Otra vez la Prueba PISA nos coloca al final. Mis diez razones.
El informe del programa internacional para la Evaluación de Estudiantes o Informe PISA (por sus siglas en inglés: Programme for International Student Assessment) es un estudio llevado a cabo por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) a nivel mundial que mide el rendimiento académico de los alumnos en matemáticas, ciencia y lectura.
Resulta y viene a ser que República Dominicana, es incluida en estas mediciones a partir de la firma de los Objetivos del Milenio en el año 2001 y en la actualidad se nos mide e n las mismas condiciones y empleando los mismos indicadores que el resto de países, entre los que podemos citar a China, Singapur e Irlanda (primeros lugares en el estudio).
En esta ocasión aparecemos en los lugares 77 y 79 entre los países evaluados en el mundo en las áreas de Español, Matemática y Ciencias Naturales.
Por qué siempre quedamos en los últimos lugares? Para responder a mi propia pregunta y quizas la de muchas personas, comenzaré por la cabeza.
1ero. Es cierto que en el país durante los últimos siete años se ha incrementado la inversión y el presupuesto en educación casi duplicándolos ambos, pero el gobierno cree tanto en este área que en lugar de poner a Profesores a dirigir el Ministerio a colocado a Abogados, Arquitectos y Contables porque ve en ellos los más idóneos, cosa que no ocurre en el Ministerio se Salud, Agricultura, Justicia, Cuerpos Castrenses, entre otros.
2do. La política educativa del gobierno se aplica de golpe y por raso y bajo criterios meramente politicos-clientelares, sin que obedezcan ningún tipo estudio objetivo, ni siquiera un diagnostico. Es por ello que el programa de jornada extendida se implementa en algunos centros que no reúnen las más mínimas condiciones para ello, pero lo importante es que hay un cambio de horario. Es por ello también que hay centros con decenas de años en proceso de construcción y otros con poco tiempo de construidos en estados deplorables.
3ero. Los planes y programas pedagógicos, emanados de las distintas direcciones del Ministerio constituyen plagios de otros países que con mínimas adaptaciones y plagados de errores y contradicciones con nuestra realidad y nuestras normas, se transmiten hasta los centros educativos, dejando en manos de los Directores y docentes la pesada tarea de interpretarlos y aplicarlos, salga gallo o gallareta.
4to. A pesar ser regida por un concurso, la selección de docentes no obedece a criterios claramente definidos, como lo de un perfil comprobado, pruebas psicométricas rigurosas, rol social, relaciones humanas, compromiso con la calidad y el trabajo permanente, etc.
5to. Falta de normativas o estrategias que comprometan y obliguen a los padres, madres y tutores en su participación directa en el proceso de aprendizaje de los alumnos, sus hijos.
6to. Permanencias de las normativas que establecen la promoción automática, que frente a los requerimientos de cumplir con el desarrollo del curriculo, no hacen otra cosa que crear lagunas que permanecen hasta el final.
7mo. Falta de conciencia generalizada por parte del docente, de que el hecho de que los niños aprendan o no, es en alto grado de su responsabilidad tanto laboral como institucional.
8vo. Falta de coherencia entre la formación del docente y el área y hasta nivel que desempeña.
9no. Las continuas interrupciones versus la falta de recuperación real del tiempo perdido.
10mo. Los cambios continuos en los modelos, planes y estrategias de planificacion de la enseñanza unido a la falta de textos específicos y definidos para cada una de las áreas.
Usted podrá estar de acuerdo o no conmigo, pero de mi practica docente y observación directa del quehacer educativo, aunque sin ningún tipo de visión cosmopolita, esas son las conclusiones que puedo arrojar del por qué en la Prueba PISA quedamos en los últimos lugares.
POR: NELSON PABLO DE LA ROSA
El autor es Profesor y Director de un Centro Educativo del sector público.
05 Dic., 2019.