Hombre mata a su madre y lo confiesa en redes sin remordimiento, en Nicaragua
EN MANAGUA, (POR EFE); Jueves 30 Enero, 2020: Un hombre mató a su madre y lo confesó sin remordimientos en un video, que fue divulgado este martes en Nicaragua a través de las redes sociales.
"La palmé (maté) a mi propia madre, soy asesino mortal", dijo Denis Flores Gómez, en un video grabado con la cámara de un teléfono celular que rápidamente se hizo viral en Nicaragua.
Flores se atribuyó el asesinato de Martha Gómez Martínez, ocurrido el lunes en una comunidad rural del departamento (provincia) de Matagalpa, en el norte de Nicaragua, según confirmaron las autoridades policiales.
El asesino confeso, quien en el video aparece sin camisa y amarrado con sus manos hacia atrás, no solamente se mostró contento con el crimen, sino que además se declaró insatisfecho.
"Pensaba palmar a mi abuelo, a mis dos tíos, ¡a tres tíos hijos de p... me pensaba echar!", agregó Flores, con expresiones superlativas que pasaban de la ira a las risas de forma constante.
El hombre insistió en que mató a su madre con un trozo de leña. "¿Lo vuelvo a repetir? ¡Lo voy a decir millones de veces!", indicó exaltado.
Flores dijo que había matado a su madre "por bruja", y que quería hacer lo mismo con un vecino, al que también señaló de practicar la brujería.
La víctima fue encontrada tapada bajo un tumulto de ropa y rodeada de Biblias.
El agresor alegó que la ropa era de su madre y que estaba nueva, también explicó que ubicó las Biblias alrededor el cuerpo "para que se salve, porque el brujo se tiene que salvar", "Yo le profetizo que está en el cielo", añadió.
Cuando una persona le preguntó si estaba arrepentido de haber matado a su mamá, el hombre apretó sus labios con los dientes, dirigió los extremos de su boca hacia abajo y negó con la cabeza.
Asimismo agregó que después de sus familiares tenía planificado seguir asesinando.
Quería matar "a todo el que me caía mal, ladrones, pandilleros, violadores", sostuvo, antes de confesar que él mismo había cometido un robo.
Nicaragua era considerado uno de los países más seguros de Latinoamérica hasta el estallido social contra el presidente Daniel Ortega, en abril de 2018.