Pocilgas y residuos de Villa Altagracia contaminan las aguas del río Haina
La contaminación se puede constatar al acercarse al río en Villa Altagracia.
EN VILLA ALTAGRACIA, 20 Septiembre, 2018: La falta de conciencia ciudadana y de autoridad constituyen las principales causas de la agresión constante de que es objeto el río Haina a su paso por Villa Altagracia, con la descarga de residuos de pocilgas y basura que la gente tira a las cañadas y arroyos que desembocan en ese importante caudal de donde se abastece de agua al Distrito Nacional y comunidades aledañas.
Este río, que nace en el Noroeste de Villa Altagracia y desemboca en el mar Caribe, en un trayecto de más de 86 kilómetros, languidece con el tiempo. Aunque sus aguas aparentan cristalinas están contaminadas casi desde sus inicios.
Por lo menos en la obra de toma del acueducto, se cuida para evitar que las aguas lleguen contaminada hasta los hogares de los pueblos del trayecto y la ciudad capital.
En la parte Sur de Villa Altagracia es donde hay mayor contaminación. Aquí particulares han construido pocilgas en la ribera que descargan sus desechos directamente al río. Los cerdos utilizan las aguas para beber, refrescarse o buscar algún alimento entre las fundas y sacos de basura.
Edwin Ferreira, alcalde de Villa Altagracia, admite el problema, pero considera que no tiene las facultades legales para tomar las acciones que requiere la situación y atribuye la responsabilidad al Ministerio de Medio Ambiente.
“Realmente eso tiene que ver más con Medio Ambiente, porque eso impacta el medio y todo lo que tiene que ver con el daño al medio ambiente, ya va al Ministerio. Nosotros como alcaldía tenemos tal vez que comenzar a educar, pero no tenemos ni la ley que nos faculte para que haya un régimen de consecuencias, ni tampoco tenemos los recursos para llevar solución al problema”.
Sostuvo que cada pocilga debe tener su propia planta de tratamiento para evitar que los residuos lleguen al río, es una de las principales medidas a tomar.
Pero la cuestión no es sólo de las pocilgas, también falta conciencia de los habitantes de Villa Altagracia que vierten toneladas de residuos sólidos a los arroyos Majuana y Novillero que los conducen hasta el río. Sacos y fundas plásticas llenas de residuos, se abrazan a las piedras en el cauce y presentan un panorama inquietante, que aunque preocupa a algunos, no concita iniciativas para enfrentar la contaminación.
“Villa Altagracia tiene un problema serio en el manejo de los niveles de conciencia de sus ciudadanos, ha sido como normal que a la gente se le permita, para buscarse su comida, por la falta de empleo, cosas que atentan contra el medio y el río, que cuando éramos niños nos bañábamos ahí porque era demasiado limpio, ahora no hay manera de hacerlo por contaminado”, dice el alcalde Ferreira.
La mejor muestra de la cantidad de plásticos y otros residuos sólidos que arrastran las aguas del Haina, es el muro que se forma en el puente del Badén, donde se acumula la basura cada vez que llueve.
Vecinos cercanos al río niegan que las pocilgas sean la principal causa de contaminación y atribuyen el mayor problema a la basura que desde el pueblo se lanza a las cañadas y los arroyos y de ello responsabilizan al alcalde.
A algunos de los entrevistados, como Rafael de Jesús, parece preocuparles más la falta de “un puentecito” sobre los arroyos y cañadas que la contaminación del río. Dice que cuando llueve no pueden comunicarse por la ribera del río Haina porque el puente que tenían ya no existe.
Un llamado a Medio Ambiente
Para sectores de Villa Altagracia, el Ministerio de Medio Ambiente es la principal autoridad que debe poner freno a la contaminación del río Haina, desde ese municipio hasta Haina. Algunos pobladores también responsabilizan del problema a alcalde y, por supuesto, un “mea culpa” porque falta conciencia de gente que se excusa en que la recogida de basura no es eficiente para tirar basura a las cañadas. /Diario Libre/.