El PRD en la historia reciente...
El PRD con tres cuartos de siglo de existencia, tras su fundación en el 1939, languidece crónicamente en la actualidad, con los mayores signos de muerte, jamás vividos en toda su historia, más no creemos que el verdadero final le pueda legar, en razón de que los dos factores fundamentales de su arreflexia puedan sostenerse al paso del próximo proceso electoral, uno el externo, que es el dominante, personificado por el expresidentes de la república, doctor Leonel Fernández y su sistema de justicia, hecho a su imagen y semejanza y el interno, encarnado por el ingeniero Miguel Vargas Maldonado, dependiente político del primero, el cual se derrumba por el despeñadero del descrédito político y social, a punto tal, que ambos, el primero y el último se ven impedidos por la población a hacer laborantismo político en las comunidades.
La crisis mayor que había sufrido ese partido, la constituyó la salida del presidente y líder, profesor Juan Bosch, hacen 41 años, cuando pasó a fundar el de la liberación dominicana, con un puñado reducido de cercanos seguidores, lo cual hizo sin llamar a prácticamente nadie, solo contando con su enorme prestigio y liderazgo, y sin tener competencia alguna en su liderazgo interno, solo con la externa, cuando se disputaba ventajosamente el liderazgo nacional con el doctor Joaquín Balaguer.
El PRD, solo con su gran militancia y el liderazgo de segundo nivel, que lo encarnaban el profesor Pablo Rafael Casimiro Castro y el doctor José Francisco Peña Gómez, los cuales empezaron una labor de reanimación y fortalecimiento del Perredeísmo, con la inclusión de nuevos dirigentes nacionales, recuerdo como ahora, la sugerencia por parte de Casimiro Castro, de don Néstor Matos como miembro del comité ejecutivo Nacional, que completó un número máximo en el momento, de catorce miembros, recordamos que el profesor Juan Bosch al momento de salir se manejaba con la comisión permanente, la cual era de cinco miembro.
Por su lado, el doctor Peña Gómez tomó la vocería del partido, con su programa oficial, “Tribuna Democrática”, por radio Comercial, desde allí prosiguió la labor de reactivación perredeísta y la labor de empezar a designar los que él le llamó los presidenciables, recordamos entre otros nombres, al doctor Marcio Mejía Ricart, Secundino Gil Morales, Salvador Jorge Blanco, Antonio Guzmán Fernández. Junto a los aprestos proselitistas nacieron las famosas tendencias, que le dieron un vigor enorme, además de la conformación de El “acuerdo de Santiago”, lo cual marcó el destino futuro de Perredeismo, y… en ese historial se ha dado una dinámica que se puede calificar como si fuera una ley, en cada proceso, el PRD fue victorioso en cada proceso electoral, cuando se ha realizado convención libérrima ha ganado las elecciones nacionales, prácticamente, esto ha sido como una ley física, como también se ha dado siempre, que la segunda figura en un proceso, ha pasado a ser la primera figura en el siguiente proceso, ha sido una situación “sine qua non”, y hacemos esta referencia, para que el valioso compañero Luis Abinader observe estas trayectorias, que pensamos lo colocan en la posición de Perremeísta de mayor y extenso futuro, y extrapolamos esta experiencia del PRD en el PRM, porque aunque no son los mismos partidos, literalmente Hablando, las gentes, el recurso más valioso, el human del primero, están en el segundo, sin duda alguna.
La novena convención que escogió a don Antonio Guzmán como candidato presidencial en las elecciones del año 1978 marcó esa trayectoria y el siguiente presidente lo fue el doctor Salvador Omar Jorge Blanco, 1982-1986, la tendencia visible y directa la constituía Jacobo Majluta para las elecciones 1986-1990, pero al doctor Jorge Blanco se le metió un Guacanagarismo, al igual que a algunos de sus más cercanos colaboradores, asumieron que era más conveniente para ellos, que llegara el remoto Balaguer y no su compañero de partido el licenciado Majluta. El doctor Peña Gómez no entendió esta dinámica, que colocaba en la línea de turno a Majluta y el camino quedaba expedito para él en el siguiente proceso, se enfrascó en una lucha interna intestina por la candidatura a destiempo y los resultados los conocemos.
El momento actual, dentro de la clase Perremeísta indica a Hipólito Mejía como la opción del momento y al joven y grandioso Abinader como la siguiente gran opción…
POR JOSE ANTONIO MATOSPEÑA