DOMINGO ESPECIAL:Así cayó el narco más buscado del mundo
El narcotraficante italiano Roberto Pannunzi, a su llegada ayer al aeropuerto Fiumicino, de Roma, tras ser deportado desde Colombia.
Foto: EFE
El capo Roberto Pannunzi, capturado en Bogotá, se movía entre Colombia y Venezuela.
Una llamada que Roberto Pannunzi, un veterano narcotraficante de la temida mafia ‘Ndrangheta, hizo a uno de sus contactos en Italia hace una semana fue la clave para que el Gaula de la Policía lo ubicara en Bogotá.
El capo Roberto Pannunzi, capturado en Bogotá, se movía entre Colombia y Venezuela.
Una llamada que Roberto Pannunzi, un veterano narcotraficante de la temida mafia ‘Ndrangheta, hizo a uno de sus contactos en Italia hace una semana fue la clave para que el Gaula de la Policía lo ubicara en Bogotá.
Esa fue la última pista que la Dirección Central Antidrogas de Italia entregó al Gaula del hombre al que consideran el “mayor importador de cocaína del mundo”, según palabras de Nicola Gratteri, subjefe de fiscales de la provincia Reggio Calabria. En su expediente aparece que cada mes enviaba entre 2 y 3 toneladas de cocaína a Europa y EE. UU. desde Suramérica, y que estaba consolidando rutas para el tráfico de heroína. (Lea también: 'Pablo Escobar' de la mafia italiana ya fue deportado a Italia).
No era la primera vez que la Policía de Italia compartía información con el Gaula sobre el capo. Hace cuatro meses, cuando un grupo élite de esa unidad viajó a Roma en busca de Jhon Freddy Manco Torres, alias el ‘Indio’ –capturado en Brasil en junio–, las autoridades italianas pidieron ayuda para dar con el paradero de Pannunzi, de 65 años. “Manifestaron que se había fugado de una cárcel en Italia y que tenían información de que había huido a Brasil, pero que mantenía contactos en Colombia”, contó el general Humberto Guatibonza, director del Gaula.
Ese fue el comienzo de un trabajo conjunto, al que se unió la DEA. Los mismos hombres que siguieron los pasos al ‘Indio’ se dedicaron a buscar a Pannunzi. Conocían, por sus homólogos, que se había fugado en dos oportunidades de cárceles italianas. La primera fue en 1999, cinco años después de que Colombia lo deportara tras capturarlo en Medellín. Por esa época Pannunzi trabajaba para la Cosa Nostra en alianza con Pablo Escobar.
Escurridizo y negociante
Tras esa fuga se refugió en España, donde fue recapturado en el 2004. Pero en el 2010 volvió a escaparse. “Presentaba exámenes médicos que indicaban irregularidades en su estado de salud, lo cual aprovechaba para ser recluido en hospitales y luego fugarse”, dijo el general José Roberto León Riaño, director de la Policía.
Las agencias antidrogas creen que en ese mismo año viajó a Francia y luego a América del Sur. Utilizó uno de sus barcos, en los que solía mover la droga, y viajó de incógnito a Brasil. Allí permaneció un par de meses y luego retomó los contactos con sus antiguos socios en Venezuela –en donde vivía– y Colombia.
Bajo la identidad de Silvano Martino, se movía con tranquilidad entre los dos países, que conocía desde los 90, aunque manteniendo un bajo perfil. Hace poco había optado por visitar Bogotá, donde fue capturado el jueves.
El Gaula había rastreado el número celular que la Policía de Italia detectó una semana atrás. Así establecieron que se reuniría con dos personas en un centro comercial en el norte de la capital.
La Policía explicó que Pannunzi, quien está condenado en Italia a 16 años y medio de cárcel, es considerado como el mayor traficante porque no solo sirve de intermediario para la ‘Ndrangueta, sino también para cada uno de sus clanes. Además, investigan si estaba conectado con los carteles mexicanos y las bandas criminales en Colombia.
Quienes saben de su trayectoria de casi 30 años en el narcotráfico dicen que ‘Bebé’, como era conocido por sus socios, no era un capo asesino ni sanguinario, sino más bien un ‘negociante’, que supo hacer tratos con distintas ‘familias’ de la mafia italiana, a veces incluso rivales.
“Cambió la forma en que opera el negocio, comprendió la nueva dinámica del mercado de la cocaína”, señaló el periodista de investigación experto en mafia italiana Roberto Saviano.
Ayer, Pannunzi llegó a Italia en calidad de deportado y fue recibido por las autoridades de ese país en medio de una gran caravana de seguridad. El subjefe de fiscales de Reggio Calabria espera, sin embargo, que no sea puesto nuevamente bajo arresto domiciliario en un hospital. “Podría intentar una tercera fuga”, advirtió.
Investigan nexos de bandas criminales con mafia italiana
Desde el 2011, la Policía ha detectado un fuerte interés de las mafias italianas por retomar rutas y contactos que mantuvieron en los 90 en el país. Desde esa fecha han sido capturadas 41 personas, de las cuales 7 han sido detenidas este año. Policía, DEA y las autoridades italianas trabajan hoy en desmantelar varias redes.
REDACCIÓN JUSTICIA Y AFP
/TOMADO DE EL TIEMPÒ.COM