PENTAGRAMA. El Boschismo: entre la apertura y la vivisección
“Yo me quedé pensando que el que no sabe perder, tampoco sabe ganar; y pretende ganar a la mala, arrebatándole a otros lo que no tiene (J. Bosch).”
Usando el método magistral de don Juan, explicar por adelantado lo que puede crear confusión en el proceso, paso a explicar el término vivisección. En el buen castellano significa: dividir un cuerpo vivo en parte, desarticular o descuartizar.
Usando el método magistral de don Juan, explicar por adelantado lo que puede crear confusión en el proceso, paso a explicar el término vivisección. En el buen castellano significa: dividir un cuerpo vivo en parte, desarticular o descuartizar.
Con relación al término apertura. Me confieso incompetente e incapaz de explicarlo. Esto en razón de que mi cultura de vida formó conceptos extraviados, yo creía y sigo creyendo que apertura significa abrir algo que está cerrado, quitar lo que sella. Permitir la entrada de algo o alguien por el espacio creado, creando un espacio definido y, lo que no se ajuste a ese espacio violenta y rompe las normas del límite creado.
La experiencia que vive el Partido de la Liberación Dominicana nos obliga a recurrir a las enciclopedias de la gratitud, de la coherencia, de la fidelidad y la honradez; para entender la intencionalidad y los propósitos de los neoliberales que controlan y desmantelan al PLD, al plantear en este Sexto Congreso superar el lastre del pasado (Norte Botello), es decir superar el boschismo. Crear un nuevo Partido (José Tomás Pérez). Asumir la Ideología Social de Mercado (Danilo Medina): el entramado político que se articula en este momento está orientado a borrar el legado del líder y maestro, condenar su pensamiento, su obra y todo lo que ha aportado a la sociedad dominicana, al mayor ostracismo político que pueda registrar la historia política dominicana.
Si este artículo fuese un pasaje épico, y la página de opinión una novela, la titularía como la Rebelión de la Horda Ingrata. Se han levantado haciendo gala del mayor cúmulo de resentimiento, rencor, simulación y odio hacia una figura que profesaron respetar y proteger.
La horda neo-liberal que se pavonea en el Sexto Congreso, hizo proceder su plan del más perverso de los instrumentos de propaganda que ha conocido la humidad, el aparato de propaganda Nazi. Creado por Goebbels para garantizar el éxito de la Filosofía expansionista del capitalismo alemán. Los aperturistas hicieron uso de esta misma máquina de propagando, creando con ello una guerra sicológica contra la figura de Juan Bosch y su concepción partidaria. Como se expresa esta acción; asumieron en su plan los cinco principios y leyes de la propaganda Nazi.
La regla de la simplificación del enemigo único y reconocible, el boschismo.
La regla de la exageración y la desfiguración, eligieron para el Sexto Congreso una imagen tenue, débil, levantando la mano izquierda para simbolizar el pasado, lo pre-revolucionario el lastre del pasado.
La regla de la orquestación. Organizaron antes de salir del gobierno una campaña para estigmatizar la figura y la obra de Juan Bosch, una campaña en la que convencieron la estructura del partido que éramos un partido de guerra fría, que estábamos atrapados en el pasado, cerrados, autoritarios, antidemocráticos, disfuncionales, de que no respondemos a las exigencias de un partido moderno.
La regla de la transfusión. No ir contra la corriente de intereses y conveniencia partidaria. Para instrumentalizar los miembros del Partido. En la nueva estructura todos seremos dirigentes medios, habrá ascenso automático, se socializará el oportunismo político. Solo hay que garantizar el mercado de los votos, formando un comité de base electoral.
La regla de la unanimidad y el contagio. Corromper los valores boschistas con favores clientelistas, ofertando la participación emocional en proyectos de retorno al poder a expensa de cualquier principio.
Toda esta estructura de propagandas está orientada a practicar al Boschismo una vivisección en el VI Congreso. Un congreso convocado con el nombre de Juan Bosch para negar al maestro, un dominicano grande, moralmente intachable. ¡Qué ironía! Convocado en nombre de quien va ser negado, ojalá el gallo no cante en el 2001, ya lo hizo en el 66 y en el 96. Si lo hace entre la hora sexta y la hora nona por tercera vez, el Sanedrín tendrá que dictar sentencia de muerte al Maestro.
¿Quedará la obra de Duarte inconclusa?
¿Qué haremos con ella?
* Este artículo fue publicado por primera vez en el desaparecido periódico El Siglo, 21 de enero de 2001. La Reelección y estoy convencido de ello, está dispuestas a llevarse por delante lo que sea necesario, aún sea lo poco que queda del P.L.D: colores y siglas. La institucionalidad del Estado no puede seguir siendo vapuleada de la forma irresponsable en que acontece, una estructura de gobierno en campaña, todo ello ante la mirada indiferente del Presidente Danilo Medina. Si no conociera los actores del espectáculo, extraño en absoluto a la cultural peledeísta, diría que es el PACOREDO el que busca la reelección. El método de destrucción de honra y desfiguración aplicada a la figura de Juan Bosch, hasta calificarlo de esquizofrénico, es el mismo que exhiben los fanáticos de la reelección hoy.
POR JUAN TOMÁS OLIVERO