Los límites invisibles del Parque Nacional Sierra de Bahoruco
EN PEDERNALES: Hace poco más de dos años, Diario Libre denunció la deforestación en la zona de El Aceitillar en las faldas de la Sierra de Bahoruco. En este punto el parque se une al Parque Nacional Jaragua.
Fue notable en ese momento el poco control de las autoridades para detener la agricultura ilegal, que por años ha afectado esta parte de la Reserva de la Biósfera Jaragua-Bahoruco-Enriquillo. A solo pocos metros de la caseta de entrada al parque, la tala y quema, además de las siembras de auyama, habichuela, maíz, entre otras, son más que evidentes.
Hace poco menos de un año Diario Libre realizó un amplio artículo sobre la elaboración y tráfico de carbón ilegal en la Sierra del lado norte, con destino al vecino país. En esa oportunidad se documentó la deforestación por esta práctica.
Esta vez, se usó lo último en tecnología para visitar la parte sur, un drone de última generación dio una vista impresionante, desde la perspectiva de las aves, de la misma zona que recorrimos a pie hace dos años.
El Aceitillar
Luego de las denuncias esperábamos ver avances en el control de la deforestación de la zona y notar algún tipo de regeneración de la vegetación de manera natural.
Iniciamos al este de la mina de bauxita, justo en donde los dos parques se unen, y era evidente la destrucción de años anteriores, así también, como ha ido avanzando sin detenerse. Lo que alguna vez fue un bosque seco, en gran parte es roca y pequeñas islas de vegetación.
"Debería ser deber de todo dominicano visitar Sierra de Bahoruco. Su importancia debe ser vivida y no explicada. Sólo así podremos defenderla."
Mario Dávalos, publicista y fotógrado de naturaleza
"La Sierra de Bahoruco, por lo aislada que se encuentra, nunca ha sido una prioridad para las autoridades, y el día que vengan a despertar será tarde. Para mi, La Sierra es una especie de Cristo: Vendida, saqueada, quemada, maltratada , convertida en carbón y aún así ella resucita como el ave fenix de sus cenizas, para brindarnos gratuitamente, todos los tesoros endémicos escondidos en el corazón de este patrimonio de nuestra isla.
Entre casas, camiones y cercos, hablamos con un grupo de haitianos agricultores y nos cuentan que esperan las lluvias para iniciar la siembra de habichuela y maíz para su patrón dominicano. "Al patrón le damos cuatro sacos de cinco que cosechamos", aseguran.
A lo lejos se veían varias columnas de humo hacia el oeste, no parecían fuegos forestales, más bien pequeños focos de fuego preparando el terreno para agricultura.
El Mogote
Unos pocos kilómetros al noroeste del poblado de Las Mercedes, donde el Ministerio de Medio Ambiente otorgó un permiso irregular que destruyó parte del parque Jaragua, llegamos a una zona llamada El Mogote. Esta zona se encuentra en el borde del Parque Sierra de Bahoruco.
Pudimos ver varias columnas de humo hacia el norte y este, verificamos el GPS, estaban dentro del parque.
Drone en el aire y aparecen un grupo de agricultores, curiosos por el ruido del aparato volador. Conversamos con ellos unos minutos y al cuestionarles sobre lo que hacen, nos dicen que acaban de prender fuego a la loma, tumbar el bosque y preparar el conuco para la siembra cuando lleguen las lluvias.
Sin dudarlo un agricultor hace mención a los "dueños" de esos terrenos y de que deben entregar cuatro de cada cinco sacos que cosecharán.
En esta captura del iPad podemos ver la deforestación desde el punto del vista del drone. Abajo, inserto, el mapa de navegación correspondiente al 2012. Existe una marcada reducción de la vegetación.
Los Arroyos
Al siguiente día subimos a la parte alta de la zona oeste del Parque, conocida como Los Arroyos. En ese momento una brigada de 160 hombres del Ministerio de Medio Ambiente, está terminando de controlar cuatro incendios en el pinar, seis kilómetros al este, donde solo se puede llegar a pie y mulo.
