Cury pide que se legisle para crear juez de ejecución
EN SANTO DOMINGO: El jurista Julio Cury insistió en la necesidad de que se legisle para crear la figura del juez de ejecución en materia civil, tras considerar que no hay otra manera de evitar los recurrentes atropellos que suelen cometerse al practicarse embargos ejecutivos.
“Las vías de ejecución continúan prestándose a múltiples abusos, no solo en ausencia de títulos ejecutorios, sino también cuando se procede en virtud de ellos”, expuso. Agregó que hay abogados y alguaciles que sin ignorar la ilegalidad de sus actuaciones, practican embargos ejecutivos tanto en virtud de decisiones judiciales suspendidas en sus efectos como en contra personas a las que le son inoponibles las sentencias por no haber sido parte en el proceso de que emanan.
“Ninguna sentencia adquiere autoridad ni fuerza de cosa juzgada, y por tanto, no se traduce en ejecutoria, hasta tanto no se haya vencido el plazo para impugnarla a través de un recurso que comporte efecto suspensivo”, expresó. Asimismo, explicó que de acuerdo con el principio de la relatividad de la cosa juzgada, la ejecución de la sentencia no tiene lugar “sino entre las partes que intervinieron en el proceso”.
Exhortó a los legisladores a no demorar en aprobar una ley que le transfiera el derecho de otorgar la fuerza pública al juez de la ejecución civil. “Más aún, debe contemplar multas y penas privativas de libertad en perjuicio de abogados y alguaciles que actúen temerariamente y sin el auxilio de la fuerza pública”, concluyó el jurista.
NOTA ENVIADA POR CURY
“Las vías de ejecución continúan prestándose a múltiples abusos, no solo en ausencia de títulos ejecutorios, sino también cuando se procede en virtud de ellos”, expuso. Agregó que hay abogados y alguaciles que sin ignorar la ilegalidad de sus actuaciones, practican embargos ejecutivos tanto en virtud de decisiones judiciales suspendidas en sus efectos como en contra personas a las que le son inoponibles las sentencias por no haber sido parte en el proceso de que emanan.
“Ninguna sentencia adquiere autoridad ni fuerza de cosa juzgada, y por tanto, no se traduce en ejecutoria, hasta tanto no se haya vencido el plazo para impugnarla a través de un recurso que comporte efecto suspensivo”, expresó. Asimismo, explicó que de acuerdo con el principio de la relatividad de la cosa juzgada, la ejecución de la sentencia no tiene lugar “sino entre las partes que intervinieron en el proceso”.
Exhortó a los legisladores a no demorar en aprobar una ley que le transfiera el derecho de otorgar la fuerza pública al juez de la ejecución civil. “Más aún, debe contemplar multas y penas privativas de libertad en perjuicio de abogados y alguaciles que actúen temerariamente y sin el auxilio de la fuerza pública”, concluyó el jurista.
NOTA ENVIADA POR CURY