Bulevar Larimar Sierra Martín García (Propuesta turística)‏



Por Luis Eduardo Díaz Franjul:



Vamos a tomar en cuenta las siguientes premisas para analizar esta propuesta: 1)"Meta de 10MM de turistas con poco avance". Diario Libre. 14/1/2013; 2) Ref./Google: "52 places to go in 2014 - NYTimes.com, y 3) Periódico Primicias. Semana 1-8 enero 2014./ El caso #1 pone a prueba los planes y capacidad del Gobierno para que los resultados de los próximos años tenga un incremento mayor al promedio (569,356 turistas por año). El caso #2 incluye Barahona como el destino 37 entre los 52 destinos mundiales a visitar en 2014, y el #3 comenta que el país tiene un potencial turístico, que junto a las infraestructuras, seguridad, aeropuertos, puertos, playas, parque nacionales, marinas, monumentos, museos, playas, ríos, cuevas, hoteles, islas y otros recursos ayudan a convertirnos en una potencia turística con capacidad de recibir 10 millones de turistas. Veamos.


 Sin lugar a dudas, las nuevas y modernas autopistas que rodean los principales polos turísticos del país, de manera especial el polo Punta Cana-Bávaro, y aquellas que, por consecuencia, los acercan cada día más al Distrito Nacional, hacen el viaje más placentero para dominicanos y extranjeros. Nos referimos al Bulevar Turístico del Este, la Autopista del Coral y la Autovía del Este. Estas son obras que impulsan el desarrollo turístico para lograr la meta de 10 millones de turistas en 10 años (10X10).

 La inclusión del Distrito Nacional dentro de la Ley de Incentivos 158-01 (derogada por la ley 195-13) y el remozamiento de la Zona Colonial con el préstamo de US$30.0 millones otorgado por el BID a la República Dominicana, son ejecuciones que, junto a nuevas ofertas complementarias, el fomento del turismo de cruceros y modernas vías de comunicación, estimulan la ampliación de la oferta hotelera de la capital, aspectos que facilitan el logro de la meta turística que pretenden las nuevas autoridades.

 Es por eso la importancia de ampliar la infraestructura vial del país que incida con el desarrollo de zonas turísticas de gran potencial que todavía necesitan del apoyo oficial, como es el caso de Barahona y provincias aledañas. Recuerdo que a mediados de los años 70 se rumoró de la existencia de un proyecto vial en Sierra Martín García (y/o Loma El Curro, en el lado costero Azua-Barahona), bordeando el litoral partiendo de Punta Martín García.

 

Para esa época la carretera Santo Domingo-Barahona (Carretera Sánchez) no era lo que es hoy día: una moderna autopista reconstruida desde Santo Domingo hasta Baní. En la actualidad se remodelan algunos tramos de la carretera Baní-Barahona, donde el Cruce de Ocoa es el punto que conecta con la nueva Cibao-Sur que se construye y termina en Piedra Blanca, provincia Monseñor Nouel (Bonao). Esta obra concluirá en 2014 o comienzos de 2015 la que sin duda contribuirá con el desarrollo turístico y comercial Norte-Sur.

 En el caso Azua-Barahona, provincias que comparten Sierra Martín García, no es muy larga la distancia desde Barreras, Azua, hasta su punto limítrofe con Barahona en dicha sierra, partiendo de lo que se conoce como Punta Martín García. Primero hay que construir el tramo Barreras-Punta Martín García para luego proceder con el bulevar que se extendería por el litoral, desde Punta Martín García hasta Puerto Alejandro o la desembocadura del Río Yaque del Sur en Barahona.                                                                                                                                                     

Se trata de un nuevo bulevar turístico y por lo tanto prohibido para vehículos pesados, debido a que, entre otros alcances, contribuirá con el fomento de una nueva oferta turística en el Sur del país, esta vez concentrada en lo que se conoce como Parque Nacional y Reserva Científica Sierra Martín García. De esta forma se amplía la oferta turística de zonas de gran potencial en el Sur y Suroeste de la República Dominicana contempladas en la Ley 195-13.

