A TEUDDY SANCHEZEn el primer aniversario de la muerte de Teuddy Sánchez
POR ALEJANDRO SANTANA: Cuando tan inesperadamente partiste, la noticia me impactó, la llamada de Elphis Pérez me transportó a un estado de shock sencillamente no lo creía y no quise entenderlo ni aceptarlo, sólo atiné a llamar a tu casa y tu hijo Ariel me confirmó la noticia.
Alejandro, se murió mi papá, el estaba llorando y en linea lloramos los dos, eso me impactó más que la muerte de mi madre, pues para la muerte de ella yo estaba preparado pero para tu partida , amigo no lo estaba, sentí que había perdido algo de mi.
Salí como loco de mi casa, me encontraba frente al computador, haciendo notas para los periódicos como de costumbre a esa hora, lo deje todo, encaminé mis pasos al centro médico donde me indicaron que te habían llevado, ya en el lugar habían otros periodistas y amigos, no tuve el valor de entrar a verte.
Cuando confirmé de primera mano la verdad que no quería aceptar llamé a Néstor de Jesús Laurens, ya lo sabia y percibí que estaba llorando y sólo atinó a decirme ya se la noticia y es demasiado fuerte, fui al lugar pero no pude quedarme, la verdad es dura, en esa ocasión hable con el ser humano, no con el amigo duro a la hora de decir las verdades.
Del Centro Medico salí con Daniel Urbaez y Benny Rodríguez hacia la funeraria El Ángel, ya ellos habían hecho contacto con José del Castillo y Olivo D León y tenían todo dispuesto para tu funerales con las condiciones que ameritabas amigo y colega.
Tu velatorio fue una manifestación de dolor y solidaridad, todos estuvimos allí acompañando a tu madre, hermanos hijos y esposa, como siempre ocurre en estos casos los periodistas y comunicadores dimos ejemplo de unidad y solidaridad.
A un año de tu muerte debo decir que estoy seguro que he perdido a un hermano y amigo, sobradas razones tengo para hacerlo público pues a mi me ha hecho falta tu presencia y solidaridad, solidaridad demostrada frente a las adversidades de amigos y colegas, siempre estuviste presente en esos momentos difíciles de la vida y yo te acompañaba.
Durante varios años estuvimos al frente de las directivas de los dos gremios que nos agrupan el CDP y SNTP, desde esas instancias practicamos la solidaridad para con nuestros compañeros, desde ahí luchamos por mantener la unidad de ambos gremios desde ahí hicimos cosas a favor de la clase.
Sobre la vida y ejercicio de la profesión de periodista de Teuddy, debo decir que siempre no fue comprendido, como profesional de la pluma tubo choques con personas afectadas por alguna noticia, yo no digo que fue el mejor como muchos hoy aseguran, puedo decir que asumiste el compromiso de llevar las noticias hasta los ciudadanos que destacaste lo que tuvo a tu alcance y lo que los medios donde laboraste te permitieron.
Ya en tu medio, Ecos del Sur , si asumiste un ejercicio mas frontal tus publicaciones no siempre fueron bien recibidas por muchos te peleaste con muchos por decir verdades, yo conozco la historia mas que quienes hoy dicen que fueron tus amigos porque siempre estuve presente en las altas y en las bajas.
Porque el periodista cuando está en un ejercicio comprometido con la verdad choca con intereses, uno los aprecian otros lo satanizan, pues el periodista no es cadenita de oro.
Sobre tu ejercicio, puedo decir que estuvo ajustado a la realidad del momento, que agotaste un momento brillante del ejercicio como lo hicieron otros antes que tu y en otras épocas, pues el periodismo en Barahona en la Región ha tenido siempre sus momentos de glorias y muchos al igual que tu han sido actores de primer orden.
En este aniversario sigo recordando a un amigo a un colega que se fue de este mundo, que igual que otros nos ha dejado un legado y una antorcha que ya muchos han levantado como tu lo hiciste cuando a otros les tocó partir.
Te recordaré como fuiste un ser humano con virtudes y defectos, capaz de decir la verdad de frente, pero compasivo con los demás en las adversidades, solidario extremado y una gran visión sobre el ejercicio del periodismo, yo puedo decirlo porque siempre estuve a tu lado y hoy que te haz ido en muchas ocasiones he sentido tu presencia y hasta he creído escuchar tu voz diciéndome, Alejandro no jodas, esa nota la haremos después.