BIOGRAFIA DE CARLOS GARDEL "EL ZORZAL CRIOLLO"
CARLOS GARDEL :: Tenor y compositor francés del Siglo XX. 1890-1935
“Voz de la Humanidad”
DOMINGO, 26 ENERO, 2020: Desde el 1º de setiembre de 2003, la voz de Carlos Gardel es Patrimonio de la Humanidad, declarada por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, UNESCO, en su registro Memoria del Mundo, junto a otros documentos históricos, entre ellos, los manuscritos originales de la Novena Sinfonía de Beethoven.
Carlos Gardel fue un artista moderno, creador e innovador, adelantado varios años a su tiempo, y aquí hay varios ejemplos de ello. Mérito que se acrecienta sobremanera, si tenemos en cuenta las precarias condiciones técnicas en que grabó, y el rudimentario sistema publicitario y de marketing de la época.
Interpretó 29 géneros musicales diversos, y llegó a cantar en cuatro idiomas (además del español): francés, inglés, italiano y hasta guaraní.
Fue el primero en grabar a dúo consigo mismo, en 1933, y el primero en cantar por radio en dúplex, en vivo. Lo hizo desde Estados Unidos, mientras sus guitarristas lo acompañaban en Buenos Aires.
Sus cualidades vocales eran excelentes: tenía registro de barítono, con extensión de dos octavas (para tener una idea,
Frank Sinatra, que es indiscutible, alcanzaba a una octava y media), además de una amplia caja torácica y capacidad pulmonar de siete litros, condiciones que le hubieran permitido incursionar en el canto lírico a la perfección, según lo elogió Enrico Caruso, a quien Gardel conoció durante un viaje hacia Río de Janeiro, en 1915.
Poseía una privilegiada combinación de tórax, laringe y cuerdas vocales, que sólo tuvieron en el siglo XX (además de Gardel) Enrico Caruso, Frank Sinatra y María Callas.
Grabó un vals llamado "Las campanas", en el cual "no se sabe dónde respira", debido a los sostenidos que exige el tema, los altos y bajos, y la continuidad de la música.
En su época no había amplificación en los teatros, valiéndose Gardel solamente de la acústica de los mismos, pudiendo el público escucharlo desde todas las localidades, gracias al hábil manejo de su potencial, sin esforzar la garganta. Una noche de octubre de 1933, en el Teatro 18 de Julio de Montevideo, cantó con disfonía que el público no notó, ya que "fraseó" las canciones.
Supo transformar algunos temas de no muy buena calidad en verdaderos éxitos, gracias a su particular manera de interpretar, que le permitía, además, contar una historia en algo más de dos minutos (duración promedio de las grabaciones de Gardel).
En cuanto a su etapa discográfica, desde 1912 hasta 1926 debió registrar su voz mediante el llamado sistema acústico (sin micrófono). Se utilizaba una bocina o corneta, similar a las de los antiguos fonógrafos, pero de entrada de sonido.
Allí debía prácticamente introducir su cabeza para que la voz quedara grabada, junto al acompañamiento musical de guitarras u orquesta, según el caso. Recién en 1926, luego de varias pruebas, se comenzó a grabar en el llamado sistema eléctrico (con micrófono).
Imaginamos lo que hubiera sido Gardel grabando con las técnicas actuales... aunque quizás está allí el enorme mérito, de haber hecho su obra en las precarias condiciones de la época.
Grabó cerca de 770 temas, a los cuales, sumándoles las diversas repeticiones que generalmente realizaba de cada uno, alcanzan una cifra cercana a los 1.700 registros o tomas de sonido, llamadas matrices, que en muchos casos son lanzadas a la venta en la actualidad, tras haber permanecido inéditas durante décadas.
Ese impresionante promedio de grabaciones, equivaldría hoy, aproximadamente, a cuatro CDs por año.
Debido a esa amplia gama y a que su repertorio abarcó todas las temáticas y a todos les cantó, los gardelianos decimos que "Hay un tema de Gardel para cada hora del día", y para cada estado de ánimo.
