MUNDIAL, FUTBOL, FRACTURA, FRONTERA IMPERIAL‏


Esta fiesta mundial de la estrategia, la táctica y el musculo organizada por un país del tercer mundo, bloqueada por algunas de las antiguas metrópolis colonialistas, vendiéndola como un fracaso. El gobierno brasileño asumió la responsabilidad y la ha cumplido.


La gran prensa nacional e internacional difundía medias verdades  buscando desacreditar a los gobierno que en 8 años han sacado más de 40 millones de personas de la pobreza, es una guerra político-económica-geográfica sin cuartel, similar a la  del golfo pérsico-IRAK- motorizada por las metrópolis  imperialistas que saquearon 80% del mundo ,La nuestra aun a nivel mediático, manipulando la conciencia con la complicidad de un reducido grupo de lacayos- entreguistas criollos, mantenernos divididos ,para navegar en nuestras heridas.

Guardando las diferencias  recordemos las mentiras de científicos que nos hicieron creer que el agua del lago entraba por fallas tectónicas, hasta que el presidente Danilo impuso la verdad. Similar al drama de la chikungunya muchos seudocientíficos negando al mosquito Aedes agypte como transmisor de este terrible virus.

Más de 4 siglos trajeron  el robo  por contrabando de más 5,920 millones de onzas de oro y 512 millones de onzas de plata llevadas  a Europa, aquí dejaron más de 85 millones de víctimas.

Aquí en el Caribe  en 1508 se inició la conquista de América y 36 años después los españoles entregaban Venezuela a la firma alemana Welzeres Obazares. España era dueña de la vaca, pero otras potencias se tomaban la leche.

Hoy la revolución cubana, palanqueada por la república Bolivariana de Venezuela son la hoja de ruta reivindicadora de los indígenas, morochos, morenos, mestizos, negros y blancos explotados.

La  quilla en el corazón de Madrid, Roma, Tokio, Lisboa, Paris, Atenas, Londres, New York y Washington  se manifiesta en grandes protestas, solo en Estados Unidos 11 millones de inmigrantes y 46 millones de sus habitantes esta fuera de los servicios de salud, mientras un grupito patrocina la guerra en el mundo, Latinoamérica y el Caribe crece la economía sobre el 3% anual.

La copa XX de futbol España, Bélgica, Italia, Portugal, Inglaterra y Estados Unidos derrotados.

 El equipo brasileño  dado como favorito,  el capitán Thaga fue despedido por tarjetas amarillas, igual camino trazaron con Neymar en guía del equipo, no lo lograron, pero 4 minutos antes de terminar el partido Juan Zuñigas se lanzó sobre éste lesionándole la columna vertebral, a nivel de la  tercera lumbar, sin recibir ninguna sanción del árbitro ni de la FIFA,, A partir de aquí el equipo quedó como un autobús sin guía ni capitán, le tocó hacerle frente a la oncena de los tanques alemanes, disciplinados y técnicamente eficientes.

Brasil se  perfila como quinta potencia mundial, es  parte de los países BRICS, los cuales se reunirán en este país  a partir del 14 de julio, tienen diseñada una nueva arquitectura  global, geopolítica y económica, para enfrentar al  neoliberalismo, enemigo de sus propios pueblos.

Las grandes obras ejecutándose en nuestro país son financiadas por el gobierno Brasileño, el Petróleo  por PETROCARIBE, a 1% de interés anual, 10 veces menos que los bonos que vende el Estado Dominicano.

El pasado presidente dejo una deuda de más de tres mil millones de dólares y desvío los fondos a otros fines de los contenidos en el acuerdo, de  darse lo que quieren los neoliberales esos recursos se usarían para los guerreristas neoliberales. ese trasfondo  conspira contra los gobiernos solidarios de Latinoamérica, el Caribe y el  mundo.

Volvamos al mundial de futbol el sábado Brasil y Holanda por el tercer lugar y el domingo  se medirán Argentina y Alemania por la copa mundial, Hemos dado la batalla y ganaremos la guerra para bien del mundo, mientras esperemos muchos arañazos.

Ahora mismo hoy viernes la FIFA acaba de sancionar al equipo Argentino con una multa de us$336 mil dólares, porque dos de sus miembros no asistieron a una reunión, el fin es desmoralizarlos frente al partido del próximo domingo.

 Por:  David Volquez Román
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