Las crónicas de Herrera Miniño…
Por José Antonio Matos Peña
En artículo publicado recientemente por el prestigioso ciudadano Fabio Herrera Miniño, donde afirma un carácter cíclico reciente de la exagerada crecida del lago Enriquillo, que hoy alcanza la extensión superficial mayor que la memoria análoga haya registrado de 450 kilómetros cuadrados, algo más de la mitad de los 850 kilómetros cuadrados máximos alcanzables para verterse en el Mar caribe.
En su crónica, el brillante periodista afirma registrar crecida tan alta, para el 1894, que llegó a estar a medio metro por encima del nivel del mar, lo que nos hace pensar que para la época, localidades de anteriores surgimientos como las Damas ó Duvergé no existieron ó quedaron sepultadas, lo cual no compartimos, aunque las crónicas nazcan de los “santos Norteamericanos”.
Hay que pensar, que el lago Enriquillo, que hoy en día presenta una crecida de 22 metros verticales de subida, para lo que va de siglo, está a aproximadamente 22 metros por debajo del nivel del mar ( 22mbnm ), que para llegar a lo expuesto por Miniño, es decir, llegar a 0.50 metros sobre del nivel del mar( 0.5msnm ), tiene que llegar 22.5 metros más de altura de lo que alcanza hoy, cuya imaginación se la dejamos al amigo (a ) lector (a ), con el adelanto de que casi ninguna carretera de la zona, ni los frentes de la fortaleza de Duvergé quedarían expuestas a nuestra vista, entre ellas, probablemente los 12 kilómetros que comprende el trayecto de Neiba al cruce de la Colonia Mixta de Duvergé.
Somos hijo de don Néstor Matos (fallecido el 13-4-1994), nacido en esta zona, específicamente en el Estero, el 11 de enero de año 1913, recibí de él, la finca que hoy me expropia el Banco Agrícola, de certificado número 5982, expedido en el año 1954, la cual tiene como linderos las parcelas 885, 882, 883, 851, 854 y 853 al oeste de la referida parcela, que es la 886.
La parcela 886, ligadas a familiares de don Néstor con anterioridad, en las que resalta a la memoria, don Gerardo Herasme, cuya propiedad empieza a cubrir el lago, don Pilar Matos Recio, Reinero, los herederos de Pinito etcétera, que quedan al noroeste y oeste, no conocieron ocupación del lago Enriquillo, tan poco la de Cuero de Vaca, sepultada hoy bajo las aguas del lago, a menos de un kilómetro al oeste de el Memiso (parcela 886), donde me contaba mi padre conoció la casa de don Paco Reed, padre de don Mario Reed Vittini, sirven de ejemplo (esta zona, la de Paco Reed, era llamada la colonia arrocera, afamada por la gran productividad).
La población de Duverge, con 3 metros por debajo del nivel del mar (3bnm), en el parque central, no puede haber estado bajo aguas, cuando para el 1892, José Martí en su paso hacia Haití se cayó de la mula que lo transportaba, luxándose un tobillo y teniéndose que hospedar en la casa don Saturno Moquete, en Duvergé.
Finalmente queremos resaltar que la crecida descomunal del lago Enriquillo tiene actores nuevos y diferentes en esta oportunidad, uno, lo es el hecho de que el río Yaque del Sur no había sido afluente del lago Enriquillo y que ahora los suple con más del 75% de las aguas que llevaba a la Bahía de Neiba, por puerto Alejandro, otra realidad es que junto a las aguas que trae el Yaque, están las de las presas de Sabaneta y Sabana Yegua, además de que para el 1956, Trujillo construyó el dique en MENA que derivaba aguas del yaque para el Valle de Neiba y con él, el agigantamiento de la laguna Rincón y que al destruirse tanto el dique de MENA, como las compuertas del caño Tomás, al este de la laguna Rincón, todas esas aguas van a la parte más profunda de la isla, que es la hoya del lago Enriquillo. Por tanto, en toda la problemática, la variable a controlar son las aguas que nos trae el río Yaque del Sur.
NEIBA PROVINCIA BAHORUCO, REPUBLICA DOMINICANA.
30 DE JULIO 2013.