Además de gran cantante, fue un gran intérprete, sabía llegar al público, y prueba de ello es esta afirmación que pronunció en una oportunidad a su novia Isabel del Valle: "Hay que interpretar cada tema con el alma, como si fuera algo propio que uno está cantando. Y hay que poner el corazón, cuando no se pone el corazón, no se puede cantar". Todo dicho.
Fue precursor del cine sonoro latinoamericano (desde Argentina, en 1930), y más tarde, ya como artista-empresario, de las co-producciones cinematográficas habladas en español en Estados Unidos, a través de su compañía "Exito's Spanish Pictures" (también conocida como "Exito Corporation Inc." o "Exito Productions"), en sociedad con Paramount Pictures y Western Electric. Esta etapa nos muestra a un Gardel desconocido para el público ajeno al tango, que aún ve al artista como un simple "cantante de tangos", sin tener en cuenta lo que llegó a ser más allá del canto, y lo que pudo haber llegado a ser si hubiera vivido quizás cinco años más.
También en cuanto al cine, en aquel tiempo no se doblaban las canciones de las películas, y los primeros intentos que hubo no conformaron al "Mago", por lo cual todas sus interpretaciones fueron realizadas al momento de filmarse.
En los cines, el público aplaudía y ovacionaba a Gardel cuando cantaba, y por primera vez en la historia cinematográfica, los operadores se vieron obligados a rebobinar la cinta y emitir nuevamente la canción.
Este peculiar hecho se produjo en vida de Gardel, varias veces, y el primer caso fue en 1931, en el filme "Las luces de Buenos Aires", con el tango "Tomo y obligo".
Jamás olvidó la canción criolla, con la que comenzó su carrera. Y aún después de triunfar en el tango siempre tuvo en su repertorio canciones camperas, incluyendo su etapa cinematográfica, pues en todas sus películas sonoras interpretó la música de "tierra adentro", a veces hasta con números musicales (con ambientación, vestimenta típica, danzas, etc.).
En la actualidad, hay hechos que demuestran la vigencia de Gardel. Por ejemplo: las canciones de sus películas han sido colorizadas mediante computadora (en 1986), y su voz ha llegado a la Era de los CDs (desde 1991).
Además, muchos temas de su autoría han sido grabados por cantantes de primer nivel internacional, como Roberto Carlos, Julio Iglesias, Plácido Domingo, Luis Miguel, Amaya Uranga (ex Mocedades), etc., y algunos han sido incluidos en películas recientes, como "Por una cabeza" (en "Perfume de mujer", la versión de Al Pacino, y "La lista de Schindler", de Steven Spielberg).
En el ámbito personal, una de sus mayores virtudes fue su constante afán de superación, que lo llevó desde el ambiente más humilde de la clase obrera bonaerense, hasta codearse con las personalidades más relevantes del ámbito mundial (políticos, reyes, artistas, etc.), y jamás perdió su humildad ni olvidó su origen. Por eso su estampa de ganador es tan admirada, porque todos quieren ser "Gardel", cada uno en su actividad, ser como aquel que surgió de la nada y se hizo a sí mismo, hasta llegar a lo más alto.
Otro ejemplo a destacar fue su lucha contra el sobrepeso. Cuando filmó su primera película, "Flor de durazno" (muda)
en 1917, superaba los 110 kilos.
Con los años logró ponerse en forma, y al llegar la etapa cinematográfica en Estados Unidos en 1934, con 43 años, se convirtió en un auténtico galán de cine, a la par de los grandes de Hollywood, tal cual se lo había propuesto.
En octubre de 1997, bautizaron con su nombre a una plaza que se halla frente a las instalaciones de Paramount Pictures Corporation, en Los Ángeles, California.
También se ha divulgado la idea de que Carlos Gardel posea una estrella en el Paseo de la Fama, en Los Ángeles, lo cual nos parece de estricta justicia, hacia quien ha sido, es y será una verdadera estrella, de las más rutilantes de la música mundial.