 En cierto modo, el Bulevar Sierra Martín García (o Bulvar Larimar, como veremos luego) acortaría y facilitaría el desplazamiento vehicular desde la nueva Cibao-Sur, desde Bonao hasta el Cruce de Ocoa, y desde aquí hasta Punta Martín García, que es donde comienza el bulevar. Y no tan solo eso: tenemos informes de que en el litoral de la sierra existen playas que nunca han sido explotadas turísticamente lo que provoca el matrimonio y nacimiento de diversos tipos de turismo en un solo sector, lo que es un privilegio.

 Por otro lado, inadvertidamente observamos un sistema vial "turístico-comercial", como revelan los dos párrafos anteriores, y otro paralelo a ese, estrictamente comercial, que es la carretera que va de Baní a Barahona. Aún así, ambos sistemas serían potencialmente favorecidos si se construyen las avenidas de circunvalación de las ciudades de Baní, Azua y Barahona. Para el caso de Barahona existe un proyecto auspiciado por la Agencia de Cooperación Internacionl del Japón (JICA), que desde años duerme tal como Morfeo en los archivos del Ayuntamiento Barahona.

 De esta manera, y viéndolo todo en su conjunto, la remodelación o construcción de nuevas carreteras y las avenidas de circunvalación Baní, Azua y Barahona, contribuirían con el despertar turístico de una zona de gran potencial como lo es el Sur, independientemente de lo que en el estricto sentido comercial (y hasta cierto punto turístico) pueda lograr la autopista Santo Domingo-Baní y la ampliación de algunos tramos de la carretera Baní-Barahona.

 Por lo tanto, es el momento de poner sobre la mesa el proyecto Bulevar Martín García o Bulevar Larimar para que impacte directamente en el desarrollo turístico no solo de Barahona sino también de Baní, Ocoa y Azua. Estamos hablando de un nuevo "marca país" turístico (larimar) que estimule una inversión hotelera de altos quilates en la región Sur del país para que la Ley 195-13 no se convierta en letra muerta.

 Para lograr ese "sueño mental" se necesita algo más que el bulevar. Es un imperativo el cambio de nombre "Bahía de Neiba" por el de "Bahía de Barahona" (o "Bahía Larimar", preferiblemente). "Bahía Larimar" caería como anillo al dedo a Barahona y Azua (aunque Bahía de Ocoa cambie a Bahía de Azua) para reubicar, destacar y proyectar un destino turístico avalado por: 1) Bulevar Sierra Martín García o Bulevar Larimar, y 2) Cambio de nombre de las dos bahías. Así queda formado el marca país "Larimar" para fines de promoción e inversión turística que destaque el Sur y contribuya con el logro 10X10.

Independientemente de esa meta, así lo quisimos establecer dentro de la Bolsa Ecoturística Hispaniola (Behsa) proponiendo cambios en los nombres de las bahías Neiba y Ocoa (Ref. "Bahía de Neiba y Ocoa son de Barahona y Azua". Listín Diario.14/3/2012). Momentáneamente detuve el tema mientras eperaba deliberaciones sobre la vía Cibao-Sur, para la cual hay tres propuestas: a) Construcción actual (Cruce de Ocoa/S.J. de Ocoa-S.J. de Ocoa/Piedra Blanca), b) Propuesta Cruce de Ocoa/S.J. de Ocoa-S.J. de Ocoa/Constanza (Ref./Google: listin diario behsa), y c) Proyecto Santiago-San Juan de la Maguana. Me aferro a la propuesta b) que en cierta manera coincide con posteriores planteamientos que de manera individual externaron Bernardo Vega, Frank Moya Pons, Eduardo García Michel y R. Osiris de León, entre otros.

 Y es que la propuesta b) contribuye con un mayor desarrollo turístico, comercial y agrícola debido a una mayor integración de provincias, playas y bahías, tanto en el Norte, Sur como en todo el trayecto. La propuesta b) no es un sistema vial estrictamente comercial y de grandes riesgos para el medio ambiente. Entiendo que la propuesta b) también busca los mismos fines turísticos que el Bulevar Sierra Martín García o Bulevar Larimar. Dentro de la planificación turística es una forma de economizar dinero sin dispersarlo. Es una manera de lograr el 10X10 con pragmatismo y visión.

