Nuestra solidaridad y gratitud con un senador norteamericano
Por MIGUEL ESPAILLAT GRULLON
Buenas nuevas
1 – El pasado sábado 21 del presente mes de diciembre, la prensa informó que Richard Black, un senador republicano por el estado de Virginia solicitó a su país (los EE.UU.), dejar de interferir en los asuntos internos de Venezuela y Bolivia, y eliminar las medidas coercitivas contra el pueblo venezolano, y a Washington levantar el bloqueo y las sanciones contra Venezuela, porque están causando un sufrimiento inimaginable al pueblo venezolano, especialmente al impedir que ese país comercialice su petróleo.
2 – Hemos desmonetizado su moneda – sigue denunciando Richard Black -; y a través del sistema bancario internacional, hicimos que la moneda venezolana careciera de valor y luego vamos y decimos: “Miren lo malo que es este Gobierno de Maduro, su moneda no vale nada. Bueno…, no fueron ellos, fuimos nosotros quienes hicimos inútil su moneda.
3 – Nosotros – continúa diciendo Richard Black – también mantenemos un bloqueo a las exportaciones venezolanas de petróleo para luego decir – mira Maduro no puede alimentar a su gente -. Bueno…, Maduro no puede alimentar a su gente porque les hemos cortado toda fuente de ingresos. Nosotros (los Estados Unidos), necesitamos dejar a Venezuela en paz, para que ellos sean quienes resuelvan sus problemas. Creo que eso sería lo mejor para todo el mundo.
4 – EEUU, el Departamento de Estado y la CIA – continúa postulando Richard Black – fueron los que decidieron darle a Juan Guaidó el rango de presidente. Es una broma, nadie lo escucha y es un títere total. La mayoría de las naciones no reconocen su presidencia. Debemos de reconocer que Nicolás Maduro, es el presidente constitucional de Venezuela. Guaidó es solo un títere de Washington, y EE.UU. está orquestando un golpe para tomar los recursos naturales de Venezuela. Nicolas Maduro, no es mi Gobierno y no me corresponde a mí ni a ningún estadounidense determinar cómo los venezolanos deben manejar sus asuntos internos, finalizó expresando el senador republicano por Virginia, Richard Black.
Saludamos estas declaraciones de Richard Black
5 – Indudablemente que las precedentes declaraciones del senador republicano por Virginia es una muy buena noticia para el mundo, especialmente para los venezolanos y bolivianos y para todos los demás países latinoamericanos que las élites imperialistas europeas y estadounidenses han estado masacrando y saqueando hasta el santo día de hoy. Esta noticia es doblemente buena, porque es un indicio de que se está gestando una poderosa corriente política que busca que los Estados Unidos y los estados europeos (quienes ejercen una férrea dictadura mundial), dejen de ejercer la política imperialista que subyuga, explota y saquea a las naciones débiles del Tercer Mundo.
6 – En estos aires de rectificación, auguro, que si fuese aceptado el pedido de Richard Black, se iniciaría el camino para conjurar la anunciada “Tercera Guerra Mundial: que será ineludible, de seguir la imposición a sangre y fuego de un imperialismo capitalista neoliberal, que solo beneficia al 1% de la población mundial. La rebelión en Chile, Colombia, Argentina, Honduras, Ecuador y las que se están dando en muchos países de Europa, es una señal clara, de que los pueblos no van a seguir aguantando mansamente la dictadura global de los imperialismos y su neoliberalismo saqueador. Y es que, felizmente, el mundo es otro.
7 – Mis lectores recordaran la serie de artículos de mi autoría publicados anteriormente con el título “USA es tiempo de rectificar”, en ellos, precisamente hago un llamado a los gobernantes de este gran país, sugiriéndole que rectifiquen su deleznable política exterior imperialista, la que por definición académica implica, invasiones, dominio y saqueo de recursos naturales, cosas que hacen de manera violenta y despiadada, acompasadas con cruentos golpes de estados y masacres infinitas. La historia está ahí, como testigo insobornable de los hechos.
