Blas Peralta admite que disparó contra vehículo de Febrillet
Las dos personas que lo acompañaban el día del hecho también lo señalaron como el autor de los disparos
EN SANTO DOMINGO, 30 Junio 2017: Blas Peralta confiesa ante el Primer Tribunal Colegiado del Distrito Nacional que él disparó contra la yipeta del exrector de la UASD Mateo Aquino Febrillet, quien murió en el hecho.
Blas Peralta confiesa ante el Primer Tribunal Colegiado del Distrito Nacional que él disparó contra la yipeta del exrector de la UASD Mateo Aquino Febrillet, quien murió en el hecho. (Kelvin Mota)
Para sorpresa de muchos, el empresario del transporte, Blas Peralta, principal imputado por la muerte a tiros del exrector de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), Mateo Aquino Febrillet, confesó haber disparado contra la yipeta del académico. Sus dos acompañantes, el día del homicidio, también lo confirmaron.
Y es que desde que se registró la muerte de Aquino Febrillet, el 11 de marzo del año 2016, hasta ayer Blas Peralta había negado que hubiese sido el responsable de los hechos. La primera vez que lo hizo fue en NCDN el mismo 11 de marzo, cuando al ser entrevistado por Nuria Piera, indicó: “Yo le caí atrás a Eduar Montás, pero se me perdió y me devolví. Yo nunca he usado arma de fuego, yo soy una persona que nunca he tenido un arma de fuego”. Luego, en dos ocasiones, durante el juicio preliminar dijo a los periodistas que él no fue y que colaboraría con las autoridades para que el responsable por los hechos paguen. Pero ayer su discurso cambió.
Durante la audiencia su chofer, Franklin Venegas, pidió la palabra en el juicio y habló. Comenzó pidiéndole perdón a la sociedad dominicana y a los familiares del exrector por lo ocurrido. Seguidamente, indicó que aquel día, Blas Peralta le ordenó perseguir la camioneta de Mateo Aquino Febrillet y que alterado, sacó su arma, la sobó y le disparó a la yipeta. “Disparó dos veces, pero el arma se le trancó y en ese momento dijo si no se hubiera trancado me los llevo a to”.
Posteriormente habló a quien consideran su mano derecha, Geraldo Félix Bautista, quien indicó que en muchas ocasiones Blas Peralta lo amenazó de muerte a él y a su familia si hablaba. “Pido perdón por lo que pasó y sobre todo porque en el juicio preliminar las audiencias se aplazaban muchas veces por mi culpa, por mi estado de salud”, dijo.
Recordó que el abogado de Blas les dijo que no hablaran con nadie y que él iba a encargarse de todo. “Francisco me ponía en un estado nervioso. Me decía cosas y me enredaba para que declarara, por eso era que me enfermaba, porque yo sufro de la presión”, narró.
Igualmente, el coronel Rafael Herrera Peña, a quien el Ministerio Público acusa de haber sido contactado para cambiar el cañón al arma homicida, destacó durante su intervención que no tuvo contacto telefónico durante el día de los hechos con Blas Peralta, porque no tenía teléfono y que cuando habló con él fue en persona. “Dentro del vehículo yo le pregunto con qué usted le tiró y me dijo que con la pistola esa. Sé cuál es la pistola, porque es la única que tiene que fue la que le asignó la Policía”.
Asimismo, señaló que no sabe qué pasó con la pistola porque él no la vio y dejó claro que su familia está muy afectada con esta situación y teme que le pueda suceder algo.
“Hago un llamado al Procurador General de la República y a la sociedad dominicana, que cualquier cosa que le pase a mi familia o a mí, desde un simple accidente de tránsito, responsabilizo única y directamente al señor Blas Peralta y a su familia”, expresó.
Sí, yo disparé
Finalmente, le llegó el turno a Peralta, quien frente a las juezas que conforman el Primer Tribunal Colegiado, representantes del Ministerio Público y asistentes a la audiencia, confesó haber disparado contra la yipeta. “Yo no puedo negar aquí que disparé, sería un irresponsable y yo no soy un hombre irresponsable, yo soy un hombre que dirijo a 92 mil hombres; ahora, hay que ver por qué fue que yo hice los disparos”, dijo.
En su exposición, de 30 minutos, Peralta señaló que en el restaurante el Lago luego de haberse tomado unas tres o cinco botellas de vino Eduar Montás se puso violento. Le propinó un golpe y luego huyó; posteriormente él se montó en la yipeta y fue su chofer, Franklin Venegas, quien persiguió el vehículo de Aquino Febrillet y que Geraldo Félix Bautista le entregó una pistola y él disparó.
“Me montaron en una yipeta y con esa galleta que me dieron, vengo un poco acalorado, pero yo no sé que la yipeta que perseguimos es la Febrillet”, señaló.
Reiteró que sí disparó a la yipeta, pero que no sabía que ahí viajaba el rector; además negó la versión de que se le hubiese trancado la pistola y señaló que si hubiera querido matar a alguien hubiese descargado los 17 tiros de su arma y no sólo dos. Además, acusó al coronel Rafael Herrera Peña de tener el arma homicida, la cual le entregó personalmente para que le cambiara el cañón.
Por último, pidió perdón a los familiares y a la sociedad dominicana y dijo que lo más valiente de un hombre es cuando admite que cometió un error.
Ayer, también participaron en la audiencia, desde Estados Unidos a través de videoconferencia, uno de los testigos y la hija de exrector. El primero, Omar Enriquillo Sosa Méndez, conductor del vehículo donde viajaba Mateo Aquino Febrillet el día del suceso, identificó a Blas Peralta como la persona que disparó; mientras que la hija de la víctima, Jessica Aquino Lapaix, condenó el hecho y pidió que se aplique todo el peso de la ley. “Espero que se aplique a Blas Peralta todo el peso de la ley y pague por el daño que hizo a mi familia”, expresó.
/EL CARIBE/.