Merquisedec y Mateo, dos compañeros que han partido
Recién iniciado el año pasamos por la pena de ver partir de este mundo a dos compañeros de toda una vida en las salas de cirugías públicas y privadas de Barahona.
Primero fue el Dr. Máximo Mateo, un brillante cirujano general, profesor universitario de la UASD, un verdadero fajador que salvó tantas vidas en esta Región.
Luego Merquisedec Santana, un enfermero a quién entrenamos como anestesista para suplir el déficit regional imperante en esta especialidad en las décadas de los años 80, 90 y 2000. De todas las personas que recibieron nuestras enseñanzas fue quién más asimiló los conocimientos recibidos.
Su capacidad laboral y técnica fue tan inmensa, como inmensa fue su responsabilidad y su trato afable para con todos sus pacientes.
Dios les tenga en gloria, y a sus respectivas familias que pasan por tan duros momentos les expresamos nuestra solidaridad en este trance tan difícil de la resignación. Paz a sus restos.
POR VINICIO LÓPEZ