Conscientes de que el sistema de salud dominicano no està debidamente preparado para enfrentar el COVID-19, los barahoneros han comenzado a acatar con seriedad el Decreto 135-20
EN BARAHONA, (Repùblica Dominicana), Lunes 23 Marzo, 2020: Entre las 12:00 meridano y la 1:00 de la tarde del sábado 21 hasta el momento, los barahoneros han comenzado a acatar con seriedad, tanto de día como de noche el toque de queda que establece el Decreto 135-20 puesto en vigencia por el presidente Danilo Medina para evitar la propagación del COVID-19.
El Decreto en cuestión que prohíbe, entre otras cosas, la circulación de vehículos y personas en todo el territorio nacional que rige desde las 8:00 de la noche hasta las 6:00 de la mañana del día siguiente, tiñe vigencia hasta el día del próximo mes de abril.
Como es costumbre, entre los dominicanos algunos ciudadanos violan las disposiciones del referido Decreto, soslayando la gravedad que representa el coronavirus y que pueden ser apresados por los militares y policías desplazados en las calles, cuya misión evitar que la gente viole lo estableció en el mismo.
La primer noche de la emisión del Decreto varios dueños de establecimientos de expendio de bebidas alcohólicas diseminados en diversos puntos de este municipio cabecera, Santa Cruz de Barahona, mantuvieron abiertas las puertas de sus negocios en los que habían parroquianos fiesteando, mientras que en horas diurnas eran vistos gran cantidad de vehículos circulando y aglomeraciones de personas en las calles.
Esta situación comenzó a cambiar, a partir del mediodía del pasado sábado, gracias a la actuación de los militares y agentes policiales, cuya misión es hacer cumplir el decreto 135-20.
A medida que la gente se ha ido dando cuenta que el COVID-19 sigue avanzado y que el que sistema de salud dominicano no está lo suficientemente preparado para evitar su propagación, los ciudadanos han creado conciencia y han procedido a acatar el Decreto.
No obstante, los ciudadanos, en especial los denominados (chiriperos), tienen escasez de alimentos en sus hogares, falta de agua en algunos sectores y barrios de la parte alta donde residen, entre otras imperiosas necesidades, que a su juicio, deben ser tomadas rápidamente en cuenta por el gobierno.
Este lunes, las calles y avenidas de esta ciudad lucen desoladas, en especial en las que funcionan los grandes establecimientos comerciales, entre estas la María Montez, Padre BIllini, Josè Francisco Peña Gòmes, Colón., 30 de Mayo, Jaime Mota, Anacaona y Luis E. Delmonte.
POR JUAN FRANCISCO MATOS
El Decreto en cuestión que prohíbe, entre otras cosas, la circulación de vehículos y personas en todo el territorio nacional que rige desde las 8:00 de la noche hasta las 6:00 de la mañana del día siguiente, tiñe vigencia hasta el día del próximo mes de abril.
Como es costumbre, entre los dominicanos algunos ciudadanos violan las disposiciones del referido Decreto, soslayando la gravedad que representa el coronavirus y que pueden ser apresados por los militares y policías desplazados en las calles, cuya misión evitar que la gente viole lo estableció en el mismo.
La primer noche de la emisión del Decreto varios dueños de establecimientos de expendio de bebidas alcohólicas diseminados en diversos puntos de este municipio cabecera, Santa Cruz de Barahona, mantuvieron abiertas las puertas de sus negocios en los que habían parroquianos fiesteando, mientras que en horas diurnas eran vistos gran cantidad de vehículos circulando y aglomeraciones de personas en las calles.
Esta situación comenzó a cambiar, a partir del mediodía del pasado sábado, gracias a la actuación de los militares y agentes policiales, cuya misión es hacer cumplir el decreto 135-20.
A medida que la gente se ha ido dando cuenta que el COVID-19 sigue avanzado y que el que sistema de salud dominicano no está lo suficientemente preparado para evitar su propagación, los ciudadanos han creado conciencia y han procedido a acatar el Decreto.
No obstante, los ciudadanos, en especial los denominados (chiriperos), tienen escasez de alimentos en sus hogares, falta de agua en algunos sectores y barrios de la parte alta donde residen, entre otras imperiosas necesidades, que a su juicio, deben ser tomadas rápidamente en cuenta por el gobierno.
Este lunes, las calles y avenidas de esta ciudad lucen desoladas, en especial en las que funcionan los grandes establecimientos comerciales, entre estas la María Montez, Padre BIllini, Josè Francisco Peña Gòmes, Colón., 30 de Mayo, Jaime Mota, Anacaona y Luis E. Delmonte.
POR JUAN FRANCISCO MATOS