Arlette y el coronel
La grandeza de un pueblo no se calcula en base a la dimensión de su territorio, ni se mide tomando en cuenta el tamaño de su población; un buen indicador lo sería la memoria de sus héroes y mártires. Es deber de quienes escriben la historia mantener viva la llama del recuerdo de aquellos que ofrendaron su vida en pro de la libertad y bienestar nacional. Uno de esos hombres responde al nombre de Rafael Fernández Domínguez, descrito por Juan Bosch como “Soldado del Pueblo y Militar de la Libertad”.
Me ha correspondido la dicha y honra de recibir de manos de la señora Arlette Fernández, viuda de Fernández, presidenta de la Fundación Coronel Rafael Tomás Fernández Domínguez una copia del libro de su autoría que lleva el título de su esposo. Junto con la obra recibí un video complementario del texto; ambos deberían estar presentes en cada una de las escuelas del país y su contenido ser enseñado a todo el alumnado dominicano. Desde que esta tercera edición se posó en mis manos, decidí no soltarlo hasta haber absorbido todo su contenido.
La obra narra en un bello estilo que solamente una culta dama es capaz de impregnarle a un trabajo histórico, la secuencia cronológica de la vida de su compañero, interrumpida tempranamente de forma trágica. Las imágenes fotográficas incluidas refuerzan la narrativa de antepasados, infancia, niñez, adolescencia, juventud y adultez del héroe constitucionalista.
El Coronel Fernández Domínguez es el prototipo de militar con una firmeza sagrada de ideales patrióticos; honesto a carta cabal, a tal punto que desde el exilio, en la última carta enviada a la madre de sus hijos le advertía: <>. A dos décadas de la caída del coronel, don Juan diría: <>. Arlette recoge testimonios de gente que conoció y trató a su marido de cerca en momentos muy cruciales. Milagros Ortíz Bosch opinó: <>.
Medio siglo después de la muerte del fundador del movimiento a favor del restablecimiento del gobierno constitucional que presidiera Juan Bosch en 1963, resulta beneficioso recordar este modelo de militar comprometido con el porvenir y soberanía de su amada patria. El decoro, respeto, dignidad, seriedad, compromiso y entrega sin límites a la salvaguarda dominicana son atributos que acompañaron a este noble héroe nacional. El libro de Arlette impide que la polilla alzheimeriana consiga que olvidemos a este valeroso hombre de armas y con él sus ideales.
Por SERGIO SARITA VALDEZ
9 GOSTO, 2016.-