Aquí el parque es diferente, el bosque seco queda abajo y da paso al húmedo, ahí donde las nubes chocan con la Sierra. Es en este punto donde se concentra la mayor parte de biodiversidad del parque, flora y fauna endémica, reciben a las aves migratorias que encuentran en esta zona un hábitat para reproducirse, desde antes que el hombre pisara esta isla. Un poco más arriba el bosque húmedo cambia a exuberantes pinares.
La zona de Los Arroyos es como un limbo, nadie tiene claro dónde está el límite del parque. Nosotros tampoco estamos seguros dónde está la línea fronteriza, no hay delimitación física. Nuevamente tenemos que usar el GPS para saber si estamos fuera o dentro.
"Me duele ver como la indiferencia de las autoridades agrava los males que afectan al parque por su condicion fronteriza. Es urgente que se definan los límites del mismo y que se respeten."
Pedro Genaro, fotográfo y conservacionista.
Los bosques de la Sierra de Bahoruco no tiene el lujo del tiempo y requieren de acciones firmes e inmediatas que busquen resolver el problema de manera indefinida. Eladio Fernández, Fotógrafo y conservacionista
Es tan ilusorio que el letrero despintado de "Bienvenidos al Parque Nacional Sierra de Bahoruco" que debería marcar el límite del parque, está un kilómetro y medio parque adentro.
La deforestación casi golpea el letrero de su lado sur, como quien dice hasta aquí podemos cortar, pero luego de una curva más allá del letrero, después de unos cuantos árboles, hay surcos y siembras de aguacate, como desafiando las leyes. Es curuioso que la única palabra casi ilegible es "Bienvenidos".
Es en este punto donde el drone se eleva de nuevo, en un momento en que las nubes nos dan tregua. La vista es escalofriante, el bosque está lacerado y en muchas partes la flora nativa ha sido sustituida por aguacates de exportación.
"Ya nos estamos haciendo a la idea que en 10 años no quedarán bosques húmedos en la ladera sur de la Sierra de Bahoruco si no hay un cambio radical en el manejo."
Yolanda León, Catedrática y bióloga.
"La Sierra de Bahoruco es la reserva con mayor diversidad biológica de la isla, es triste ver como la están destruyendo y alarmante el grado de negligencia de las autoridades al respecto."
Héctor Vilorio, Fotógrafo conservacionista
"Siento que estamos perdiendo un pulmón de la República Dominicana, al perder la Sierra de Bahoruco. Invadida hoy por dominicanos y hatianos con doble ilegalidad. La tala indiscriminada y la agricultura están dejando al rojo vivo la tierra de Bahoruco. Todo esto por el poco interés del Estado Dominicano."
Nicolás Corona, guía y biólogo de campo
La historia se repite, los agricultores mencionan por nombre a sus patrones, ignoran que están dentro de un área protegida.
Un parque que no está delimitado inequivocamente, terratenientes que reclaman esas tierras como suyas, inmigrantes que por un saco de habichuelas están dispuestos a cortar lo que se ponga frente a ellos, tal y como lo dejamos hace dos años.
En lo más alto de la sierra, en Loma del Toro, en el bosque donde hubo un camino de tráfico de vehículos robados, donde solo el GPS nos dice en qué país estamos, los restos de hornos de carbón nos recuerdan lo que vimos hace un año y que sigue pasando.
Ley Sectorial de Áreas Protegidas
Zonas de amortiguamiento: Son áreas terrestres o marinas, públicas o privadas, aledañas a las áreas protegidas, sujetas a normas y restricciones de uso específico que contribuyen a la conservación e integridad de las áreas protegidas.
Parque nacional: Área natural terrestre y/o marina designada para: 1) Proteger la integridad ecológica de uno o más ecosistemas con cobertura boscosa o sin ella para provecho de las presentes y futuras generaciones; 2) excluir explotaciones y ocupaciones intensivas que alteren sus ecosistemas; 3)proveer la base para crear las oportunidades de esparcimiento espiritual, de actividades científicas, educativas, recreacionales y turísticas, considerando inversiones necesarias para ello.
/FUENTE: DIARIOLIBRE/.