Policía impidió multitud linchara dos ladrones en Tamayo
EN TAMAYO, (República Dominicana), 14 abril, 2016: Una enardecida multitud estuvo a punto a linchar a dos supuestos ladrones que la mañana de este jueves penetraron a una vivienda, donde golpearon a su propietario y se llevaron 50 mil pesos y otros objetos de valor, en hecho ocurrido en la comunidad de Bayahonda de este municipio de la provincia Bahoruco.
Se trata de los señores Jorge Bienvenido de Los Santos, de 45 años y María Cristina Gómez, de 24, quienes testimoniaron que se trasladaron desde la ciudad de Haina a cometer atracos en la zona, quienes contaron con la colaboración de nativos tameyenses que los ayudaron a
planificar las acciones delictivas, los cuales no han sido identificados.
Los residentes de Bayahonda se percataron de que los cacos estaban escondidos en unos matorrales en las inmediaciones de la comunidad de Batey Isabela, a donde acudieron, tendieron un cerco y atraparon a dos de ellos, a los que propinaron golpes.
La policía contra robos, encabezada por el mayor Primitivo Mosquea, de la comandancia de Neyba, se presentó al lugar donde los comunitarios tenían acorralados a los supuestos ladrones e impidió que fueran linchados. Uno de ellos tenía sangre en distintas partes de su cuerpo.
Desde la comunidad de Bayahonda, una caravana se trasladó detrás de la camioneta de la Policía hasta el cuartel de Tamayo, con deseos de que se les dejara linchar a los desaprensivos, los que fueron más tarde conducidos al cuartel policial en Neyba, donde se les formulará cargos y ser sometidos a la acción de la justicia.
El atraco en Bayahonda se produjo a las seis de la mañana en la calle Principal en la casa No.16, propiedad del nombrado Braudilio Antonio Gerardo, quien fue golpeado en la cabeza.
Los ladrones al parecer estaban al asecho, ya que aprovecharon que la esposa de Braudilio Antonio se estaba ejercitando, dejando la puerta semicerrada.
La Policía no informó si ocupó en manos de los supuestos ladrones, el dinero y los demás objetos robados en la vivienda.
Por: Guillermo Cuevas