Tony Mofongo: inició el negocio con 30 libras de carne de cerdo fiadas
(Foto: Wilfredo Antonio Reyes y su esposa Victoria Dolores Lantigua han luchado contra las adversidades para avanza.
Para poner a caminar el proyecto en Moca debió tomar plátanos a crédito y buscar sillas y mesas entre vecinos.
EN MOCA, 29 Julio, 2017. Una persona no siempre inicia un negocio de comida con plátanos y carne de cerdo prestados, pero así empezó Tony Mofongo, el de la alta cocina culinaria de Moca, provincia Espaillat.Su esposa María Dolores Lantigua y él quedaron sin empleos y cuando eso ocurre no queda más que sacudirse y “sacar de abajo” para seguir viviendo y para enviar los hijos al colegio.
“Inicié hace nueve años junto a mi esposa, mi cuñada y mi hijo”, le cuenta Wilfredo Antonio Reyes a elCaribe, en una conversación que -por lo interesante que resulta- amenaza con extenderse más tiempo del que se había calculado. A Wilfredo se le conoce aquí en Moca como Tony Mofongo y no se requiere presentar un currículo para referirse a él.
“Mi esposa y yo quedamos desempleados y decidimos incursionar en un colmado, pero vimos que el flujo de personas no era muy grande. Mi esposa me dijo que yo sabía hacer mofongo, porque mi mamá me enseñó, y es ahí cuando me propone que nos involucráramos en eso, a ver qué lográbamos, rememora Tony. Le apasiona hablar del tema, aunque le trae recuerdos de un tiempo en el que “la piña se puso agria”.
“Empezamos sin dinero a trabajar, con treinta libras de capa (carne) de cerdo que me fiaron para hacer el chicharrón. De ahí en adelante me puse a chequear cómo se hacía todo. Para arrancar también me fiaron cien plátanos. Cuando al otro día no pude hacer el capital para pagar, mi suegro tuvo que prestarme mil pesos para cubrir los gastos en los que incurrí”, expresa Tony Mofongo.
El emprendedor mocano no se amilana frente a las adversidades; ha logrado avanzar y hoy día es una referencia de esfuerzo en la provincia Espaillat y fuera de sus fronteras. “Avanzamos con las bendiciones de papá Dios. Él nos tiene parados. Tenemos fe en Dios de seguir creciendo, de seguir hacia adelante”, indica. El negocio de Tony (Mofongo mi Terraza) prácticamente no le pertenece a él, sino a un amplio público que le visita cada día, de lugares lejanos a Moca. “La gente ha hecho suyo este lugar para venir a comer”, dice con orgullo.
Y agrega que la idea es seguir trabajando y luchando. Mofongo mi Terraza tiene 80 empleados, que hacen varios turnos de trabajo. “Quisiera poder tener más para seguir dando empleos a personas que realmente los necesitan, para que puedan seguir llevando el moro a sus casas, a sus hogares”, comenta el propietario. Aprovecha el diálogo para informar que en las redes sociales los interesados en visitarle pueden encontrar detalles sobre el establecimiento y sus ofertas.
La capa de cerdo que le prestaron a Tony Mofongo al inicio representaba unos 900 pesos, tomando en cuenta que la libra costaba más o menos 30 pesos para entonces. Y los plátanos eran a dos pesos. Es decir, que en total, el capital con el que inició fue de unos RD$1,100.
“Te puedo decir que mi esposa y yo vinimos de pasar muchas vicisitudes. Al año –más o menos- de abrir esto me propuso mi esposa que buscáramos trabajo por otro lado, porque ella entendía que este negocio no nos iba a funcionar y porque en adición, nos estábamos endeudando mucho” recuerda Tony. No le fue fácil colocar su empresa en el sitial de hoy. “Tuve que tocar bastante puertas de amigos. Y no me las abrieron”, rememora. “Pero hoy, gracias a Dios, muchos bancos me abren las puertas por el buen
desempeño que hemos tenido”, apunta.
Para acomodar los primeros comensales que llegaron a Mofongo mi Terraza, hace nueve años, un vecino de Tony le prestó cuatro mesas y ocho sillas que tenía. “Con las sillas del comedor de mi casa buscamos otras opciones de asientos a los que nos visitaban”, dice Tony.
El dueño dice:
Mofongo mi Terraza no es el único que hace mofongo en Moca, pero está dentro de los de nivel más elevado y preferido.
Garantías
“El cliente viene aquí porque ve la calidad y el empeño con que aquí hacemos el trabajo y porque los atendemos bien”.
La visión
“Para esa gente que quiere iniciar con un proyecto pero no tiene dinero, le puedo decir que siempre se puede si te esfuerzas”.
MARTÍN POLANCO / EL CARIBE