Gracias Vincho, muchas gracias, muchísimas gracias.. Gracias Vincho, muchas gracias, muchísimas gracias..‏


Por Gustavo Olivo Peña

Marino Vinicio Castillo (Vincho) me acaba de dar una información valiosísima.
 
Ha revelado que Acento.com.do es propiedad de la mafia o de mafiosos, que para el caso es lo mismo.

Si el dato que me aporta el líder de masas de la Fuerza Nacional Progresista es cierto, en honor a tan grande favor me vería obligado, mientras vida tenga, a guardar gratitud hacia mi distinguido compueblano.


En primer lugar porque me acabo de enterar de que Fausto Rosario Adames y yo no somos ya los propietarios de Editora Acento SRL. Los propietarios son los “mafiosos” de los cuales habla

Vincho Castillo, y ese hecho nos quita un gran peso de encima, ya que pasamos a ser simples empleados sin mayor responsabilidad que cumplir una jornada a espera de un sueldo. Así que ya lo saben los enemigos de Acento.com.do, deben dirigir sus odios y baldones hacia esos "mafiosos", no a nosotros sus empleados.

En segundo lugar, porque no me caería nada mal un aumento de mis ingresos fijos.
Como ahora me entero que tengo patronos muy ricos, nada más y nada menos que mafiosos, de inmediato exigiré un aumento de sueldo de por lo menos 300 por ciento.

Y no me vengan con el cuento de que no pueden, pues bien que he aprendido en el cine que ustedes los mafiosos son inmensamente ricos

Así que ya lo saben “mafiosos”, quiero mi aumento ahora mismo, con efecto retroactivo y sin ninguna excusa ni tardanza.

Yo no sé si mis compañeros y compañeras de Acento.com.do, que con tanta entrega y energía cumplen con su labor, dejarán pasar esta oportunidad. Pero les juro, que yo no.

¡¡Aaaahhhh pícaros mafiosos!!!! Pensaban quedarse calladitos con el secreto de que son ustedes los dueños de Acento. Pero Vincho Castillo, este santo varón siempre atento a servir a las mejores causas, en un invaluable aporte a la patria y a mi paciente familia, se ha encargado de ponerlos en evidencia.

Quiero mi aumento de inmediato, más: un vehículo del año cero kilómetro, un seguro médico internacional (de esos que les encantan a los funcionarios de este Estado tan rico y eficiente), vacaciones pagadas en el exterior con reservaciones en primera clase, doble sueldo, salario extra en febrero y bonificación garantizada en un monto no menor de cinco salarios.

Y no me vengan con el cuento de que no pueden, pues bien que he aprendido en el cine que ustedes los mafiosos son inmensamente ricos.

Gracias Vincho, muchas gracias, muchísimas gracias. Desde que los mafiosos mejoren mis ingresos, brindaré en su nombre con una gratitud similar a la buena fe que usted mostró al divulgar tan veraz y útil noticia.

El senador y el mafioso

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