8 – Todas esas acciones diabólicas las han querido enmascarar, haciendo una campaña de satanización del gobernante a derrocar. Para ello lo difaman e injurian, tachándolo de dictador, narcotraficante, castro-chavista, asesino, opresor de pueblo, ladrón y con mil epítetos más, en una propaganda infame, que coronan con un discurso donde los conceptos, derechos humanos, esperanza, democracia, libertad y libre mercado, es el hilo conductor de esa retórica perversa.
9 – Sin embargo, no obstante los esfuerzos que hacen esos imperios para manipular a las masas, éstas están despertando, y al tenor de ese despertar están tomando las calles exigiendo sus derechos conculcados. Las actuales movilizaciones en Chile, Argentina, Colombia, Ecuador, Honduras, Bolivia y en muchos países de Europa, dicen por sí solos, cómo el mundo está reaccionando y cambiando.
10 – Los imperialistas han sido cegados por la codicia y el abuso, por lo que nunca previeron que esas políticas macabras de saqueo iban a tener un fin de causa-efecto, puesto que masacrar y engañar a todo el mundo solo puede darse por un tiempo. En este tenor, yo pienso, que si los Estados Unidos, en vez de combatir el comunismo imponiendo dictadores y saqueando, lo hubiesen hecho respaldando verdaderas democracias y llevando un comercio justo, en el día de hoy las relaciones de Estados Unidos con esos países masacrados, fuera de amor y no de odio. Y no son de amor, porque nadie puede amar a su verdugo, sino tener para él, odios y resentimientos, que solo pueden ser subsanados por un cambio de actitud generacional, que ejecutado al pie de la letra de buena fe, conllevaría décadas de tiempo.
11 – En este escenario, veo como muy buena noticia el llamado que hace el senador Richard Black, de que su país (Estados Unidos), ya dejé de interferir en los asuntos internos de otros países, específicamente sobre Venezuela y Bolivia, cosa que hace señalando, que lo hacen para apropiarse de recursos naturales. Pero también, es muy buena noticia, el discurso del papa Francisco en la misa del Gallo de este año, al expresar: “Cambiemos el mundo, la Iglesia y la historia”. ¡Mejor de ahí, se daña!
12- Yo, al igual que el papa Francisco entiendo, que podemos cambiar el mundo, la Iglesia y la historia. Lógicamente el mundo cambiaría si los imperialismos desaparecieran, pero específicamente, si los Estados Unidos dejara de ser la “dictadura mundial” que es, y comprendiera, que si nos abocáramos a ejercer un comercio global justo no habría necesidad de guerras, ni de invadir países, ni de dar golpes de estado, ni de imponer dictadores, ni de masacrar pueblos, ni de saquear países, ni de tener mil bases militares a un costo de más de un billón dólares anuales.
13 – El pedido de Richard Black a su país, y el mensaje del papa Francisco, de ahora en adelante deben ser las doctrinas que abracemos para que iniciemos el camino que nos conduzca a evitar la vaticinada “Tercera Guerra Mundial”, con lo que lograremos la tan ansiada paz mundial, lógicamente, así tendremos un planeta sin guerras, sin hambre y sin injusticias sociales, porque habremos puesto en práctica, el nuevo mandamiento de Cristo, de “amaos los unos a los otros”, en vez del salvajismo vigente de: “ masacraos y explotaos los unos a los otros”.
14 – Finalmente, en nombre de todos los hombres de buena voluntad que glorían a Dios y que quieren la paz en la tierra, expreso nuestra solidaridad y gratitud al senador Richard Black por pedir a su país la no injerencia en los asuntos internos de los países que conforman nuestra América. Ese pedido constituye un aporte valioso para la construcción de la paz mundial, puesto que el mismo puede significar, el inicio de una nueva práctica política tendente a evitar el profetizado Armagedón bíblico, que de darse, pondría fin a la existencia del hombre sobre la faz de la tierra. Ted Cruz, Marco Rubio, Bob Menéndez y otros dinosaurios, debieran de seguirle los pasos a Richard Black, Bernie Sanders, Alexandria Ocasio-Cortez y a otros iluminados como ellos.
El que tenga oídos que oiga…
EL AUTOR es escritor y politico. Reside en Nueva York.
Sàbado, 28 diciembre, 2019.