Inmigrante africano rescatado de una yola se ganó la lotería española

MADRID. Unos 35 migrantes africanos, incluido al menos uno que fue rescatado de una patera en el mar, están entre los ganadores del Gordo de Navidad de la lotería española, según un agente de lotería que vendió un millar de boletos premiados con 400.000 euros (438.000 dólares) cada uno.

Entre los ganadores que compraron los boletos en la ciudad costera de Roquetas de Mar, en el sur del país, había migrantes de Senegal, Mali y Marruecos, dijo el dueño de la agencia, José Martín, al diario La Voz de Almería, que publicó la nota el jueves.

Un hombre senegalés llamado Ngame explicó a los medios que él y su esposa fueron rescatados por los guardacostas españoles en 2007 cuando viajaban en una embarcación con 65 personas a bordo desde la costa oriental africana a las islas Canarias.

Frente a la agencia de lotería, Ngame lloraba al mostrar una fotocopia de su boleto ganador con el número 79140. El boleto le costó 20 euros. Agradeció a España por salvar su vida y darle la oportunidad de comprar un billete de su famosa lotería.

Roquetas de Mar se encuentra en la provincia de Almería, donde muchos migrantes trabajan en los campos de verduras y frutas. La región también depende mucho del turismo, pero el desempleo es del 31%, muy por encima del promedio nacional de 21%.

Ngame, quien no reveló su apellido, dijo que su esposa y él llevan una vida dura en Almería. Dijo que no han decidido qué harán con el dinero.

“No estoy seguro”, dijo. “Es demasiado pronto para decidir. Hablaremos y veremos”.

El agente Martín dijo que algunos migrantes no sabían cómo cobrar sus premios, de manera que los acompañó al banco.

Aunque otras loterías ofrecen premios mayores, el Gordo español reparte más dinero que cualquier otro en el mundo. Casi todo el país compra boletos.

Casi la mitad de los boletos ganadores en la agencia de Roquetas de Mar fueron adquiridos por una escuela secundaria de la población vecina de Laujar de Andarax, con 1.600 habitantes. Los estudiantes revendieron los boletos para recaudar fondos para un viaje escolar, de modo que el pueblo estaba lleno de ganadores.