“Voz de la Humanidad”
DOMINGO, 26 ENERO, 2020: Desde el 1º de setiembre de 2003, la voz de Carlos Gardel es Patrimonio de la Humanidad, declarada por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, UNESCO, en su registro Memoria del Mundo, junto a otros documentos históricos, entre ellos, los manuscritos originales de la Novena Sinfonía de Beethoven.
Carlos Gardel fue un artista moderno, creador e innovador, adelantado varios años a su tiempo, y aquí hay varios ejemplos de ello. Mérito que se acrecienta sobremanera, si tenemos en cuenta las precarias condiciones técnicas en que grabó, y el rudimentario sistema publicitario y de marketing de la época.
Interpretó 29 géneros musicales diversos, y llegó a cantar en cuatro idiomas (además del español): francés, inglés, italiano y hasta guaraní.
Fue el primero en grabar a dúo consigo mismo, en 1933, y el primero en cantar por radio en dúplex, en vivo. Lo hizo desde Estados Unidos, mientras sus guitarristas lo acompañaban en Buenos Aires.
Sus cualidades vocales eran excelentes: tenía registro de barítono, con extensión de dos octavas (para tener una idea,
Frank Sinatra, que es indiscutible, alcanzaba a una octava y media), además de una amplia caja torácica y capacidad pulmonar de siete litros, condiciones que le hubieran permitido incursionar en el canto lírico a la perfección, según lo elogió Enrico Caruso, a quien Gardel conoció durante un viaje hacia Río de Janeiro, en 1915.
Poseía una privilegiada combinación de tórax, laringe y cuerdas vocales, que sólo tuvieron en el siglo XX (además de Gardel) Enrico Caruso, Frank Sinatra y María Callas.
Grabó un vals llamado "Las campanas", en el cual "no se sabe dónde respira", debido a los sostenidos que exige el tema, los altos y bajos, y la continuidad de la música.
En su época no había amplificación en los teatros, valiéndose Gardel solamente de la acústica de los mismos, pudiendo el público escucharlo desde todas las localidades, gracias al hábil manejo de su potencial, sin esforzar la garganta. Una noche de octubre de 1933, en el Teatro 18 de Julio de Montevideo, cantó con disfonía que el público no notó, ya que "fraseó" las canciones.
Supo transformar algunos temas de no muy buena calidad en verdaderos éxitos, gracias a su particular manera de interpretar, que le permitía, además, contar una historia en algo más de dos minutos (duración promedio de las grabaciones de Gardel).
En cuanto a su etapa discográfica, desde 1912 hasta 1926 debió registrar su voz mediante el llamado sistema acústico (sin micrófono). Se utilizaba una bocina o corneta, similar a las de los antiguos fonógrafos, pero de entrada de sonido.
Allí debía prácticamente introducir su cabeza para que la voz quedara grabada, junto al acompañamiento musical de guitarras u orquesta, según el caso. Recién en 1926, luego de varias pruebas, se comenzó a grabar en el llamado sistema eléctrico (con micrófono).
Imaginamos lo que hubiera sido Gardel grabando con las técnicas actuales... aunque quizás está allí el enorme mérito, de haber hecho su obra en las precarias condiciones de la época.
Grabó cerca de 770 temas, a los cuales, sumándoles las diversas repeticiones que generalmente realizaba de cada uno, alcanzan una cifra cercana a los 1.700 registros o tomas de sonido, llamadas matrices, que en muchos casos son lanzadas a la venta en la actualidad, tras haber permanecido inéditas durante décadas.
Ese impresionante promedio de grabaciones, equivaldría hoy, aproximadamente, a cuatro CDs por año.
Debido a esa amplia gama y a que su repertorio abarcó todas las temáticas y a todos les cantó, los gardelianos decimos que "Hay un tema de Gardel para cada hora del día", y para cada estado de ánimo.
