Muertes maternas preocupan autoridades salud
La mortalidad materno-infantil sigue siendo un tema que mantiene preocupada a las autoridades de salud dominicanas, donde los indicadores parecen alejarse cada día más de los compromisos asumidos con miras a reducir estos fallecimientos.
De acuerdo a esta realidad, se habían planteado una reducción de hasta 45 muertes maternas por cada 100 mil nacidos vivos, como compromiso de los Objetivos del Milenio; pero ese indicador se ha multiplicado, marcando unos 109.4 fallecimientos por esa causa.
Como estrategia para reducir las muertes, según dan a conocer informes de prensa de las distintas maternidades, están capacitando al personal médico y de enfermería, a fin de fortalecer las atenciones y evitar que más mujeres sigan muriendo en estos centros.
No obstante, las amenazas a la salud materna en los hospitales públicos siguen latente, al parecer por dejadez de los especialistas y la baja calidad humana en la asistencia a las parturientas.
Testimonios recogidos en la Maternidad Nuestra Señora de la Altagracia, donde se realiza la mayor cantidad de partos en el país, dan cuenta de que en una cama acomodan hasta tres mujeres; las salas carecen de ventilación apropiada y los usuarios tienen que dar dádivas al personal de apoyo para conseguir una cama.
Escenarios como este no difieren de la atención ofrecida en las demás maternidades u hospitales donde se realizan partos.
De acuerdo a datos oficiales en la semana 33, comprendida del 9 al 15 de agosto, el boletín de la Dirección General de Epidemiología del Ministerio de Salud, notifica 94 muertes maternas y 32 infantiles.
Apunta que el 62 % (58/94) han ocurrido en cinco provincias: Santo Domingo (30), Santiago (9), San Pedro de Macorís (7), San Cristóbal (6), y La Vega (6).
Igualmente, explica que el 58% (55/94) sucedió en siete centros: José María Cabral y Báez (10), Maternidad Nuestra Señora de la Altagracia (10), Centro Materno Infantil San Lorenzo de Los Mina (10), Antonio Musa (9), Luis Morillo King (6), Materno Infantil Dr. Reynaldo Almánzar (5), y Francisco Moscoso Puello (5).
En relación a la mortalidad infantil (MI) se notificaron 32 muertes, ocurridas en 16 hospitales, entre los principales: Hospital Infantil Arturo Grullón (7), José María Cabral y Báez (5), Reynaldo Almánzar (3), Marcelino Vélez Santana (2), San Vicente de Paul (2), Maternidad Nuestra Señora de la Altagracia (2), y Robert Reid Cabral (2).
Estos indicadores son seguidos por el Observatorio de Mortalidad Materna, con el objetivo de que sirvan a las autoridades de Salud Pública para mejorar las atenciones a las parturientas.
Según los datos, la República Dominicana muestra 109.4 muertes maternas por cada cien mil nacidos vivos, una de las más altas tasas en América Latina, lo que significa que el país no logró alcanzar el Objetivo número 4 de Desarrollo del Milenio, dirigido a mejorar la salud materna.
Giselle Scanlon, directora ejecutiva del Instituto Nacional de la Salud, institución que coordina el Observatorio desde 2013, ha explicado que desde 1990 el país asumió la meta de reducir la mortalidad materna en un 75% para este año. Sin embargo, sus estadísticas superan el promedio de América Latina y el Caribe, de 85 fallecimientos por cada 100 mil nacidos vivos.
Mientras que Martha Rodríguez, coordinadora del Observatorio, ha declarado que dan seguimiento a los indicadores trazadores como amenazas a la salud materna en los centros públicos de salud con mayor número de partos.
Entre ellos las maternidades Nuestra Señora de la Altagracia y San Lorenzo de los Mina, en Santo Domingo, y el hospital José María Cabral y Báez, de Santiago.
Rodríguez citó que entre las variables que contribuyen al aumento están la disponibilidad de medicamentos de atención a los alumbramientos y la existencia de insumos de planificación familiar, así como la relación entre el número de partos, versus número de cesáreas.
En noviembre de 2014, el Observatorio de Mortalidad Materna (OBMM) desarrollado por el Instituto Nacional de la Salud (Insalud), presentó los hallazgos del estudio sobre Procedimientos de las Auditorías de Muertes Maternas, realizado en los cuatro (4) centros de salud con mayor índice de muertes maternas del país: Maternidad Nuestra Señora de La Altagracia, Maternidad San Lorenzo de Los Mina, Hospital Luis Eduardo Aybar y el Hospital José María Cabral y Báez de Santiago.
Insalud creó el Observatorio de Mortalidad Materna con el objetivo de movilizar compromisos políticos y sociales de los distintos sectores, para de esta manera responder al desafío que implica la alta mortalidad materna en el país, que para entonces mostraba un promedio de 106 por cada 100 mil nacidos vivos, lo que significa que en vez de bajar ha subido.
Como parte de las reflexiones que surgieron en la implementación de las acciones del Observatorio, se reconoció la importancia del proceso de las auditorías de las muertes maternas que se realizan en los centro de salud del país, como una metodología o herramienta eficaz para poder determinar las causas de los decesos y a la vez para conocer cuáles acciones correctivas son necesarias implementar a fin de mejorar la calidad de las atenciones a las embarazadas/Tomado de DominicanosHoy/.
