Una golondrina no hace verano, pero.... (I)
Para nadie es un secreto que he sido y siempre seré, con entera satisfacción y hasta el último soplo de vida, un ciudadano marxista, no con palabras ni teorías, sino con hechos. Por mi formación familiar y por convicción politica no me atrae la idea de acumular dinero, bienes, rodearme de lujos o convertirme en un infame lisonjero de algún politico local para conseguir una “botella” o un empleo en el Estado, mucho menos tocarle las puertas de sus despachos a funcionarios en busca de limosna.
Nunca he recibido ni aceptaré regalos ni favores de ningún político de turno. Lo poco o mucho que tengo se lo debo a mi trabajo, a mi humilde negocio que ha quebrado tres veces por muchas razones, entre ellas, por haber sido confianzudo con los "amigos" hasta el punto de hacerme responsable de cuantiosas pérdidas y deudas. Pero nunca pierdo la esperanza ni tampoco acudo a supersticiones religiosas en busca de ayuda o milagros para salir de mis problemas porque soy ateo por lógica. Cada mañana me levanto con fuerza huracanado y continúo viviendo el presente. A muchos les sorprende mi respuesta cuando le devuelvo el saludo con un “Yo siempre estoy bien”.
Nunca he recibido ni aceptaré regalos ni favores de ningún político de turno. Lo poco o mucho que tengo se lo debo a mi trabajo, a mi humilde negocio que ha quebrado tres veces por muchas razones, entre ellas, por haber sido confianzudo con los "amigos" hasta el punto de hacerme responsable de cuantiosas pérdidas y deudas. Pero nunca pierdo la esperanza ni tampoco acudo a supersticiones religiosas en busca de ayuda o milagros para salir de mis problemas porque soy ateo por lógica. Cada mañana me levanto con fuerza huracanado y continúo viviendo el presente. A muchos les sorprende mi respuesta cuando le devuelvo el saludo con un “Yo siempre estoy bien”.
Por eso en Barahona, ni en ninguna parte, tengo cola que me pisen.No escribo para ganarme la simpatía de nadie o hacerme conocido para”buscarmela como un toro”, lo hago porque desde pequeño me ha gustado escribir. Mis artículos han causado la ira de muchos porque no soy una oveja más en el rebaño. Considero a la clase politica de Barahona corrupta, clientelista, carroñera, encerrada en sí misma, que no se renueva.
¿A qué viene todo esto? Por muchos años no me atrevía a simpatizar con ningún proyecto politico local, hasta que nació el movimiento ciudadano del abogado Praede Olivero. Es tan seductora y diferente la propuesta municipal de Olivero Feliz que ha terminado por llamar mi atención y simpatía, léase bien esto, porque no equivale a un apoyo tácito ya que falta mucho de campaña y habría que esperar cuál será el rumbo de su candidatura. Al doctor Olivero Feliz les acechan peligros que, si se equivoca, la responsabilidad será exclusivamente suya, retándole mucho apoyo en la ciudadanía.
Praede Olivero lo conozco desde la adolescencia, cuando vivía con su familia en una vieja casucha del barrio Camboya. Recuerdo cuando fue dirigente estudiantil, enfrentando en las calles con piedras a la policía balaguerista por la construcción de un nuevo liceo o por las libertades politicas. Resulta muy difícil etiquetarlo como parte de esa nomenclatura politica corrupta que le han causado tanto daño a Barahona porque nunca ha ocupado cargo en ningún gobierno ni ha hecho vida o militancia en los partidos tradicionales que tienen a Barahona sumida en la miseria. Praede Olivero ha sido, en su momento ,solidario con sus amigos y hasta con sus enemigos de profesión.
POR DAVID RAMIREZ