OEA?
El último caso enredado por la OEA fue el de Bolivia. La OEA dijo que el candidato de ese entonces y presidente de la República, hizo fraude. No obstante, otros expertos internaciones, incluso algunos periódicos de Estados Unidos, echaron al suelo el alegato de la OEA, señalando que hubieron alguna dislocaciones, normales en ese tipo de proceso, pero no fraude electoral.
La OEA se ha hundido aún más en la incredibilidad desde el primer momento un hombre conocido como Almagro, fue escogido para dirigir esa entidad, que el actual presidente de Estados Unidos maneja a su antojo. Almagro, ha sido uno de los personajes más negativos de los han dirigido la OEA, entidad que los dominicanos recordamos fue la que organizó y desarrolló el colosal fraude electoral que dio el triunfo a Joaquín Balaguer en las elecciones presidenciales de 1966, que fueron claramente ganadas por el profesor Juan Bosch y el Partido Revolucionario Dominicano (PRD).
Otro negro recuerdo de los dominicanos es la intervención de EE.UU. y la OEA en la Revolución de Abril de 1965 que impidió el triunfo de Los Militares y Civiles Constitucionalistas que pedían el retorno al poder de Juan Bosch, que fue derrocado por un golpe de Estado fraguado por la Iglesia Católica, la oligarquía criolla y él gobierno yanquis de ese entonces,
Esa vez Estados Unidos creò, a través de la OEA una diabólica estructura militar llamada Fuerza Interamericana de Paz (FIP), que de paz no tenìa nada. Por estas y otras razones, es que no procede ni conviene para la República Dominicana que la OEA participe como observadora en las elecciones presidenciales y congresuales a celebrarse el domingo 5 del presente mes.