Además de gran cantante, fue un gran intérprete, sabía llegar al público, y prueba de ello es esta afirmación que pronunció en una oportunidad a su novia Isabel del Valle: "Hay que interpretar cada tema con el alma, como si fuera algo propio que uno está cantando. Y hay que poner el corazón, cuando no se pone el corazón, no se puede cantar". Todo dicho.
Fue precursor del cine sonoro latinoamericano (desde Argentina, en 1930), y más tarde, ya como artista-empresario, de las co-producciones cinematográficas habladas en español en Estados Unidos, a través de su compañía "Exito's Spanish Pictures" (también conocida como "Exito Corporation Inc." o "Exito Productions"), en sociedad con Paramount Pictures y Western Electric. Esta etapa nos muestra a un Gardel desconocido para el público ajeno al tango, que aún ve al artista como un simple "cantante de tangos", sin tener en cuenta lo que llegó a ser más allá del canto, y lo que pudo haber llegado a ser si hubiera vivido quizás cinco años más.
También en cuanto al cine, en aquel tiempo no se doblaban las canciones de las películas, y los primeros intentos que hubo no conformaron al "Mago", por lo cual todas sus interpretaciones fueron realizadas al momento de filmarse.
En los cines, el público aplaudía y ovacionaba a Gardel cuando cantaba, y por primera vez en la historia cinematográfica, los operadores se vieron obligados a rebobinar la cinta y emitir nuevamente la canción.
Este peculiar hecho se produjo en vida de Gardel, varias veces, y el primer caso fue en 1931, en el filme "Las luces de Buenos Aires", con el tango "Tomo y obligo".
Jamás olvidó la canción criolla, con la que comenzó su carrera. Y aún después de triunfar en el tango siempre tuvo en su repertorio canciones camperas, incluyendo su etapa cinematográfica, pues en todas sus películas sonoras interpretó la música de "tierra adentro", a veces hasta con números musicales (con ambientación, vestimenta típica, danzas, etc.).
En la actualidad, hay hechos que demuestran la vigencia de Gardel. Por ejemplo: las canciones de sus películas han sido colorizadas mediante computadora (en 1986), y su voz ha llegado a la Era de los CDs (desde 1991).
Además, muchos temas de su autoría han sido grabados por cantantes de primer nivel internacional, como Roberto Carlos, Julio Iglesias, Plácido Domingo, Luis Miguel, Amaya Uranga (ex Mocedades), etc., y algunos han sido incluidos en películas recientes, como "Por una cabeza" (en "Perfume de mujer", la versión de Al Pacino, y "La lista de Schindler", de Steven Spielberg).
En el ámbito personal, una de sus mayores virtudes fue su constante afán de superación, que lo llevó desde el ambiente más humilde de la clase obrera bonaerense, hasta codearse con las personalidades más relevantes del ámbito mundial (políticos, reyes, artistas, etc.), y jamás perdió su humildad ni olvidó su origen. Por eso su estampa de ganador es tan admirada, porque todos quieren ser "Gardel", cada uno en su actividad, ser como aquel que surgió de la nada y se hizo a sí mismo, hasta llegar a lo más alto.
Otro ejemplo a destacar fue su lucha contra el sobrepeso. Cuando filmó su primera película, "Flor de durazno" (muda)
en 1917, superaba los 110 kilos.
Con los años logró ponerse en forma, y al llegar la etapa cinematográfica en Estados Unidos en 1934, con 43 años, se convirtió en un auténtico galán de cine, a la par de los grandes de Hollywood, tal cual se lo había propuesto.
En octubre de 1997, bautizaron con su nombre a una plaza que se halla frente a las instalaciones de Paramount Pictures Corporation, en Los Ángeles, California.
También se ha divulgado la idea de que Carlos Gardel posea una estrella en el Paseo de la Fama, en Los Ángeles, lo cual nos parece de estricta justicia, hacia quien ha sido, es y será una verdadera estrella, de las más rutilantes de la música mundial.