Mueren 54 personas por bomba en Pakistán
EN LAHORE, (Pakistán): Un atacante suicida hizo estallar una bomba el domingo en los alrededores de un retén paramilitar paquistaní cerca de la frontera del país con India, causando la muerte de al menos a 54 personas, en el ataque más grave en el país en varios meses, informaron funcionarios del gobierno y la policía.
La bomba estalló cerca de un retén en el cruce fronterizo de Wagah, en las afueras de Lahore, mientras cientos de personas regresaban de presenciar una desfile militar en las afueras de Lahore, precisó a los reporteros el jefe de la policía provincial, Mushtaq Sukhera.
La bomba estalló cerca de un retén en el cruce fronterizo de Wagah, en las afueras de Lahore, mientras cientos de personas regresaban de presenciar una desfile militar en las afueras de Lahore, precisó a los reporteros el jefe de la policía provincial, Mushtaq Sukhera.
Tanto el ejército de Pakistán como el de India llevan a cabo desfiles militares a diario, donde hacen honores a la bandera en su porción correspondiente de la frontera. A los actos acuden cientos de personas, cantidad que aumenta a miles en fin de semana.
Es probable que aumente la cifra de muertos debido a que había más de 100 personas heridas, varios de ellos en estado crítico, dijo Sukhera.
La policía investiga el atentado. De acuerdo con informes de inteligencia, se sabía que podría ocurrir un ataque en la ciudad, añadió.
Otro funcionario en Lahore, Haider Ashraf, dijo que entre los muertos y heridos había algunos soldados paramilitares. El director provincial de las fuerzas paramilitares, el general Tahir Javed, dijo que tres soldados murieron. Todos los oficiales dijeron que no sabían cual pudo haber sido el objetivo del ataque.
El doctor Khurram Shahzad, del hospital privado Ghurki, informó que entre las víctimas fatales había 10 mujeres y siete niños, así como ocho integrantes de una misma familia. Señaló que los cadáveres de muchos de ellos mostraban numerosas heridas graves.
Imágenes transmitidas por la televisión de Pakistán mostraron a personas empapadas en sangre que gritaban de dolor mientras eran evacuadas a hospitales.
En los hospitales, familiares de las víctimas se golpeaban la cabeza y el pecho mientras lloraban.
Todos los funcionarios dijeron desconocer cuál podía ser el objetivo del atentado. Javed, el funcionario paramilitar, dijo que el atacante se hizo estallar a unos 500 metros del puesto de control operado por paramilitares.
La seguridad se ha incrementado en todas las ciudades principales de Pakistán, a fin de prevenir posibles ataques contra las minorías chiíes que se hallan observando el Ashura, un ritual de 10 días para conmemorar la muerte del imán Husein, nieto del profeta Mahoma.
Sin embargo, dijo Haider, no había procesiones chiíes en la zona donde ocurrió el ataque del domingo.
Jamatul Ahrar, una escisión del Talibán local, se adjudicó la responsabilidad por el ataque. El Talibán paquistaní está formado por varios grupos de milicias.
Ahrar fue creado hace algunos meses por media decena de comandantes de milicias, quienes previamente habían trabajado en el grupo pero tuvieron diferencias con el liderazgo.
Su vocero, Ahsanullah Ahsan, dijo que el ataque suicida formaba parte de la guerra de los milicianos contra los intentos del gobierno de aplicar su versión de la ley islámica en el país. "Continuaremos con esos ataques", dijo a un periodista de The Associated Press desde un sitio no identificado.
Los extremistas han estado librando una guerra contra el Estado desde hace más de una década, en un intento de derrocar al gobierno e instalar su propia versión dura del islam, matando a miles de paquistaníes.