Como presidente de Behsa, y como lo revela el Listín Diario, dije que las provincias de Bahoruco (Neiba) y San José de Ocoa no tienen salidas al mar y que los nombres de ambas zonas marítimas constituyen una "desubicación geográfica", independientemente de las razones históricas o de cualquier otra índole que justificaron su denominación en el pasado. Más bien se trata de "bahías perdidas" lo que amerita un mejor enfoque para su inclusión en la promoción turística internacional. Veremos por qué.

 En el caso de Barahona, los estudios y estrategias se concentran en la ciudad, en el área costera Barahona-Bahoruco/La Ciénaga, y poco o nada en la Sierra de Bahoruco y la Bahía de Neiba, ésta como parte de la provincia de Barahona (suena raro eso, eh?). El potencial turístico de Azua comienza en Palmar de Ocoa (Bahía de Ocoa) donde se puede apreciar uno de los más impresionantes y bellos atardeceres y amaneceres que tiene República Dominicana. En esa bahía sobresalen las playas Caracoles, Biyeya, Carbonito, Puerto Tortuguero, Monte Rio y Playa Vigía.

 Esto implica la rehabilitación de los tramos carreteros de Bahía de Ocoa, ésta como parte de Azua (suena raro eso, eh?) que faciliten el acceso al Bulevar Sierra Martín García. Es la mejor manera de aprovechar y proyectar en mayor grado las playas ubicadas en Palmar de Ocoa (Azua), las del litoral Sierra Martín García (Barahona y Azua) y las ubicadas en Barahona. De esta manera el bulevar se convertiría, quizás o sin quizás, en el bulevar turístico más hermoso y concurrido que pudiera tener República Dominicana, para disfrute de dominicanos y extranjeros.

Por eso vuelvo y repito: el marca país "Bahía Larimar" identificaría Barahona y Azua, aunque el nombre "Bahía de Ocoa" cambie a "Bahía de Azua", al menos que toda la extensión del "Bulevar Martín García" se denomine "Bulevar Larimar". Y es que las provincias del Sur, partiendo de Baní hasta Pedernales, todavía están en la "Era del Descubrimiento de América" con eso de las milenarias bellezas naturales, mientras que Puerto Plata, Samaná y Punta Cana-Bávaro disfrutan de la "Era de la Globalización" gracias a la combinación de playas, grandes hoteles, modernas vías de comunicación y turismo de cruceros. Eso puede ocurrir en el Sur. Por lo tanto, los fondos de la Ley 195-13 (ver decretos que derivan de ella) también tienen que emplearse para promover en el exterior no solo las bondades naturales del Sur, sino también de otras zonas de gran potencial,  en función de nuevas obras viales que como el Bulevar Larimar estimulan la construcción de nuevos proyectos hoteleros.

Es un planteamiento o propuesta turística (Bulevar Larimar) que hago a las presentes autoridades como requisito previo que justifique la inversión vial que aquí se plantea, para darle más sentido a la meta  10X10. Para tales fines, la misma importancia reviste la propuesta b) de Behsa sobre la vía Cibao-Sur. Para que la teoría se convierta en práctica basta imaginar la integración de los polos turísticos del Sur con 10,000 o más habitaciones hoteleras para contribuir con el logro de la meta. Esto no es otra cosa que "Diversificación Turística en República Dominicana", como el estudio previo que hace unos tres años Behsa presentó a los ministros de Turismo, y de Medio Ambiente y Recursos Naturales para el caso específico de Barahona, extensivo al país en general. Bulevar Larimar y la Cibao-Sur es parte de eso.

En esta foto figura Luis Eduardo Díaz Franjul reunido con representantes de la Agencia Internacional del Japón (JICA), que estaban interesados en conocer de este su parecer sobre la Avenida de Circunvalación de Barahona que ellos auspician, obra que para ser realidad necesita del apoyo oficial.
Con tecnología de Blogger.