FOGARATÉ
Mandela, Cuba, nosotros
Por Ramón Colombo
Nelson Mandela, durante y más allá de su largo tormento tras las rejas, nunca olvidó que la firme y prolongada solidaridad de Cuba, con decenas de miles de combatientes, médicos y maestros en África, significó la derrota del ejército sudafricano, mantuvo la independencia de Angola, propició la de Namibia y comenzó el derrumbe del Apartheid. “Cuando África llamó, Cuba respondió”, dijo, ya Presidente, al abrazar a Fidel Castro, no como un mandatario más, sino como un hermano de su pueblo, para orgullo no solo de Cuba, sino también de la solidaria América Latina. No lo olvidemos.
Por Ramón Colombo
Nelson Mandela, durante y más allá de su largo tormento tras las rejas, nunca olvidó que la firme y prolongada solidaridad de Cuba, con decenas de miles de combatientes, médicos y maestros en África, significó la derrota del ejército sudafricano, mantuvo la independencia de Angola, propició la de Namibia y comenzó el derrumbe del Apartheid. “Cuando África llamó, Cuba respondió”, dijo, ya Presidente, al abrazar a Fidel Castro, no como un mandatario más, sino como un hermano de su pueblo, para orgullo no solo de Cuba, sino también de la solidaria América Latina. No lo olvidemos.