Militancia por competencia
La República Dominicana está entre los países del mundo que aun el Estado conserva la mayor producción y creación de empleos para sus ciudadanos. Entre los países de Latinoamérica, nos encontramos con Paraguay, El Salvador, Nicaragua, Colombia y Uruguay disputándonos el primer lugar entre los Estados tercermundistas donde se sobrepasa al sector privado en este reglón.
Esto hace que la política partidaria sea siempre activa, ya que con ella, los partidarios, allegados y simpatizantes de los partidos políticos cifran sus esperanzas en estos para lograr conseguir una fuente de ingreso a través de un empleo gubernamental.
Históricamente los partidos que alcanzan el poder, y de ellos no escapan los países desarrollados, colocan a sus partidarios en las administraciones, posiciones y puestos de trabajos de las instituciones y empresas que manejan los Estados y gobiernos. Mas allá de los gabinetes que acompañan a los gobernantes, las instituciones y empresas del Estado sufren variaciones de su empleomanía con la llegada de un nuevo gobernante y, muchas veces, hasta con la de un nuevo administrador del partido en el poder.
Cuando alcanzan el poder, a su interno los partidos, a modo de organigrama piramidal, eligen las manos de obras mas calificadas para las posiciones administrativas y de empleomanía que contenga el Estado. Para estos, los liderazgos nacionales, provinciales y municipales se entrelazan para colocar a sus partidarios de acuerdo a los perfiles de puestos que necesitan estas instituciones y empresas del Estado. Cabe mencionar, que con sus raras excepciones, a veces se escapan algunas designaciones sin las preparaciones debidas de dirección y preparación por aquello del liderazgo político. Pero esta está cambiando.
Con la llegada de Nelson Rodríguez Monegro al Servicio Nacional de Salud, la escogencia de los empleados de esa dependencia se empezó a realizar por concursos y competencia de los aspirantes o recomendados, independientemente de que sean estos o no de su partido, llegando inclusive a decir dicho funcionario que “a él no le hablen de compañeros de partido”. Uuuffff!! Y a él quien llevo ahí? La militancia de su partido.
Salud Publica y ahora El Ministerio de Educación, están designando a sus direcciones y empleados por concurso y competencia. Y Llego. No estamos en desacuerdo con estos. Creo que las instituciones y empresas del Estado deben de ser manejadas por personas calificadas y por demás preparadas. Pero para buscar el voto en las calles, padroncillos en mano visitando y motivando a nuestros partidarios, amigos y simpatizantes, defender el mismo en las urnas, también será por concurso o competencia?
Eso de universalizar las posiciones fuera su entorno lesiona la militancia de los partidos políticos que no tienen dónde ir para por lo menos conseguir una diligencia. La política es para los políticos, como lo es el beisbol para los peloteros. Si ni las direcciones provinciales ni municipales del partido conocen sus autoridades el mismo va por mal camino y con ello su liderazgo, porque no tendrán respuestas a los reclamos de aquellos que se fajaron y que todo el mundo le sintió su bajo a grajo caminando las calles vendiendo su candidato.
Si esta tendencia sigue estaríamos en los próximos años viendo una variación en la forma de hacer política, porque si vamos a seguir seleccionando nuestras direcciones administrativas y/o los puestos de trabajos en las instituciones y empresas gubernamentales en ese sentido, también debemos de hacerlo con la militancia. Elegirla por competencia para que busquen el voto con que se gana en las urnas y así no creo que el liderazgo ni la militancia política sufra.
Las propuestas para ocupar los cargos públicos deben salir de los partidos de acuerdo al perfil del puesto. He dicho. Caso cerrado!!!
Por Hidalgo Rocha Reyes
El autor es abogado y comunicador
Barahona, 04 Marzo, 2018.-