OPINIÒN. Una mujer morena desnuda o encuera y con piernas jabonera
Cuando leí la información sobre el muro de arte pintado por artistas urbanos en honor a nuestro Ramón Oviedo, solo llegue a decir “Sorprendente” como cintillo en la información que tomamos de un blog digital y que subimos como noticia a nuestro portal.
Realmente me sorprendió la información, aun sin saber los motivos ni indagar sobre el mismo por la credibilidad del medio que dio la información, pero también no sin antes dejar de ambular en nuestro consciente que solo se trato de algún error humano de quien supuestamente mando a realizar tal ejecución.
Realmente me sorprendió la información, aun sin saber los motivos ni indagar sobre el mismo por la credibilidad del medio que dio la información, pero también no sin antes dejar de ambular en nuestro consciente que solo se trato de algún error humano de quien supuestamente mando a realizar tal ejecución.
Pero más sorprendentes han sido los comentarios despectivos, fulminantes, destructores, descalificativos morales e ignorantes contra el pastor Fernando Fleming, a través de medios de comunicación y redes sociales. Realmente nunca pensé que por un hecho de esta naturaleza, ciudadanos nuestros podían acabar tanto con munícipe como Fleming.
Sea por Fe, o por convicción de que lo expresado allí es de mal ejemplo para lo suyo o por simple gusto que Fleming haya mandado a borrar ese mural artístico, según dicen también de su propiedad, frente a la iglesia que pastorea, no nos da a nosotros razón para tales calificativos y ofensas a un hombre que ha aportado y aporta a nuestra sociedad más que el error que pudiera haber cometido.
Fernando Fleming es un ejemplo a seguir cristianamente y socialmente. Es un emprendedor, un formador, un munícipe ejemplar que debemos de cuidar. Es un hombre nacido en la humildad que da la Fe, por la cual vive y transita haciendo grandes obras para esta sociedad nuestra. Ese cambio de imágenes, sea de gusto de unos y mal de otros, no son motivos para querer borrar los aportes que durante toda su vida Fleming ha hecho a favor de esta comunidad.
Cuantos Fernando Fleming no quisiéramos nosotros tener en cada esquina de esta ciudad. Gente que como El aportara para mejorar y cambiar en jóvenes actitudes delictivas y criminales, orientándolo a través la Fe para que tengan un futuro mejor, para que nuestra comunidad viva en paz y tranquilidad.
Este tipo de acciones destructoras de moral y principios, como los comentarios vistos, nos hacen ver que realmente no importas cuantos hagas en la vida por lo demás y tu comunidad, si cuanto tropieza son los de casa lo primeros que te lanzan las piedras. La trayectoria, las acciones, los aportes sociales y comunitarios de Fernando Fleming están más allá de una mujer morena desnuda o encuera y con piernas jabonera.
POR HIDALGO ROCHA REYES