Una carta a Fello Suberví
Como simpatizante que somos de las gestiones que usted desarrolló en el Ayuntamiento del Distrito Nacional, aprovecho para manifestarle que luego de cambiársele el nombre a la Zona Norte, por la de “Circunscripción 3”, aun esta demarcación geográfica sigue sin dolerle a nadie.
En los últimos 10 años este pedazo de la capital ha crecido de manera excesiva, contando hoy con 30 barrios y más de 700 mil habitantes, la más densamente poblada y la que decide el ganador de la sindicatura, con más de 300 mil adultos con derecho al voto; 7 son diputados y 14 regidores y, aún así, hoy somos mucho más pobres de solemnidad, porque estamos huérfanos de autoridades.
En los últimos 10 años este pedazo de la capital ha crecido de manera excesiva, contando hoy con 30 barrios y más de 700 mil habitantes, la más densamente poblada y la que decide el ganador de la sindicatura, con más de 300 mil adultos con derecho al voto; 7 son diputados y 14 regidores y, aún así, hoy somos mucho más pobres de solemnidad, porque estamos huérfanos de autoridades.
Nuestro espacio geográfico ha sido abandonado por Roberto Salcedo, quien no cumple con el Presupuesto Participativo Municipal. Un estudio realizado por el Observatorio de Derecho a la Ciudad (ODC), resalta que Roberto violentó en el 2014 la distribución proporcional de recursos establecida en la ley 176-07, al asignar en servicios municipales RD$ 650 millones más de lo previsto y recortar a la vez RD$ 675 millones en infraestructura urbana y obras municipales, siendo lo más grave, que en este año tan solo un 18% del total presupuestado para construcción de obras y mejoras es destinado al PPM, lo que significa una baja participación ciudadana en este renglón.
El observatorio señaló que la formulación del presupuesto en 2014 se realizó sin tomar en cuenta las necesidades del territorio y sus munícipes.
Por esa razón, la circunscripción 3, la más pobre y excluida del Distrito Nacional, tiene menores niveles de inversión que las otras dos; representando apenas el 5% del monto total gastado. Esto contrasta con el suntuoso despilfarro en el uso que del presupuesto municipal. Fello, nos hemos convertido en la carnadas de los políticos en tiempos electorales; el cerdito en puya de la navidad, bueno para el voto, pero excluidos de la ejecución presupuestaria.
Para ningún proyecto somos tomados en cuenta. Con lo único que no contamos es con un cuerpo de bomberos, pero después, tenemos emisoras de radio y canales de televisión, hospitales, una segunda líneas del metro y de transporte; parroquias e iglesias de todas las denominaciones, parques, elevados, puentes, mercados, calles, destacamentos policiales, estadios de beisbol, extensiones universitarias, politécnicos y escuelas, instalaciones deportivas y, hasta una parte del contaminado Rio Ozama nos pertenece, pero nadie nos ayuda a crecer. Ojalá, doctor Suberví, en sus recorridos por los sectores de la capital, usted le ponga mayor interés a la circunscripción 3.
Por Nélsido Herasme