Carta al Prof. Bosch ( esta persona es un gran amigo )
Carta al Prof. Juan Bosch (4).
3 de mayo del 2016
Prof. Juan Bosch.
Avenida El Purgatorio Casa #1963 casi esquina La Gloria
Ciudad El Cielo, República de Dios
Querido Profe:
Hace cien años que usted vino al país y hace casi ocho años usted se marchó hacia el exilio cósmico divino. Aunque solo hace casi 8 años, extrañamos mucho sus enseñanzas, su pulcritud, su honestidad puesta a pruebas a toda capacidad, y sobre todo esa forma magistral de decir las cosas para que todas las capas sociales, especialmente la capa baja del país, entendieramos las cosas por más complicadas y complejas que estas resultaran. Comprende? Oh! Gran maestro de maestros.
Cuánto extrañamos el profesor gigante que usted lleva por dentro y que puso a disposición de todo el mundo, con esa capacidad divina para comunicar las cosas, llevando el pan de la enseñanza a cada rincón del país. Comprende?
Sólo de un gigante humanista como usted, con ese desprendimiento único a las cosas materiales y terrenales aprendí que, el progreso de los hombres no se mide por la capacidad que estos tengan para acumular cosas materiales, sino que se mide, por la capacidad espiritual que tengan de servirle a la humanidad sin esperar nada a cambio que no sea la satisfacción de haber servido a sus semejantes.
Sólo usted lo tuvo todo. Sólo usted no tuvo nada, y quizás éste sea el mejor legado que usted nos haya dejado para esta sociedad de deseos insaciables por las cosas materiales, porque en esta sociedad prodrida
solo vale quien tiene.
Profe, de sus dos hijos tengo para decirle que están faltándole el respeto a su razón de ser y a la formación que usted le dió como todo buen padre. Hoy dia están gozosos dictando y haciendo leyes a sus antojos. Moldeándolas a sus medidas como traje que se van a prestar cada cuatro años para el festín de lo usted
una vez llamó, con sobrada razón, el “Matadero Electoral”. Como dice Gibrán Khalil Gibrán, dictando leyes para ellos mismos, para después violarlas y quebrantar sus preceptos, como niños que construyen castillos de arenas para después destruirlos en medio de risas y carcajadas sarcásticas ante la mirada atónita de un pueblo que se ve traicionado.
Muchos aseguran que usted le dejó como herencia a este pais sus dos hijos, y que se han convertido en los dos peores cánceres que le haya pasado al país en todo lo largo de su accidentada historia política. Y esto no podia ser menos de ahí, porque todos sabemos que Colón no vino acompañado de las hermanitas de la caridad. O es que acaso somos el producto de ese desgraciado remanente de
despredadores históricos?
Profe, están componiendo con letras nuevas el danzón titulado “Quítate tu pa’ ponerme yo”, para que el
pueblo lo baile gozosamente cada cuatro años de engaños, demagogia, corrupción y falsas promesas. Profe, entre usted y yo, los votos ya no se consiguen en las tribunas, ahora se consiguen en los bancos. Si usted
regresara ahora, le aseguro que usted no sacaría ni uno. Y con qué, si usted no tiene ni en que caerse muerto.
Profe, el pueblo no necesita más leyes sancochadas al vapor, el pueblo necesita que se cumplan. Ahora Profe, lo que sí está necesitando el pueblo dominicano con mucha urgencia y que el país clama en lo más profundo de sus entrañas, son las siguientes carencias: doce docenas de Freddy Beras Goico, Ramón Antonio Veras, y de Miguel Cocco. 24 docenas de Francisco Alberto Caamano Deño, Fernández Dominguez, Manolo Tavarez Justo, Capitán Peña Taveras y de Lora Fernández, 10 docenas de Orlando Martinez, Goyito Castro, seis docenas de Nuria Piera y Huchi Lora, Cuatro docenas de Guillermo Moreno, para que nadie pueda callar el cantor y la verdad de su canto.
Se necesita cuanto antes doce docenas de Juan Tomás Diaz, Tunti Cáceres, Teniente Amado Garcia guerrero, Pedro Livio Cedeño, Huáscar Tejada, Antonio de la Maza, Roberto Pastoriza, Amia Tió e
Imbert Barrera, para que en el país no se pierda el valor y la gallardía por muy duro que fueran los tiempos.
Estamos necesitando con carácter de urgencia 12 docenas de Mamá Tingó para esparcirlas en los campos dominicanos y regar la tierra con la esencia de aquellos que quieren trabajarla. Para volver a llevar el verde de la esperanza a los campos avandonados. Para surcar con sudor y sangre la tierra que nos provee los alimentos a cambio de nada.
La patria jóvenes sanos, por eso la patria necesita 24 docenas de Amín Abel hasbún, Flavio Suero, Otto Morales, Pichirilo, Amaury Germán, La Chuta, Homero Hernández, Orlando Mazara, Henry Segarra Santos y muchos ramilletes de Palmeros. Estamos necesitando muchos Pérez Vargas, Payero Ulloa, Lalane José, Claudio, Herman, Holguín Marte, y Peña Jáquez, para que el futuro de este país no termine envenenado en las calles y campos dominicanos.
El pueblo hoy dia necesita docenas de Aniana Vargas, Yolanda Guzmán, Gladys Segarra, Hemanas Mirabal, y Muchas Doña Chucha. El País necesita urgentemente doce docenas de Dr. Cruz Jiminián, Padre Rogelio Cruz, muestras inequívocas de temple, sacrificio y vocación de servicio.
Los Obreros y chiriperos necesitan muchos Mauricio Baez y muchos Maximiliano Gomez (El Moreno), y Barbarín Mojica. Necesitamos más 27 de febrero, más 16 de agosto, más 30 de mayo, más Playa Caracoles, más 14 de junio, y muchos muchos 24 de abril, como muestra de coraje y valentía de un pueblo que no se doblega ni aun en los momentos más difíciles.
El país necesita toneladas de voluntad política, de pulcritud, de honestidad, dignidad y sobre todo toneladas de paz, sinceridad y lealtad para poder mirar con la frente en alto a todos aquellos que inmolaron sus vidas por la liberación nacional. Para poder mirar hacia el sol sin que nos queme las caras, y sin tener que agachar la cabeza en frente de Duarte, Sanchez, Mella y Luperón. El Pueblo necesita hombres y mujeres dispuestos a dar y dar hasta el cansancio, hasta que duela en el corazón, de lo contrario, esto no tiene sentido. De esto seguir así, muchos tendrán que andar con sus cabezas dentro de fundas, si es que terminen con ellas sobre los hombros. Comprende?
Sin más nada,
El Pueblo Dominicano