OPINION: FUNCIONARIOS BARAHONEROS Y DESARROLLO**
Mi familia durante muchos decenios se mantuvo (y mantiene) ligada a la honorable familia Lassis. Yo me crié correteando en su amplio patio cargado de trabajos de alta calidad elaborados por el Maestro Don Carlos Lassis. Don Carlos utilizaba todo tipo de materiales para sus obras artísticas. Manejaba la madera, el yeso, mármol, la concha de Carey, los cuernos de vaca, la tela, el pincel, el cemento. Era hábil dibujante, pintor, escultor, fotógrafo y maestro. Además era excelente tornero, diseñador y constructor de estructuras para festividades patrias.
Pero ahí no se quedaba ese incansable y meritorio ciudadano. También era un libre pensador democrático por cuyas ideas fue hostigado y apresado durante la tiranía de Trujillo. Para abundar en esta noble trayectoria Don Carlos fue un excelente Regidor que desde los años treinta fue un activo promotor del desarrollo barahonero. Para esos años llegó a Presidente de la Sala Capitular, pero cuando Juan Bosch fue Presidente en 1963, lo encontramos nuevamente desempeñando esa misma función.
Recuerdo que el área de taller de Don Carlos-como el de todo artista-tenía varias obras “a medio terminar”, dentro de las cuales había una gran escultura casi concluida con dos indígenas, uno de los cuales apuntaba con su arco, mientras el otro le indicaba hacia donde disparar. Este artista aunque no concluyó su escultura, tuvo la previsión de plasmarla en un lienzo para la posteridad:
Dentro de esta especie de “galería artística” que tenía Don Carlos Lassis en la parte trasera de su hogar, había un lienzo que tenía pintado el continente americano y una especie de cinta negra con rayas blancas que recorría un trayecto desde Norteamérica, hasta llegar a Chile. La cinta presentaba una ruptura cerca de Panamá, lo cual atrajo mi atención. Un día me atreví a pedirle una explicación sobre la obra y me dijo que el cuadro simbolizaba la unión del continente a través de la Carretera Panamericana y que el corte-interrupción de la misma se producía en Panamá, en la región del Darién, razón por la cual la cinta que simbolizaba la autopista estaba detenida en ese punto y el propósito de la obra era reclamar la continuación de los trabajos. Con esa explicación, pude entonces comprender el propósito perseguido por el Maestro.
Si Don Carlos estuviera vivo, de seguro su patio estaría lleno de cuadros que plasmarían una serie de obras de desarrollo actualmente detenidas en la provincia de Barahona, empezando precisamente por carreteras. Luego seguiría el hospital de Paraíso, el centro de atención médica construido por militares norteamericanos en Villa Central. De igual modo, estarían colgados en el patio del Maestro cuadros cabraleños de la Funeraria Municipal, el Play del barrio La Peñuela y otra imagen que simbolizaría el Centro Tecnológico, también detenido. Más allá observaríamos lienzos con bungalows a medio talle de las Playas el Quemaíto y Los Patos, junto a un cuadro grande con el Boulevar María Montéz !!
Esta simbología, esta galería de obras detenidas, a la cual debería añadírsele un anexo que contenga un conjunto de obras de desarrollo “aprobadas”, pero no iniciadas.
En los años treinta cuando Don Carlos Lassis era un destacado Regidor, en el momento que se presentaba “un tranque” en los desembolsos de una obra municipal en Barahona, de inmediato la Sala Capitular enviaba una Comisión a la ciudad capital que visitaba los Despachos de Interior y Policía, Obras Públicas, Presupuesto y áreas administrativas del Poder Ejecutivo. Estos comisionados recibían dieta para alojamiento y otros gastos relacionados con su gestión. Ellos no retornaban mientras no estuvieran solucionados los casos tratados. Como había pocos recursos para estas gestiones, los enviados aprovechaban el tiempo y eran bastante efectivos en sus diligencias. Al retornar, debían rendir un informe bien detallado de sus actividades.
Para principios de esos años treinta con regularidad la Sala Capitular con fines de ahorro, comisionaba al Coronel Leoncio Blanco que en esa época mantenía unas excelentes relaciones con el Presidente Trujillo. Este oficial era un eficaz portavoz de nuestro Ayuntamiento.
Es realmente lamentable que diariamente uno lee en la prensa el inicio de numerosas obras en todo el país, mientras en Barahona hay gran cantidad de proyectos detenidos, otros no iniciados, una Zona Franca que pudiera tener más naves y crear más empleos, un mercado dentro de un vertedero……..y lo que es más importante, la paralización de la Presa de Monte Grande !!!
Los cuartos que corren por pipá por todo el país, se detienen en el kilómetro 15 de Azua. Mientras nuestros funcionarios locales y casi todos nuestros legisladores permanecen mudos, en San Juan de la Maguana, San José de Ocoa y Azua, a cada rato anuncian un nuevo proyecto ya sea agropecuario, de vivienda, un mercado, sistemas de alcantarillado, etc.
Una información en la prensa del 18 de Marzo de este año destaca que el Gobernador de Azua junto al Senador de dicha provincia, se reunieron con el Secretario Administrativo de la Presidencia y obtuvieron los fondos faltantes para concluir su mercado municipal, cuyo costo asciende a RD$ 50 millones.
Hace tiempo que no leo que nuestros legisladores barahoneros junto a funcionarios locales y personalidades desarrollistas hagan gestiones a favor de Barahona, como la que realizaron de forma conjunta estos dos azuanos.
Por: Virgilio Gautreaux P.