Lo que dice un afectado del Covid-19 sobre la atención de Salud Pública
Por: Santa Marte / Listìn Diario
EN SANTO DOMINGO, Lunes 13 Abril, 2020: “Usted es fuerte, quédese tranquilo, eso es una gripe normal”, fue la primera respuesta que recibió un ciudadano, quien pidió reserva de su nombre, cuando acudió a un dispensario médico en San Cristóbal, tras sentir los síntomas del coronavirus el pasado 31 de marzo.
Tras ese episodio, decide marcar a Salud Pública para informar sobre su situación y ver si es posible que le hagan la prueba, pero la respuesta que recibió fue similar a la primera: “Eso es una simple gripe, beba acetaminofén”, como si ya tuvieran un diagnóstico al que le tenían la contra.
Cierra el teléfono y al día siguiente vuelve y llama a Salud Pública, con la esperanza de que otra persona distinta a la que le tomó el teléfono anteriormente le diera una respuesta más alentadora, pero esta le dijo que fuera por sus propios pies a hacerse la prueba, porque ellos no tenían personal para eso.
No conforme con la respuesta, se valió de las relaciones que tiene la familia con una doctora, quien tras observar los síntomas que tenía procedió a indicarle la prueba.
Narra que al llamar a un laboratorio para pedir que acudieran a su domicilio le dijeron que debía esperar 15 días, porque habían muchos solicitantes en lista, lo que supuso una eternidad para una persona que tenía fiebre, decaimiento en el cuerpo y unos “puyones” en los huesos.
Fue entonces, cuando un hermano suyo que reside en Bávaro hizo contacto con Referencia allá, donde también estaban realizando la prueba y lo mandó a buscar a él y a su madre para que se la hicieran el pasado martes. Los resultados salieron el pasado jueves, dando positivo a la enfermedad.
Tras recibir la noticia, llamó de nuevo a Salud Pública para notificar su situación y que además de las medidas que la familia está adoptando, ver si la institución aplica otras con los pacientes que ya tienen confirmada la enfermedad.
“Cuatro días después aquí no ha venido nadie de Salud Pública, a pesar de que lo notifiqué desde el primer día que me dieron el diagnóstico, eso te da una idea de que eso se expandirá por todos lados”, dice el joven.
Dijo que empezó a sentir los síntomas el 28 de marzo, y que por lo extraño que se sentía sospechó que se había infectado con el virus, y que aunque se cuidaba mucho entiende que Salud Pública debió ir para investigar si otra persona resultó afectada en el sector y tomar las medidas correspondientes .
“Entonces tu sabes lo que está pasando, que el que no tenga los medios se va a quedar en su casa y se va a morir todo el mundo", dijo el joven a Listín Diario, el cual se mantiene aislado en su hogar.
Dijo que para recibir el medicamento que actualmente se está tomando para mitigar los efectos del virus, tuvieron que hacer unas conexiones con un doctor para que se los pudiera suministrar
Instó a los medios a concienciar más a la población en relación a la enfermedad, debido a que en los barrios la gente no está guardando las medidas de aislamiento recomendada por las autoridades.
Dijo que a esa situación se agrega el rechazo social que están recibiendo los afectados, quienes además de la enfermedad, también tienen que cargar con el estigma social en el entorno donde se desenvuelven
EN SANTO DOMINGO, Lunes 13 Abril, 2020: “Usted es fuerte, quédese tranquilo, eso es una gripe normal”, fue la primera respuesta que recibió un ciudadano, quien pidió reserva de su nombre, cuando acudió a un dispensario médico en San Cristóbal, tras sentir los síntomas del coronavirus el pasado 31 de marzo.
Tras ese episodio, decide marcar a Salud Pública para informar sobre su situación y ver si es posible que le hagan la prueba, pero la respuesta que recibió fue similar a la primera: “Eso es una simple gripe, beba acetaminofén”, como si ya tuvieran un diagnóstico al que le tenían la contra.
Cierra el teléfono y al día siguiente vuelve y llama a Salud Pública, con la esperanza de que otra persona distinta a la que le tomó el teléfono anteriormente le diera una respuesta más alentadora, pero esta le dijo que fuera por sus propios pies a hacerse la prueba, porque ellos no tenían personal para eso.
No conforme con la respuesta, se valió de las relaciones que tiene la familia con una doctora, quien tras observar los síntomas que tenía procedió a indicarle la prueba.
Narra que al llamar a un laboratorio para pedir que acudieran a su domicilio le dijeron que debía esperar 15 días, porque habían muchos solicitantes en lista, lo que supuso una eternidad para una persona que tenía fiebre, decaimiento en el cuerpo y unos “puyones” en los huesos.
Fue entonces, cuando un hermano suyo que reside en Bávaro hizo contacto con Referencia allá, donde también estaban realizando la prueba y lo mandó a buscar a él y a su madre para que se la hicieran el pasado martes. Los resultados salieron el pasado jueves, dando positivo a la enfermedad.
Tras recibir la noticia, llamó de nuevo a Salud Pública para notificar su situación y que además de las medidas que la familia está adoptando, ver si la institución aplica otras con los pacientes que ya tienen confirmada la enfermedad.
“Cuatro días después aquí no ha venido nadie de Salud Pública, a pesar de que lo notifiqué desde el primer día que me dieron el diagnóstico, eso te da una idea de que eso se expandirá por todos lados”, dice el joven.
Dijo que empezó a sentir los síntomas el 28 de marzo, y que por lo extraño que se sentía sospechó que se había infectado con el virus, y que aunque se cuidaba mucho entiende que Salud Pública debió ir para investigar si otra persona resultó afectada en el sector y tomar las medidas correspondientes .
“Entonces tu sabes lo que está pasando, que el que no tenga los medios se va a quedar en su casa y se va a morir todo el mundo", dijo el joven a Listín Diario, el cual se mantiene aislado en su hogar.
Dijo que para recibir el medicamento que actualmente se está tomando para mitigar los efectos del virus, tuvieron que hacer unas conexiones con un doctor para que se los pudiera suministrar
Instó a los medios a concienciar más a la población en relación a la enfermedad, debido a que en los barrios la gente no está guardando las medidas de aislamiento recomendada por las autoridades.
Dijo que a esa situación se agrega el rechazo social que están recibiendo los afectados, quienes además de la enfermedad, también tienen que cargar con el estigma social en el entorno donde se desenvuelven