Donald Trump atribuye la violencia a las enfermedades mentales.
Ante la recién masacre ocurrida en Texas donde un tirador armado de una escopeta entro a una iglesia disparándoles a todos los feligreses, entre los que había niños, mujeres, ancianos y adultos en general, despertó la reacción del presidente Donald Tremp, quien dijo públicamente que la violencia que nos azota últimamente, es debido a que hay muchos enfermos mentales.
Preguntamos entonces, si el Presidente Trump afirma que hay muchos enfermos mentales, causa por lo que ocurren las masacres, por qué no prestar más atención a éste renglón de la salud y en vez de recortar los presupuestos en estas áreas, mejor porque no aumenta el presupuesto y así contribuir a la prevención de tales atrocidades, hechas por personas que también son víctimas del sistema.
La desenfrenada insensibilidad que viven los estadounidenses, que dentro del 60% están los que padecen de trastornos de salud mental, dejan dolor e impotencia ante los hechos más sangrientos y lamentables. Mueren sin ninguna razón aparente, personas inocentes, desde niños, adultos y ancianos. Es una violencia que no discrimina a nadie.
El Presidente Donald Trump tiene razón, porque según estadísticas más recientes aportadas por el Instituto Nacional de la Salud Mental (Nacional Instituto of Mental Meath, NIMH), parte de los Institutos Nacionales de la Salud (Nacional Institutos of Meath, NIH) los cuales nos informan que, en todo el mundo los trastornos de la salud mental, representan cuatro de las 10 causas principales de discapacidad en los Estados Unidos.
La depresión grave (depresión clínica), el trastorno maníaco depresivo (trastorno bipolar), la esquizofrenia y el trastorno obsesivo compulsivo son los trastornos más comunes que viven los estadounidenses, según éstas entidades de salud.
Dicen ademàs,que se calcula que un 26 por ciento de los estadounidenses de 18 años de edad o mayores (alrededor de uno de cada cuatro adultos, o más de 57,7 millones) padece algún tipo de trastorno mental diagnosticable anualmente.Muchos sufren más de un trastorno mental a la vez. En particular, las enfermedades depresivas tienden a presentarse junto con el abuso de drogas y los trastornos de ansiedad, afirman.
Aproximadamente 20,9 millones de estadounidenses adultos (es decir, el 9,5 por ciento) de 18 años de edad o mayores padecen alguna enfermedad depresiva cada año (depresión grave, trastorno bipolar o distinta), segùn fuente consultada.
Dijo el Instituto Nacional de Salud Mental, que más del 90 por ciento de los suicidas tienen algún trastorno mental diagnosticable: los más comunes son un trastorno depresivo o el abuso de drogas. Y que el 2,4 millones de estadounidenses padecen esquizofrenia.
Continuò informando, que en la mayoría de los casos, la esquizofrenia aparece por primera vez en los hombres en los últimos años de la adolescencia, o entre los 20 y los 25 años. En las mujeres, la esquizofrenia suele aparecer por primera vez entre los 20 y los 35 años.
Un aproximado de 40 millones de estadounidenses adultos de 18 a 54 años de edad, es decir, el 18,1 por ciento de los individuos de estas edades, padecen cada año algún trastorno de ansiedad, informò la entidad.
También afirmò, que entre los diversos trastornos de ansiedad pueden citar el pánico, el trastorno obsesivo compulsivo (TOC), el trastorno de estrés postraumático, el trastorno de ansiedad generalizada (GAD) y las fobias (fobia social, agorafobia y fobias específicas).
Dijo ademàs, que alrededor del 30 por ciento de los veteranos de la guerra de Vietnam han experimentado el trastorno de estrés postraumático (PTSD) en algún momento después de la guerra.
La ansiedad generalizada que es un trastorno de salud, puede empezar en cualquier momento. La fobia social comienza típicamente en la niñez o en la adolescencia. El trastorno hiperactivo de déficit de atención (ADHD) es uno de los trastornos mentales más comunes en niños y adolescentes. Afecta aproximadamente al 4,1 por ciento de los jóvenes entre los 9 y los 17 años en un período de 6 meses, dijeron las organizaciones médicas consultadas en Estados Unidos.
Por Ana María Toribio
Periodista reside en Nueva York.
16 Noviembre, 2017: