El paciente cero del virus del Ébola podría ser un niño guineano de dos años
Al parecer y según el diario 'The New York Times', los investigadores habrían encontrado al paciente cero de la epidemia de ébola: un niño de dos años de una aldea en Guinea.
Los científicos sospechan que fue un niño de 2 años de edad, quien murió el 6 de diciembre, tan sólo unos días después de caer enfermo en un pueblo de Guéckédou, en el sureste de Guinea.
Bordeando Sierra Leona y Liberia, Guéckédou está en la intersección de las tres naciones, donde según afirman se encontraron los primeros síntomas de la enfermedad entre la población.
El periodista relata cómo el virus, una semana después, mató a la madre del niño y a la abuela. La hermana de 3 años también enfermó. Todos tenían fiebre, vómitos y diarrea, pero nadie sabía lo que les había enfermado.
El virus llegó a la aldea y se expandió entre la población. Un cuidador y un doctor también murieron al tratar a los pacientes infectados. En el momento que el virus del Ébola fue reconocido, en marzo, decenas de personas habían muerto en ocho comunidades de Guinea, y los casos sospechosos fueron apareciendo en Liberia y Sierra Leona, tres de los países más pobres del mundo, recuperándose de años de guerra política y civil.
En Guéckédou, donde todo comenzó, "el sentimiento era de miedo," comentó el Dr. Kalissa N'fansoumane, director del hospital de la localidad. Tenía que convencer a sus empleados para venir a trabajar, relata el periodista.
El 31 de marzo, Médicos Sin Fronteras, que ha intervenido en numerosos brotes de ébola, advirtió que la enfermedad había entrado en erupción en tantos lugares que la lucha sería enormemente difícil.
Ahora, con 1.779 casos, incluyendo 961 muertes y un pequeño grupo en Nigeria, el brote está fuera de control y sigue empeorando. No sólo es el más grande hasta el momento, sino que tal y como apuntan expertos parece probable que supere las dos docenas de brotes de ébola conocidos anteriormente.
Los epidemiólogos predicen que llevará meses controlar el virus, tal vez muchos meses, y un portavoz de la Organización Mundial de la Salud dijo que se necesitaban miles de
trabajadores de la salud para luchar contra ella.
Algunos expertos advierten que el brote podría desestabilizar a los gobiernos de la región. Ya está causando pánico y trastornos generalizados. Este sábado, Guinea anunció que había cerrado sus fronteras con Sierra Leona y Liberia en un intento por detener la propagación del virus.
Los médicos temen que las muertes por malaria, disentería y otras enfermedades podrían dispararse como el ébola. Numerosos trabajadores de la salud han sido duramente golpeados por el brote: 145 han sido infectadas, y 80 de ellos han muerto.
Los expertos todavía se preguntan cómo el brote se disparó tan rápido y explican que en parte es una consecuencia de la modernización de África, y tal vez una advertencia de que los brotes futuros, que son inevitables, plantearán retos más difíciles.
A diferencia de la mayoría de los brotes anteriores, que se produjeron en puntos localizados, a distancia, éste se inició en una región fronteriza donde las carreteras se han mejorado y la gente viaja mucho. En este caso, la enfermedad estaba en marcha antes de que los funcionarios de salud ni siquiera sabían que se estaba dando.
El periodista refleja que esta parte de África no había visto nunca antes el ébola. Los médicos no lo reconocieron y tampoco disponían del equipo necesario para tratarlo. Los hospitales de la región a menudo carecen de agua, guantes y material médico adecuado, por lo que pueden ser un terreno fértil para las epidemias.
Expertos en salud pública reconocen que la respuesta inicial, tanto a nivel local como a nivel internacional, era inadecuada. "Eso es, obviamente, el caso", dijo el Dr. Thomas R. Frieden, director de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades. "Mira lo que está sucediendo ahora".
Y añadió: "Hace un par de meses, se produjo una falsa sensación de confianza que estaba controlada, un paso atrás, y entonces estalló peor que antes."
Pero el éxito ha llegado con las campañas que enseñan a la población qué es el virus y que al menor síntoma acudan al centro sanitario de la localidad. Gran parte del trabajo también fue hacer entender a la gente que tendría que cambiar las prácticas funerarias que implican tocar cadáveres y que son altamente infecciosas con esta enfermedad. /Fuente. lainformacion.com/.