De acuerdo a esta realidad, se habían planteado una reducción de hasta 45 muertes maternas por cada 100 mil nacidos vivos, como compromiso de los Objetivos del Milenio; pero ese indicador se ha multiplicado, marcando unos 109.4 fallecimientos por esa causa.
Como estrategia para reducir las muertes, según dan a conocer informes de prensa de las distintas maternidades, están capacitando al personal médico y de enfermería, a fin de fortalecer las atenciones y evitar que más mujeres sigan muriendo en estos centros.
No obstante, las amenazas a la salud materna en los hospitales públicos siguen latente, al parecer por dejadez de los especialistas y la baja calidad humana en la asistencia a las parturientas.
Testimonios recogidos en la Maternidad Nuestra Señora de la Altagracia, donde se realiza la mayor cantidad de partos en el país, dan cuenta de que en una cama acomodan hasta tres mujeres; las salas carecen de ventilación apropiada y los usuarios tienen que dar dádivas al personal de apoyo para conseguir una cama.
Escenarios como este no difieren de la atención ofrecida en las demás maternidades u hospitales donde se realizan partos.
De acuerdo a datos oficiales en la semana 33, comprendida del 9 al 15 de agosto, el boletín de la Dirección General de Epidemiología del Ministerio de Salud, notifica 94 muertes maternas y 32 infantiles.
Apunta que el 62 % (58/94) han ocurrido en cinco provincias: Santo Domingo (30), Santiago (9), San Pedro de Macorís (7), San Cristóbal (6), y La Vega (6).
Igualmente, explica que el 58% (55/94) sucedió en siete centros: José María Cabral y Báez (10), Maternidad Nuestra Señora de la Altagracia (10), Centro Materno Infantil San Lorenzo de Los Mina (10), Antonio Musa (9), Luis Morillo King (6), Materno Infantil Dr. Reynaldo Almánzar (5), y Francisco Moscoso Puello (5).
En relación a la mortalidad infantil (MI) se notificaron 32 muertes, ocurridas en 16 hospitales, entre los principales: Hospital Infantil Arturo Grullón (7), José María Cabral y Báez (5), Reynaldo Almánzar (3), Marcelino Vélez Santana (2), San Vicente de Paul (2), Maternidad Nuestra Señora de la Altagracia (2), y Robert Reid Cabral (2).
Estos indicadores son seguidos por el Observatorio de Mortalidad Materna, con el objetivo de que sirvan a las autoridades de Salud Pública para mejorar las atenciones a las parturientas.
Según los datos, la República Dominicana muestra 109.4 muertes maternas por cada cien mil nacidos vivos, una de las más altas tasas en América Latina, lo que significa que el país no logró alcanzar el Objetivo número 4 de Desarrollo del Milenio, dirigido a mejorar la salud materna.
Giselle Scanlon, directora ejecutiva del Instituto Nacional de la Salud, institución que coordina el Observatorio desde 2013, ha explicado que desde 1990 el país asumió la meta de reducir la mortalidad materna en un 75% para este año. Sin embargo, sus estadísticas superan el promedio de América Latina y el Caribe, de 85 fallecimientos por cada 100 mil nacidos vivos.
Mientras que Martha Rodríguez, coordinadora del Observatorio, ha declarado que dan seguimiento a los indicadores trazadores como amenazas a la salud materna en los centros públicos de salud con mayor número de partos.
Entre ellos las maternidades Nuestra Señora de la Altagracia y San Lorenzo de los Mina, en Santo Domingo, y el hospital José María Cabral y Báez, de Santiago.
Rodríguez citó que entre las variables que contribuyen al aumento están la disponibilidad de medicamentos de atención a los alumbramientos y la existencia de insumos de planificación familiar, así como la relación entre el número de partos, versus número de cesáreas.
En noviembre de 2014, el Observatorio de Mortalidad Materna (OBMM) desarrollado por el Instituto Nacional de la Salud (Insalud), presentó los hallazgos del estudio sobre Procedimientos de las Auditorías de Muertes Maternas, realizado en los cuatro (4) centros de salud con mayor índice de muertes maternas del país: Maternidad Nuestra Señora de La Altagracia, Maternidad San Lorenzo de Los Mina, Hospital Luis Eduardo Aybar y el Hospital José María Cabral y Báez de Santiago.
Insalud creó el Observatorio de Mortalidad Materna con el objetivo de movilizar compromisos políticos y sociales de los distintos sectores, para de esta manera responder al desafío que implica la alta mortalidad materna en el país, que para entonces mostraba un promedio de 106 por cada 100 mil nacidos vivos, lo que significa que en vez de bajar ha subido.
Como parte de las reflexiones que surgieron en la implementación de las acciones del Observatorio, se reconoció la importancia del proceso de las auditorías de las muertes maternas que se realizan en los centro de salud del país, como una metodología o herramienta eficaz para poder determinar las causas de los decesos y a la vez para conocer cuáles acciones correctivas son necesarias implementar a fin de mejorar la calidad de las atenciones a las embarazadas/Tomado de DominicanosHoy/.