FOGARATE Shane en lo eterno
La lágrima proviene de lo más hondo de lo humano. La lágrima es cumbre de la alegría, es colmo de la tristeza, es la altura más elevada del placer, es el más terrible grito de la amargura, es expresión radical de todo dolor físico y espiritual. La lágrima doblega voluntades adversas, endulza la amargura, rompe el cerco del odio, convoca y regala ternura, repudia toda maldad, suplica el perdón y es canto supremo del amor. La lágrima está en toda bienvenida de la vida y en toda despedida hacia lo eterno (que, por cierto, es allí donde empieza a vivir Shane, mi querido nieto).
RAMON COLOMBO,
06 SEPTIEMVBRE, 2018: